Hace pocos dÃas, el foro de discusión Xtremers, se vio sorprendido con una noticia de hace once años:
Hola a todos mi nombre es Carlos Santana Ã?lvarez [...] Soy nuevo en este foro y me da mucho gusto haber encontrado un lugar tan interesante, que después de lo que he oÃdo es el centro de comunicación de todos los montañistas.
Llegué a este foro a pesar del interés, y además buscando a una persona. Su nombre es César Sánchez. es todo lo que se de él. Hace once años cuando empezaba a subir montañas con mi hermano, tuve un accidente[...]
Todos estaban histéricos pero cuando se encontraron con él, les ayudó a organizar mi rescate [...] se quedó conmigo toda la noche. luego me llevo en la mañana cargando a espaldas hasta [el refugio de] Chalchoapan donde lograron que subiera un helicóptero de la policÃa.
Me llevaron a la Cruz Roja de Polanco y de ahà no supe más. Mi hermano que se quedó me dijo que después de que el helicóptero se fue, César sólo le dijo su nombre, y que era estudiante de medicina. Y después tomó sus cosas y se bajó.
[...] Ahora que sé un poquito más, me acuerdo de que de no haber sido por alguien que hizo todo en el momento preciso, no estarÃa aquÃ. Ã?ltimamente he ido a la montaña, he oÃdo mencionar de él, y de este foro. Me imagino que ya se tituló. Sólo quiero poder agradecerle en persona su gesto. ¿Alguien conoce a César?
Carlos Santana.
Por supuesto, todos conocemos a César Sánchez Vázquez del Mercado, pero ninguno de quienes lo conocemos habÃamos oÃdo mención de este suceso. Y desde este espacio, nos hemos quedado sin palabras, porque los hechos son más abrumadores que todos los elogios, incluidos los que recibe por su reciente expedición a la Cordillera Blanca de Perú.
LA SEGUNDA MONTAÃ?A MÃ?S ALTA DEL MUNDO
En 1981, un alpinista polaco llegó a nuestras instalaciones y comenzó a platicar de montaña. De esa y posteriores conversaciones surgió una invitación formal de una expedición polaca que tratarÃa de ascender el K2 por una nueva vÃa en 1982, a dos años después del primer ascenso mexicano a una montaña de ocho mil metros, el Kangchenjunga Oeste. Los preparativos fueron entonces más veloces que en la primera expedición y el 14 de junio, seis universitarios volaban hacia el Karakorum en pos de un nuevo horizonte. Los resultados de la expedición habÃan sido publicados en la revista Montañismo y Exploración, en un número especial.