Heidi Pesterfield. Escalada clásica de primero. Cómo sobrevivir al aprendizaje. Ediciones Desnivel, Madrid. 2006. 223 páginas. ISBN: 9788498290462
Escalar de primero supone un juego de exploración y descubrimiento.
La escalada clásica es una cosa seria, notablemente más compleja que la escalada deportiva, el bloque o escalar con la cuerda por arriba.
Pensado como un libro que pueda servir a escaladores con cierta preparación, pero no para novatos totales, Escalada clásica de primero pretende introducir al lector en el mundo de la escalada clásica y más específicamente como primero.
Desafortunadamente para los autores actuales, siempre será preciso referirse a la escalada deportiva pues la mayoría de los prospectos habrán practicado en algún momento en la escalada sobre resina y habrán tenido la sensación de avanzar con mucha rapidez, lo que les hace pensar que abordar una pared “de verdad” puede hacerse en menos tiempo de lo que se dice.
Así, la autora aborda este punto y pasa a definir la escalada clásica en términos de aventura, de peligro objetivo y subjetivo y como un deporte en el que es preferible pensar no caerse, a diferencia de la deportiva, en que se puede uno caer las veces que se quiera pues los muros están pensados para superar dificultades de grado y minimizan los riesgos para que pueda hacerse.
El contenido del libro es el de la mayoría de los manuales de escalada, prácticamente sin cambio, salvo en que cuando se da una explicación se abunda en detalles tanto que al final no se sabe de qué se habla. Me explico: cuando uno está en un lugar que no conoce y pregunta por una dirección determinada, es común que la gente nos responda bien, pero cuando les hubimos entendido, repiten lo mismo con más detalles. Se da las gracias y dispuestos a marcharse, repiten una vez más las señas, pero con más detalles. Al final, tanta información confunde.
El libro no tiene una gran diferencia con muchos otros manuales de escalada, salvo el título. El nivel es bastante sencillo como para hacer hincapié en que no es para novatos. Vale la pena la inclusión de muchos recuadros en los que diferentes escaladores aportan su punto de vista de la escalada clásica.
Al final tiene cuatro apéndices muy breves pero muy valiosos sobre “La revolución de la escalada limpia”, “Estilos de escalar de primero”, “Estilos previos de escalada deportiva” y “La controversia de las cuerdas fijas y el uso del taladro”. Estos apéndices deberían leerse con mucho cuidado.
Un glosario al final del libro ayuda a definir los términos a quienes no los conozcan.
