Dorca S. Miller. Rescate. Historias de supervivencia en la tierra y el mar. Ediciones Desnivel, Madrid, 2002. 206 páginas. ISBN: 84-95760-63-0

...la lucha por la vida persiste hasta el final. El hombre no puede rendirse a la lucha.

Ensio Tira

Mantenerse a salvo significa cuidar de uno mismo, lo que a menudo requiere una madurez que sólo se adquiere con la experiencia y la autoexigencia.

Dorca S. Miller

Puede ser una cadena de errores o sólo un segundo de descuido, pero de repente ya se está ahí: metido en una situación de la cual no se puede salir solo y se necesita de la ayuda de los demás. ¿Quiénes? Generalmente hombres bien entrenados y preparados para llevar a cabo una operación de rescate en una montaña. Pero no siempre sucede así. A veces ese momento de descuido o esa mala decisión está realmente lejos de todos los hombres y en este caso se tiene a los propios compañeros o a uno mismo porque la idea es sobrevivir, eso está claro. Pero sobrevivir hasta que llegue la ayuda de fuera, sea de quien sea.

Este es el caso de Rescate, una antología de textos que contienen los episodios de varios hombres y mujeres que tuvieron que decidir qué y cómo hacer en ese momento, hasta el límite de su capacidad y todavía más.

"En cierto modo, cualquiera que sale debe saber tratar con peligros como tormentas, roca mala, aludes, fallo de equipo y error humano. Sobrevivir depende mucho del entrenamiento, la calma, la claridad, la fortaleza de carácter y la suerte (hay quienes dicen que cada uno se fabrica su propia suerte). Y algunas veces, el destino depende también de que nuestros compañeros o rescatadores tengan esas cualidades." (Dorca S. Miller, p. 9)

Podría decirse que forma parte de un conjunto en el que están incluidos Al límite y Hielo, ambos títulos con historia de supervivencia reales. Sin embargo, en Rescate, se pone un mayor énfasis en el rescate porque también los rescatistas son hombres y se pueden ver inmersos en serios problemas:

"La continua revisión de las opciones me hacía dudar de las decisiones ya tomadas. Ninguna elección había sido obvia. Lo que es más, el mundo entero parecía estar conectado. Las comunicaciones que el parque hacía por radio habían sido cortadas para que pudiéramos usar libremente todos los canales. Sabíamos que todos los que nos conocían que tuvieran una radio, incluidas nuestras familias, nos estaban escuchando." (Pete Sinclair, p. 27)

Un libro altamente recomendable para rescatistas y socorristas, pero dirigido a todo mundo, se pueden encontrar perspectivas diferentes de un solo aspecto, como el hecho de la planificación del rescate:

"Atado a la cesta de metal, registré un sutil cambio en el procedimiento. Desde la llegada de Mike a mi solitario emplazamiento, había formado parte de los aconteceres y los preparativos. Durante las presentaciones, el beber agua, los primeros auxilios y las conversaciones sobre la estrategia, yo había participado. Ahora era otra cosa: una sardina en una lata, un saco de patatas, una carga." (Peter Potterfield, p. 111)

En este punto, Pete Sinclair es tajante:

"...Gay [el rescatado] se unió a la discusión. Intenté ser amable, pero en mi opinión, muy poco de lo que discutíamos era de su incumbencia. Su función era soportar el dolor lo mejor posible y evitar morirse de un shock, si era posible. Nosotros nos encargaríamos de sacarle de la montaña. Pero sabía que él no aceptaría este punto de vista, más que nada por la dificultad de concentrarse en el propio dolor." (Pete Sinclair, p. 21-22)

Casos reales todos, desde el ya legendario descenso de El Ogro por Chris Bonington con las costillas rotas y Doug Scott con ambas piernas fracturadas, hasta los más desconocidos como el de Ensio tira, náufrago en una balsa por más de un mes, se encuentran en este tomo como muestras de la voluntad del hombre por sobrevivir, sin olvidar la intromisión de personas que no participan en los rescates y que después cargan con la gloria de haberlo realizado:

"Se rumorea que se está organizando un rescate, su presencia allí les hace voluntarios. No es que vayan a colaborar efectivamente en la operación, lo que importa es estar lo suficientemente cerca para después poder decir que estuvieron allí." (Geoffrey Childs, p. 49)

¿Cuál es la diferencia entre un caso de supervivencia y otro?

"La mayoría de la gente que tiene problemas en estos relatos espera superar sus dificultades... Muchas de las personas que habían estado en situaciones difíciles antes, y confían en que su entrenamiento y su experiencia les ayuden a superarlos. Otros, afortunados, confían en la habilidad, valentía y buena voluntad de las personas que les salvan." (p. 8)

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Erratas

Página 57, línea 5 del párrafo 12, dice: "Lo hizo con tornillos de hielo" En esa época no había tornillos de hielo tal como los usamos actualmente, sino clavos de hielo.

Página 59, línea 24, dice: "...abajo, en el Dleine Scheidegg." El nombre del refugio es Kleine Scheidegg.