EFE

Ciudad de México.- La mexicana Elsa Ávila, la primera latinoamericana que alcanzó la cima del Everest, dijo que los deportistas de su país deben dejar de quejarse por la falta de apoyos gubernamentales y simplemente “hacerlo”.

“Yo podría ser una ex deportista amargada y frustrada porque no me apoyaron, sin embargo lo encontré y no fue fácil”, aseguró Ávila, retirada por problemas cardiacos.

Opinó que “la gente en México es muy conformista y mediocre”.

“No nos preparamos, nos gusta quejarnos mucho. Dejamos que otros solucionen las cosas y luego protestamos porque esa solución no era la correcta, pero no hacemos algo al respecto”, indicó.

Ávila recordó que cuando subió al Everest en 1999, el entonces presidente de la Confederación Deportiva Mexicana le negó la carta de aval que necesitaba y ella buscó la forma de hacerlo sin su apoyo, aunque le previno de que si lo conseguía luego no se acercara a ella.

La ex alpinista indicó que muchas veces el deportista no consigue apoyos “por tonterías, por cuestiones políticas en las que tratan de embarrar al deportista”.

“Ya cuando brillas entonces sí, todos se acercan”, criticó.

La deportista, de 44 años, indicó que a su ex marido, Carlos Carsolio, también le negaron la carta aval cuando fue a hacer sus catorce ascensos a montañas de 8 mil metros o más, para convertirse en el cuarto ser humano de la historia en conseguirlo.

Recordó que para realizar la primera gran expedición en la que fue a participar, para escalar el Nanga Parbat, una montaña de Pakistán que posee la pared más grande del mundo con una altura de 4.500 metros, tampoco fue fácil encontrar la financiación.

“Vivimos en un país donde el alpinismo no es el deporte mayoritariamente practicado ni apoyado”, dijo.

Según señaló, tuvieron que convencer a los patrocinadores de que la aventura podría explotarse comercialmente y “ tocar muchas puertas”.

“No cualquiera te va dar dinero para que vayas a cumplir tu sueño, nos convertimos en vendedores de un sueño”, aseveró.

Ávila también ganó diversas competencias por equipo de deporte extremo de 1999 al 2001, en remo, escalada, natación, carrera, bicicleta de montaña, orientación y rafting, entre otras.

Sin embargo reconoció que desde entonces sí ha habido cambios en el deporte, aunque aún falta participación.

Al deportista actual, que en ocasiones se queja de no poder alcanzar sus metas por la falta de apoyo gubernamental, le recomendó: “Eres mexicano, tienes dotes, atrévete y hazlo”.