El Piolet de Oro, un premio establecido en Francia desde 1991 para distinguir a lo más prestigiado del montañismo mundial. Sin embargo, los últimos años han tenido una crítica muy severa que ha repercutido en varios niveles del premio. Asia sacó a relucir su segunda edición del Piolet de Oro y ahora, los rusos implementaron un premio similar.
El primer Piolet de Oro Ruso
El premio se otorgó el domingo 25 de noviembre (y no el 24, como se tenía planeado) a la mejor expedición de toda Rusia y, como era de esperar, los ganadores fueron los 16 participantes que abrieron la primera ruta en la cara Oeste del K2. En segundo lugar estuvo el ascenso de la arista Oeste del Jannú. ¿Segundo lugar? ¿No es un solo premio?
Sí, es un premio nada más y no admite segundos lugares pero como los rusos tienen experimentado en carne ajena lo que significa un Piolet de Oro y todas las críticas que puede haber en torno a él, optaron por seguir un método nuevo: los jueces fueron los jefes de expedición de cada una de los eventos nominados, que fueron trece, para tener un número amplio de votación y ser impares.
Por eso hubo un segundo lugar y un tercero… La votación fue de más a menos y todos obtuvieron un lugar.
El método lo llamaron “estilo Hamburgo” porque aparece nombrado así en una novela de 1928 en donde los luchadores se reunían una vez al año para luchar entre ellos y saber de qué material estaban hechos porque “este es la única manera en la que pueden revelar su verdadera clase.”
Nickolay Totmjanin, jefe de la expedición rusa a la Cara Oeste del K2, con el Piolet de Oro Ruso ya recibido. Prácticamente, ninguna sorpresa.
Una forma diferente de ver al alpinismo de élite, pues no se ve sólo desde un escritorio, sino desde el verdadero terreno donde los jueces han estado presentes y saben con certeza lo que representa una escalada difícil. Ingenioso y original, pero auténtico.
Hay otro cambio en el premio. Aunque nominalmente se llama Piolet de Oro, Pavel Shabalin ofreció que el siguiente premio fuera llamado “La Batalla de los Titanes”, haciendo mención a los Titanes del Olimpo griego. Al mismo tiempo, el premio no sería un piolet de oro, sino uno de titanio que realizaría el fabricante ruso Kirov. De esa manera, “sería original, hermoso y con sello ruso”.