Hace años, en uno de los festivales Banff de Cine de Montaña, pudimos apreciar a un perro que realmente escalaba usando patas, cabeza y el cuerpo todo para avanzar donde la mayoría de los perros se detenían. En ese momento, el filme gustó a la mayoría.

Quizá fue ese perro, no lo sabemos de cierto, pero el caso es que ya hay muchos animales trepando las paredes. O bueno: lo que pudiera ser considerado a primera vista como un animal: personas con botargas de animales que trepan o hacen alguna otra actividad de montañismo.

Corrijamos: no se trata estrictamente de una botarga, sino de un fursuit, es decir: un traje con forma animal que es una representación de la persona que va dentro. Porque quien porta el traje no es sólo un portador, sino un miembro de una comunidad que al parecer ha crecido más allá de lo que ellos mismos podían esperar.

El término genérico para ellos es furry (plural: furries) y proviene del inglés. Su significado literal es: peludo. Así de sencillo.

Como en cualquier lado que hay botargas, cuando hay furries, parece haber una conmoción entre los niños. Y bueno, estos personajes ya comenzaron a llegar a escena en el montañismo, principalmente en los muros de escalada donde, al parecer, son bastante bien aceptados, sobre todo por los niños escaladores.

Los personajes dan rienda suelta a su alegría y diversión una vez que están dentro del traje. Es la facilidad del anonimato. Pero convendría que alguien se acercara a ellos y les dijera que deben seguir normas de seguridad. En el tercer video, la cuerda está sujeta de un cable de acero movible y en el último, el furry da saltos sobre la cuerda del rapel que está recargada en una arista. Ambas son evitadas por tratarse de riesgos de seguridad.

Como sea, parece que esta será la nueva forma de atraer a la gente a la escalada de forma masiva. Sólo un comentario: ten cuidado de tus mascotas, no sea que quieran usar tu arnés.