Con un presupuesto de 30 mil dólares la pareja inicia esta expedición con la confianza de haber logrado otras cumbres de las llamadas ochomiles. Durante la conferencia de prensa en la que dieron a conocer los planes que seguirá la expedición, Bonilla expresó: “El montañismo es una oportunidad de aprender lo capaces o débiles que somos y con toda humildad aceptarlo”, y agregó que “el montañismo es una inyección de vida, porque de alguna manera te enfrentas a ti mismo y la mejor manera de enfrentar esta vida es conociéndote a ti mismo”.

Agustín Gómez, representante de la Comisión Nacional del Deporte (Conade), dijo que la pareja de montañistas tiene todo el apoyo del organismo y que confía en que logren la cumbre en el tiempo que tienen estimado. Cabe resaltar que para esta pareja en ascenso éste será su segundo intento en subir la mencionada montaña, ya que durante los meses septiembre y octubre del año pasado buscaron la cumbre sin lograrla por diversas cuestiones, como los atentados del 11 de septiembre en Nueva York, que retrasaron los vuelos en que viajarían a Canadá, y con ello la temporada idónea para ascender.

Bonilla y López agradecieron en especial a la Conade, que a través del Fondo Nacional del Deporte (Fonade) les facilitó todos los trámites para lograr esta expedición.

Premio Nacional del Deporte 2002

La carrera de Badía Bonilla está llena de logros profesionales y deportivos: licenciada en nutrición por la Universidad Autónoma Metropolitana y corredora de distancias largas y de medio fondo, se inició en el alpinismo con el fin de mejorar sus marcas deportivas, invitada por su ahora esposo, Mauricio López, ha logrado convertirse en una de las mejores alpinistas mexicanas. Dentro de los triunfos que ha logrado están las cimas del Everest con más de 8 mil metros; el Cho Oyu de 8 mil 201, conquistado en 2000; en 1997 el monte Aconcagua de 6 mil 996 metros y en México el Popocatépetl, Pico de Orizaba y el Iztaccíhuatl.

Cabe resaltar que después del éxito obtenido en el Everest, Badía Bonilla se convirtió en la tercer mujer mexicana en posarse en el sitio más alto del mundo, después de Elsa Carsolio y Karla Wheelock, lo que la convierte en una candidata al Premio Nacional del Deporte 2002, junto con Iridia Salazar, ganadora de medalla de oro en taekwondo, que será entregado en noviembre próximo.

Eduardo Lazo Ruiz

Milenio