| Sin duda habrá llegado al conocimiento se Su Alteza que un considerable cambio en el clima, inexplicable hasta ahora para nosotros, debió haber surgido en las regiones circumpolares, por lo cual la severidad del frío que por siglos había encerrado a los mares en las altas latitudes septentrionales en una impenetrable barrera de hielo que se había formado los últimos dos años, disminuyó considerablemente. (Esto) aporta una amplia prueba de que nuevas fuentes de calor han sido abiertas y nos dan ciertas esperanzas de que los mares árticos pudieran ser más accesibles de lo que han sido en el pasado, y que los descubrimientos pueden ser ahora no sólo interesantes para el avance de la ciencia sino también al futuro de la humanidad y el comercio de naciones distantes. El Presidente de la Sociedad Real de Londres al Almirantazgo 20 de noviembre de 1817 |
El Ártico representó siempre una barrera y un reto para la humanidad. La carta de la Sociedad Real de Londres al Almirantazgo que reproducimos es una muestra del interés que Inglaterra y otros países, como Rusia tenían sobre el hielo eterno del Ártico. El hielo les impedía avanzar y era frontera cerrada. Pese a todo, las exploraciones se hicieron. Fritdjof Nansen, con el Fram, logró alcanzar los 96º de latitud y hace poco más de un siglo que se dijo que un hombre había alcanzado el Polo Norte, la latitud 90º norte del planeta, el “Techo del mundo”.
Pero el Ártico se está quedando sin hielo. En una nota reciente de ScienceDaily.com, se dice que la superficie de hielo del Ártico ha disminuido notoriamente en una dimensión comparable a la de Alaska completa, y además se piensa que el hielo es demasiado delgado con una antigüedad de uno o dos años y no muy vieja como para conservarse.
Para muchos científicos, la causa está en el exceso de CO2 producido por el hombre, aunque hay otros que no están tan seguros de ello y hablan de un ciclo polar.
Lo cierto es que algunas predicciones hablan de que en 10 años el Polo Norte podría ser alcanzado sin problema por barcos y aunque ciertamente contrinuiría con el comercio, como lo habían mencionado a principios del siglo XIX, la verdad es que desaparecerá mucha fauna de la zona. Los osos polares, por ejemplo, que ahora son encontrados nadando en pleno océano ártico buscando un pedazo de hielo al cual treparse. “Muchos se ahogan”, menciona Planeta Tierra en el documental dedicado a los polos.
En el reciente Festival Banff de Cine de Montaña pudimos ver un documental titulado 99 días en el hielo, en donde los dos protagonistas llegaron al Polo Norte y continuaron hacia la costa de Canadá pero no pudieron llegar porque ya no encontraban hielo. En el mismo Polo la temperatura era de +4ºC.
Es posible que en los próximos años se vean las últimas expediciones polares a pie para luego convertirse en un reto marítimo, tal como se ha convertido ya el paso del noroeste.
La superficie del Ártico está disminuyendo.
En la fotografía superior, en el año 1979.
En lainferior, el año 2003.
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