En 1978, un grupo de los mejores escaladores estadounidenses se dirigieron a uno de esos pequeños picos en regiones poco conocidas del Karakorum para escalar un pico que no había sido escalado antes, aunque sí lo habían intentado tres expediciones: el Latok I. James Donini, Michael Kennedy, George Lowe y Jeff Lowe pasaron 26 días en la pared y llegaron muy cerca de la cumbre en estilo alpino, cuando ya casi todos los problemas se habían resuelto. Una tormenta, la falta de comida y una enfermedad de Jeff Lowe los obligaron a bajar.

Las caras norte del Latok 3 (izquierda y Latok I (centro), tomadas desde el CB en el 2008
Fotos: cortesía de Colin Haley
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Han pasado 31 años desde entonces y esa escalada no concluida sigue siendo considerada como una de las mejores, pese a no haber sido concluida. Además, nadie ha llegado tan alto como ellos en ese entonces.

Hace poco, otros dos escaladores se dirigieron al Latok I: Colin Haley, Josh Wharton y Dylan Johnson, con el mismo propósito: ser los primeros en alcanzar la cima de esa pared inescalada. Primero hicieron varios ascensos de aclimatación a los picos circundantes y luego, el 8 de julio a la medianoche salieron hacia la arista norte.

Una avalancha masiva de seracs caen el glaciar Choktoi desde dos mil metros sobre la cara norte del Latok 3.

“Nuestra línea ascendía nieve y hielo en el lado oriente de la arista, intersectándola a 6,000 metros por encima de las secciones bajas llenas de cornisas y hongos de hielo.” Se intercalaban para puntear pero “nuestra línea, que parecía razonable desde el campamento base, aparecía desde aquí extremadamente difícil”, así que optaron por una variante de nieve, guiada por Colin hasta alcanzar la cornisa, donde establecieron el vivac, a los 5,830 metros.

“Después de hacer la plataforma en la estrecha doble cornisa de la arista, discutimos nuestras opciones. La arista misma era impasable debido a los hongos de hielo y cornisas, nuestra única opción para ascender era una travesía al oeste fuera de la arista. De su intento del 2008, Josh conocía que el terreno hacia ese lado era complejo y difícil. Decidimos que la escalada estaba siendo demasiado lenta y difícil y las oportunidades de encumbrar eran tan bajas que no justificaban el continuar.” Así que bajaron a rapel y regresaron al campamento base.

A 31 años de distancia, el Latok I sigue siendo un problema sin resolver, pese a décadas de intentos y de muchos escaladores que lo han abordado. La expedición se realizó en parte con lo que ganaron del Premio Mugs Stump.

Dylan llegando a lo más alto del canal de hielo.

Dylan punteando un tramo de nieve y mixto fácil.

Dylan en la travesía hacia la arista norte.

Dylan asegurando a Josh que empieza a hacer la plataforma para el vivac.

Nuestro vivac a la mañana siguiente.

James Donini, Michael Kennedy, George Lowe y Jeff Lowe en 1978.

Latok I: Errata

En el artículo sobre el Latok I, hubo un error de parte nuestra. En el encabezado se leía: “Es uno de los picos más asediados por los mejores escaladores, pero hasta ahora, nadie ha llegado a su cumbre.”

En el texto se mencionaba que: “Hace poco, otros dos escaladores se dirigieron al Latok I: Colin Haley, Josh Wharton y Dylan Johnson, con el mismo propósito: ser los primeros en alcanzar la cima de ese pico inescalado.”

Queremos hacer una importante corrección: el Latok I ya fue escalado en 1979 por una expedición japonesa dirigida por Naoki Takada.

Latok  I. Latok I (23,439 pies) fue escalado finalmente por la cara sur por una expedición japonesa dirigida por Naoki Takada. La ruta asciende le arista a la izquierda del couloir que divide el Latok I y el III… El primer intento a la cumbre del 17 de julio falló. El 19 de julio Tsuneo Shigehiro, Sin’e Matsumi y Yu Watanabe, lucharon por 13 horas en nieve mala para llegar a la cumbre. El 22 de julio Hideo Muto, Jun’ichi Oku y Kota Endo también escalaron hasta la cumbre. Se consideraron afortunados de no haber sido arrollados por caída de rocas o avalanchas.” (American Alpine journal, 1980, p. 647-648)

La que sí permanece virgen es la arista norte, que ha sido intentada varias veces, la más reciente por Colin Haley, Josh Wharton y Dylan Johnson.

Se ha corregido el texto pero queremos hacer patente nuestro agradecimiento a Rodulfo Araujo por habernos señalado la falla.