En el norte de la provincia de La Rioja, en la porción argentina de los Andes de Atacama, se encuentra, entre los más altos volcanes del mundo, la Caldera del Inca Pillo. Este nombre recogido por el IGN [Instituto Geográfico Nacional] de la República Argentina también reconoce otras denominaciones como Corona del Inca o Cráter Escondido.
Aproximación en vehículo 4x4.
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Lo que queda fuera de dudas es que es uno de los paisajes mas cautivantes de la zona. Esta cuenca cerrada y enmarcada al norte por el gigante Pissis (6,795 metros) y al sur por la cuarta cumbre de América el Bonete (6,759), posee sus límites oeste y este en los cordones del Veladero y de los Pioneros respectivamente. Alberga a más de 5,300 metros un profundo cráter de 150 metros de diámetro donde sus aguas permanecen liquidas durante los 12 meses del año. Sólo unos témpanos rompen la monotonía del azul profundo.
La Cadena del Veladero con sus cumbres Boboso (6,070), Reclus (6,335) y Gemelos (6,196) se elevan al occidente y frente a ellas se yergue el Cordón de los Pioneros, bautizado así para recordar a los primeros exploradores que recorrieron la región. De altura similar al del Veladero recorta cinco cumbres superiores a los seis mil metros alineadas de norte a sur: 6,092, 6,222, 6,152, 6,125 y 6,144 respectivamente. Hasta la fecha sólo se registraba un ascenso a la tercera cumbre (la principal) por un grupo italiano en enero de 2002.
El Cordón de los Pioneros.
El 31 de octubre de 2010 un grupo formado en su mayoría por montañistas marplatenses partió dentro del marco de la Expedición Bicenterario en busca de una de las cumbres del Cordón de los Pioneros. La Expedición Bicentenario es un proyecto que se está desarrollando en la República Argentina para conmemorar los 200 años del primer gobierno patrio y consiste en reflexionar sobre los sueños de los niños argentinos y la posibilidad de que puedan compartirlos con la generación del tricentenario. Durante todo el 2010 se recorrieron escuelas para que los niños dibujen o escriban sus sueños para los próximos 100 años y una expedición por provincia sería la encargada de plantarlos en marcos naturales imponentes para que germinen durante la próxima centuria.
En la Caldera Inca.
Convencidos que el andinismo es una actividad cultural que combina deporte, historia, arte y compromiso con la cultura autóctona, quienes nos dirigimos a La Rioja tuvimos como objetivo trabajar los sueños con los alumnos de Alto Jague, el último pueblo en nuestro paso a la montaña. Complementariamente a la actividad deportiva uno de los objetivos planteados fue filmar en HD un documental reflejando la realidad cultural del entorno a la montaña y el ascenso al pico.
Durante una jornada escolar conocimos los sueños de los chicos y sus maestras y descubrimos que los andinistas pioneros de la región (hace mas de 40 años de esto) también habían dejado su impronta en esa escuela lejana. En la década de 1960, el profesor Vicente Cicchitti había colaborado con la escuela de Alto Jague y se había comprometido con la comunidad. El pionero recordado en uno de los picos del cordón hacia donde nos dirigíamos, marcaba nuestro camino desde antes de lo previsto.
Ascenso por el glaciar.
Dos noches en el refugio del Peñon (3,600), un ascenso al cerro Chepical (4,646) y dos noches en el refugio Mulas Muertas (4,200) dejó el terreno preparado para un ascenso al Cerro Pilar (5,032) en busca de la aclimatación necesaria. Logramos así el tercer ascenso del cerro y pudimos observar los vestigios de las culturas pretéritas que lo habían subido hace mas de 500 años con fines ceremoniales.
Luego de este ascenso comenzó la parte definitiva de la expedición. Con los vehículos 4x4 avanzamos 30 km por la pampa del Veladero y por la Quebrada del Medio hasta un campamento que utilizaríamos como base a mas de 5,100 metros. Al otro día continuamos por el lecho del río que se desdibujaba y ascendimos hasta el plateau de la montaña (5,400). Ya tarde alcanzamos los 5,570 metros del campamento de altura bajo un cielo oscuro que presagiaba la nevada.
Hacia la cima.
Para aprovechar la calma del viento, desde temprano y antes de la salida del sol del día siguiente, comenzamos a salvar el desnivel que nos llevaría a la cumbre norte del cordón de los Pioneros. Junto a un largo nevero que descendía por su filo suroeste ganamos altura hasta el col sur. En este punto (5,850) comenzó a soplar un viento constante de 60 km por hora con ráfagas aún mayores.
La escalada continuó por el filo sur entre grandes bloques hasta la zona cumbrera. Utilizando en algunos casos las manos para progresar salvamos los últimos metros hasta la cumbre misma (6092 metros) logrando el primer ascenso del pico.
La cumbre Bicentenario desde el SW.
Sabíamos que no tenía nombre propio y propusimos el nombre “Bicentenario” para este pico del Cordón de los Pioneros. En medio del vendaval colocamos el tubo con los sueños de nuestros niños como un mensaje que viajará durante 100 años para que sea recuperado por la generación del tricentenario y pueda reflexionar sobre los sueños que tenemos hoy y analizar si se pudieron lograr.
El andinismo aún nos permite hollar, en estas latitudes, picos vírgenes y escribir nuestra propia historia. Solo es necesario hacerlo en un marco respetuoso de la naturaleza y de la cultura propia de la región.
En la cima, con un fuerte viento.
Ubicación: La Rioja, ArgentinaCoordenadas: S 27º 55 16,2 W 68º 45 12,2Altura: 6,092 metrosIntegrantes: Eduardo Namur, Juan Labra, Lelio De Crocci, Claudio Valva, Daniel Pontin, Guillermo AlmarazFecha del primer ascenso: noviembre 7 del 2010
Los sueños de los niños depositados en la cima.
En la Laguna Brava
Los participantes. De izq. a derecha y de arriba abajo:Claudio Valva, Juan Labra, Lelio De Crocci, Eduardo Namur, Guillermo Almaraz y Daniel Pontin
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