Jesús Montesa y Obdulia García. Autorrescate en barrancos. Ediciones Desnivel, Madrid. 2005, 186 páginas. ISBN: 978-84-96192-88-1
Tener una eventualidad en montaña es siempre una posibilidad que debería tenerse en cuenta. Y por supuesto, en barrancos y cañones las condiciones son muy distintas, pues si bien se está en una montaña, una lluvia puede afectar mucho el desarrollo de la actividad. Con esto en mente, los autores se dieron a la tarea de escribir un manual donde se reúnen muchas maniobras que se pueden utilizar en el autorrescate en barrancos.
“…el objetivo es construir maniobras de autorrescate a partir de nuestros conocimientos, nuestros recursos materiales y la situación específica que, en cada maniobra de autorrescate, nos impone el medio, y no aprender complejas y largas maniobras.” (p. 15-16)
Las maniobras son bastante específicas pero están explicadas por tantas maneras que llegan a ser bastante confusas para quienes no hayan practicado antes lo más básico. Como cuando a uno le explican cómo llegar a un sitio que no se conoce pero tantas veces que es más complicado que al principio.
Tiene algunos errores de imprecisión. Por ejemplo:
“Cerrar siempre los seguros de los mosquetones de seguridad. Si los dejamos sin cerrar, son mucho menos resistentes.” Eso es cierto, pero más que nada deben cerrarse porque su función específica es estar cerrados, por eso son de seguridad. (p. 22)
También sigue considerando al nudo As de guía (bulín) para la práctica: “El as de guía es seguramente el nudo más clásico y puede que más en desuso, sobre todo porque, si lo realizamos por chicote y después le aplicamos una carga lateral, desliza y se podría deshacer. Frente a esto, la gran ventaja del as de guía respecto a otros nudos es que se puede deshacer con suma facilidad, aunque haya estado sometido a grandes cargas.” (p. 33)
Puntos importantes abarcados en este título son la descripción del síndrome del arnés y la hipotermia.
La combinación de nombres y de una nueva clasificación que proponen sobre los nudos, la inclusión de un glosario al principio de la obra y el uso de términos que no son muy comunes en el idioma español, hacen un verdadero caos entender el tomo. Es, quizá, un libro que los especialistas deberán analizar para sacar algo de él. El resto sólo podría obtener técnicas sencillas, pero no asimilar la complejidad de la maniobra en total.
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