El segundo día del Festival Banff de Cine de Montaña en su gira en México inició más temprano. La razón: habría dos funciones ese mismo día. La sala se llenó en las dos ocasiones, incluso familias enteras estaban presentes. Este día, las películas presentadas fueron:
La frontera
Una película de Rush Sturges que muestra a un grupo de kayakistas saltar de cascadas de gran dificultad, algunas que nunca habían sido “montadas” antes. En la película aparece el kayakista mexicano Rafa Ortiz, quien recientemente participó en la expedición Amazon Express. Rafa estaba invitado para presentar esta película pero a última hora no pudo asistir.
Escalar se puede hacer en cualquier lado, pero ¿qué tantas paredes hay en el mundo que aún pueden ser escaladas por primera vez? Un viaje al desierto de Sahara descubre agujas rocosas donde aún se puede explorar. “Un viaje con Mark [Synnot] es siempre una locura. No sabes qué vas a encontrar, pero siempre es mucho más de lo que esperabas”. En la película, los escaladores son, además de Mark, Alex Honnold y James Pearson.
El coleccionista de caminos
“La gente colecciona todo tipo de cosas. Coleccionamos estampillas, monedas, arte. Durante mi primer día en una bicicleta de montaña, comencé a coleccionar caminos.” El video no tiene nada especial, sino el descenso del ciclista por diferentes caminos de la Europa alemana.
Cold ha Ganado muchos premios en festivales de cine de montaña, entre ellos el Inkafest, este año. Es la historia del primer ascenso al Gasherbrum II en invierno por Simone Moro, Denis Urubko y Cory Richards. El guión, escrito por Kelly Cordes y seguido por las imágenes de Cory Richards, lleva al espectador de la mano a los sentimientos que lleva estar en esa montaña durante el invierno: sólo frío.
Peter McBride vive en una granja donde desvían el agua para sus cosechas y se pregunta cuánta de esa agua llegará al mar y cuánto tiempo llevará. Así explora el Gran Cañón, pero en vez de recorrerlo todo, lo hace por aire e investiga la forma en que es usada el agua del Río Colorado. La respuesta es que desde 1998, el río Colorado ya no llega al mar. Ellos mismos tienen que caminar varios kilómetros para alcanzar la costa sobre un terreno árido.
Dos sherpas deciden hacer algo nunca intentado antes y lo logran: subir el Everest y saltar en parapente desde su cima para aterrizar en una población a miles de metros por debajo de donde despegaron. Pero también continúan su viaje en kayak hasta el mar. Por esto, los dos sherpas fueron nominados como Aventureros del año por la National Geographic.