MyE: Ahora estás en camino de las Siete Cimas, ¿cuándo diste con esa idea?
Andrea: Me quedé tan entusiasmada de haber descubierto la escalada en montañas que le propuse a Manoel que nos entrenáramos para subir el Everest. Él ya lo había considerado hacía varios años pero los fuertes gastos y la falta de una compañía adecuada, lo desanimaron. A él le gustó la idea de retomar un viejo sueño y esta vez con una animada compañera para hacerlo.
Comedor el Elbrus Campo, donde los alpinistas de la ex-Unión Soviética solían entrenar.Haz click en las imágenes para agrandarlas.
MyE: El McKinley fue tu segunda cima y el Elbrus tu tercera. Imagino que el Aconcagua fue la primera. ¿Me equivoco?
Andrea: El Aconcagua fue mi primera cumbre y fue determinante para tomar mi decisión de continuar. Yo me dije, “Ésta será la montaña más alta hasta el momento; si mi cuerpo reacciona bien a la altura y la paso bien, voy y escalo el Everest. Si no, entonces no lo haré”. En el Island Peak pude haber tenido solo la famosa “suerte de principiante” y creía que el Aconcagua me iba a dar una base más real para tomar una decisión.
Manoel se enfermó de neumonía en el campo base y tuvo que regresar en helicóptero. Eso, al inicio me preocupó mucho y pensé en regresar con él, por el otro lado había entrenado mucho y hecho muchos sacrificios para estar allí. Decidí que seguiría y Manoel también me apoyó en eso. Era mi primera vez sola en una montaña desconocida. Llegué a la cumbre y disfruté cada día allí. Eso me dio la nueva seguridad de poder estar sola en las montañas y de poder ir determinada en pos de mis metas.
Segundo día de aclimatación con caminatas en las montañas del Cáucaso.
MyE: ¿En cuánto tiempo piensas terminar las Siete Cimas?
Andrea: No lo sé, depende si llegan o no patrocinios. Hasta el momento nos hemos autofinanciado cada cumbre con nuestro trabajo como guías. Por eso guiamos el Elbrus y el Kilimanajaro. Si todo va como lo esperamos creo terminar con el macizo Vinson en Diciembre del 2010.
MyE: ¿Cómo es Manoel Morgado como compañero de expediciones?
Andrea: Nos complementamos. Él es conservador y con más experiencia mientras que yo soy más atrevida y con menos experiencia. Él no pasa tanto frío como yo en la montaña y yo aclimato más rápido que él. En general, logramos trabajar en equipo y a los dos nos encanta acampar y pasar mucho tiempo en la montaña. Él es una persona en quien yo confío plenamente y sé que si algo me pasa puedo contar con él y viceversa.
Maqueta con el Elbrus en la Cordillera del Cáucaso.
MyE: Ahora vas al Cho Oyu, que será tu primera experiencia en un ochomil. ¿qué planes tienes con respecto a los ochomiles? ¿Piensas ir por algunos más una vez terminadas las siete cimas?
Andrea: Mis ideas son muchas, pero antes de pronunciarme quiero tener una experiencia en un 8,000 primero, luego ya veremos. Las montañas son adictivas, pero también tiene que haber una buena dosis de diversión. Las expediciones en los ocho miles tardan por lo menos 40 días. Son días y días de carpa, de mucho frío, de defensas del cuerpo bajas, de días de mal tiempo en la carpa, etc. Sé que estar parada en la cumbre después de tanto esfuerzo y sacrificio lo compensa todo pero nunca estuve parada en la cumbre de un ochomil. Si decido hacer más, de cualquier forma va a depender de las finanzas y no quiero hacer un proyecto rápido como el que estoy haciendo ahora. Me las disfrutaría y saborearía despacito.
MyE: ¿Quiénes te patrocinan este proyecto de las Siete Cimas?
Un canal de televisión de Guatemala transmite una cápsula informativa cada semana de cinco minutos y me da uno para que yo lo pueda ofrecer a mis patrocinadores para anunciarse. Aún no tengo ningún patrocinador lo cual es un pena porque en los dos últimos meses hice tres de las Siete Cumbres. Desde que empezó el proyecto, también he guiado viajes de aventura en Nepal, Filipinas, Mali, Indonesia e India y todo ese material lo filmamos para transmitirlo por televisión. Así que espero que alguien que crea en las mujeres y en el deporte aparezca por allí.
Más cerca de los nevados.
MyE: ¿Qué le dirías a los montañistas que están comenzando?
Que si les encanta el montañismo, lo sigan practicando. No hay excusa para no realizar las cosas que amamos y las montañas nos dan las mejores lecciones para la vida diaria, nos forjan el espíritu y la personalidad.
MyE: ¿Qué le dirías a las mujeres montañistas?
Yo admiro mucho a las mujeres montañistas. He leído varios libros de mujeres en las montañas pero he conocido muy pocas. Si tú me ves vestida normal nunca pensarías que yo soy montañista. Cuando Manoel y yo vamos a la montaña todo mundo piensa que él es el super fuerte y que yo no voy a aguantar nada. Y cuando me ves en la montaña pensarías que nací en algún lugar alto y frío porque me siento muy a gusto y llena de energías con mis 20 a 25 kilos en la espalda. Todavía hay un preconcepto de las mujeres en la montaña y las mujeres podemos tener mucho potencial. Creo que lamentablemente tenemos que demostrar un poco más que los hombres para tener el mismo reconocimiento. Pero eso es sólo un desafío más y si te gustan las montañas te gusta el desafío.
Le digo a esas mujeres que se sigan realizando en las montañas y que no se den por vencidas por cualquier factor externo. Que sigan escuchando su corazón y su espíritu libre y aventurero.
Manoel probando el teléfono satelital con el Elbrus detrás.