Adriana Díaz Reyes
El Universal
Domingo 24 de diciembre de 2006
Cuando Carlos Carsolio se eleva en su parapente, es como si por un momento tuviera alas.
Y la adrenalina que le produce el vuelo, es casi la misma que siente cuando piensa que está cada vez más cerca de cumplir la meta de cruzar el país de costa a costa en el inusual transporte.
“Ha sido una experiencia maravillosa, puedes tocar las nubes, volar en compañía de aves y ver la tierra desde el cielo. Subir al parapente es un privilegio que pocas personas pueden experimentar y me siento muy orgulloso de poder intentar una travesía de este tipo”, comentó el mexicano, quien también fue el cuarto y más joven alpinista en ascender las 14 montañas más altas del planeta.
Hasta ahora, Carlos y su equipo de trabajo han recorrido 10% del trayecto. Y aunque no todo ha sido color de rosa, está seguro de que nada les impedirá cumplir con su ambiciosa meta.
“Vamos bien en el recorrido. Incluso hemos gastado menos tiempo que el que habíamos presupuestado. También tuvimos algunas complicaciones, pero hemos logrado superarlas gracias al trabajo de equipo que hemos llevado a cabo”, dijo.
Sin la ayuda de un motor y acompañado únicamente por el sonido del viento y la naturaleza, Carlos apuesta toda su energía en cada despegue.
“Me he sentido muy bien. Volar es una sensación que te llena mucho, porque te sientes libre y con mucha tranquilidad. Después de practicar muchos años el alpinismo, esta experiencia me ha llenado de energía y nuevos retos”.
Junto con el ex alpinista viajan Mónica Uranga y Miguel Gutiérrez, pilotos apasionados por el vuelo libre en campo traviesa.
Los tres están conscientes de los peligros a los que se enfrentarán, pero aseguran que no van a claudicar en su intento por cruzar el país.
“Tenemos la experiencia necesaria para afrontar situaciones difíciles. Además somos un equipo y si a uno le sucede algo, están los otros dos para auxiliarlo”.
El jueves pasado, Mónica, dos veces campeona nacional y madre de dos niños, resolvió con éxito una difícil situación, pues tuvo que aterrizar en una zona boscosa y complicada.
“Mónica tuvo algunos problemas y bajó antes de lo previsto. Fue un problema difícil, pero afortunadamente lo pudo superar con ayuda de Miguel”.
Este fin de semana, los tricolores cruzarán por el sur de Jalisco, concretamente por los municipios de Tamazula y Mazamitla, lugar donde celebrarán la Navidad en compañía de sus familiares.
“Estaremos en unas cabañas de un amigo. Es una zona muy bella de Guadalajara y muy linda para pasar la Navidad”.
La travesía comenzó el 13 de noviembre y se tiene planeado que culmine en 60 días aproximadamente.
“Es la primera vez que unos deportistas intentan esto. Si lo conseguimos será un logro histórico para el deporte de nuestro país. Nosotros vamos a poner todo para lograrlo”.