Tras una fuerte nevada que lleno la montaña de nieve desde una altura menor a la del refugio (Piedra grande), tres excursionistas arribaron a la montaña el viernes 9 de febrero. Uno de ellos no tenía ninguna experiencia en montaña más allá de un par de meses esquiando; el segundo había ascendido con muchas dificultades tres años antes el Pico de Orizaba e intentado subir el Iztaccíhuatl dos años antes.
El tercero era el “líder” del equipo, con poca experiencia (dos ascensos al Pico de Orizaba y un ascenso al Iztaccíhuatl). Les dijo que descansaran esa noche porque a las dos de la mañana planeaban salir junto con un grupo de 12 estadounidenses para intentar la cumbre.
El camino rumbo al glaciar Jamapa, completamente nevado.En la parte superior derecha, se ve la cumbre.
Fotos: Jorge Herrera Prado
Pero a las dos de la mañana la nevada no cesaba y la salida la hicieron hasta las 7:30 de la mañana. El líder no logró encontrar sus gogles, por lo que inició el ascenso sin ellos. Debido a lo difícil del ascenso (había nevado con fuerza una noche antes) no les fue posible subir más allá de la altura del Sarcófago, prácticamente al inicio del glaciar Jamapa. La nieve caída había acumulado 25 cm fuera del refugio y aproximadamente 35-40 cm en al glaciar.
Iniciaron el descenso y llegaron al refugio a las dos de la tarde, todavía con luz salieron a tomar fotos de los alrededores y no fue sino hasta las seis que entraron el refugio ya que intentarían ascender nuevamente el domingo por la madrugada.
A las siete de la noche, el líder comenzó a sentir un malestar en los ojos (parecido a una basura molesta dentro de los ojos) e intentó quitarse esa “basura” sin ningún éxito. Durante las siguientes horas intentó que los ojos le lloraran, colocarse agua en los ojos y demás remedios para retirarse la molestia pero lejos de disminuir, aumentó hasta el grado de hacerle imposible pernoctar.
Alrededor de la medianoche los integrantes del equipo comenzaron a alistar su equipo y vestirse para salir a las dos de la madrugada junto con otro equipo de estadounidenses que intentaría el ascenso. El enfermo intentó vestirse pero le era imposible permanecer con los ojos abiertos por más de unos pocos segundos, así que intentó vestirse a ciegas.
Después de una hora, alguien encendió una vela y esto delató la condición de los ojos del líder: no podía soportar esa luz y desistió en su ascenso. Sus compañeros intentaron el ascenso pero el cansancio del día anterior no los dejó llegar más allá del glaciar.
Los tres excursionistas comenzaron su descenso a las 10 de la mañana hasta Tlalchichuca con el enfermo impedido de la vista. Permaneció así durante tres días más, hasta que fue atendido por un especialista y su diagnóstico fue: quemadura de córnea. La recomendación fue de seis días de medicamento (que contiene dexametazona) y reposo de exposiciones similares a la radiación solar.
Resumen técnico
Lugar: Pico de Orizaba (Citlaltépetl) por la ruta norte, Glaciar de Jamapa
Terreno: Roca, nieve profunda, hielo
Ascenso/descenso: durante el Ascenso
Causa inmediata: Falta de protección en los ojos y reflexión de rayos solares
Causas que contribuyeron: nevada reciente y abundante
Edad: 22 años
Nivel de experiencia: Elemental
Fecha: 9 de febrero del 2009
Tipo de herida o enfermedad: Quemadura de córnea
Rumbo al glaciar Jamapa, con el terreno nevado y nublado. Puede parecer que no hay tanta luz, pero puede quemar la retina