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Montañismo y Exploración
Seguridad. Escalada, alpinismo y ferratas
20 octubre 2004


La seguridad es indispensable en la montaña pero cada vez más es notorio que para alcanzarla es necesario poner en tela de juicio las técnicas, aparatos y elementos a los que estamos acostumbrados a usar. Seguridad es un tomo breve pero pero denso que precisa algunos fundamentos sobre los cuales se pueden plantear los posteriores argumentos de seguridad en la técnica.







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Comissione Tecnica Nazionale de Italia. Seguridad. Escalada, alpinismo y ferratas. Ediciones Desnivel, Madrid. 2003. 158 páginas. ISBN: 84-96192-14-8


La seguridad es una norma que debe seguirse en la práctica de los deportes de montaña. Eso lo sabemos casi todos. Pero también es cierto que pocos están de acuerdo en la forma como debe llevarse a cabo esa seguridad pues para escalar una misma pared hay cientos de variables que controlar y que por lo común son dejadas de lado por quienes acometen el acto de escalar. ¿Cómo encarar la seguridad? Pit Schubert ya había todo la llaga en su libro Seguridad y riesgo, el primero que señalaba que entre las múltiples técnicas que se usaban, había que ser lo suficientemente crítico y analítico como para sacar provecho de cada error.

En esta ocasión, la Comissione Tecnica Nazionale de Italia propone un libro breve que ellos mismos denominan en el prefacio "la Biblia de la seguridad". ¿De qué trata? Un vistazo a su índice no indica nada, pero la sola lectura del primer capítulo es capaz de mover la tierra a prácticamente todos los que manejamos términos comunes como el muy conocido "factor de caída" y que se utiliza mucho como parámetro para la resistencia de las cuerdas.

Los autores (porque es toda una comisión de guías de montaña) no le hacen mucho caso porque el valor proporcionado en las cuerdas es de laboratorio, es decir: en condiciones que difícilmente estarán en una situación real. ¿Importa el factor de caída? Sí, pero también hay que reconocer que es importante el "límite de seguridad fisiológico por efecto de una deceleración demasiado fuerte; tal límite fisiológico ha sido fijado en 15 veces el peso corporal de una persona" (p. 16) y todo lo que en realidad se ve involucrado en una caída: deformación de la cuerda por sí misma, la utilización de un seguro dinámico que permite el deslizamiento y freno progresivo y otros factores.

Esto, sólo para comenzar y digamos que hasta ahí, a pesar de lo técnico de la explicación, es lo más sencillo del libro, pues a continuación viene el análisis de cada uno de los elementos de la cadena de seguridad, desde el arnés hasta la cuerda y, por supuesto, el tipo de freno que se utilice (dinámico o estático). Algo que es importante es la diferenciación entre terreno deportivo y terreno de aventura, lo que acarrea situaciones distintas entre sí.

Un manual de montañismo o de escalada en roca es complejo por sí mismo. Esta "Biblia de la seguridad" es mucho más compleja porque no se indica qué hay que hacer sino la forma como se hace una situación especial. Por ejemplo: un ascenso en top-rope en terreno deportivo es diferente que el mismo ascenso en cordada y, claro, hay variaciones entre una forma de ascender y otra.

Aunque en el prefacio se anuncia que el libro es para expertos y principiantes, éstos últimos tendrán serias dificultades en distinguir una técnica de otra si no la han practicado antes. De hecho, cualquier lector deberá poner toda su atención en cada explicación pues se trata de una especie de recetario con puntos específicos para situaciones también específicas.

Lo más importante: no se toca el factor humano en cuanto a posibilidades de error psicológico o de capacidad de realización sino se asume que los lectores son capaces de lo que se menciona en el libro.

Complicado, pero muy importante, Seguridad. Escalada, alpinismo y ferratas es uno de los libros que habrá que estudiar con mucha calma y profundidad para obtener mejores resultados en la técnica y en la seguridad.


Erratas

Página 16, mitad de la primera columna, dice: “1 daN=102 kg (peso) / 1 kN=102 kg (peso).” La medida proporcionada es la misma aunque las unidades distintas, como más adelante se aclara: “…1,200 daN (o 12 kN) y 1,200 kg tienen sustancialmente el mismo valor…”

Página 27, primera tabla, se comparan las fuerzas con que los mosquetones se rompen. En los mosquetones tipo L, el valor “Con cierre abierto” tiene un valor mucho más alto que longitudinalmente. Es posible que en lugar de 6,000 kg sean 600 los anotados por los autores.



 



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