Ralph Tuijin partió de Lima, en Perú, a bordo de una embarcación de poco más de siete metros de largo. Su objetivo era cruzar el Pacífico sin apoyo externo. Pero en el camino se le cruzó un atolón en el norte de Samoa. Había remado 5,600 millas náuticas (10, 370 kilómetros) cuando se vio sorprendido por fuertes corrientes que lo empujaron al atolón de Atafu, entre las islas Tokelau.

El último informe indica que su bote estaba dañado y que estaba evaluando los daños para continuar. Aquí hay que recordar que su objetivo es cruzar el Pacífico sin apoyo externo, lo que quiere decir que cualquier reparación que tenga que hacerse deberá hacerla él mismo con los elementos que tiene a bordo, pues si recibe ayuda externa aún podría continuar al cruce, pero ya no con esta categoría.

Según sus propias palabras: “Más de dos mil personas han escalado el Everest. Más de 200 personas han cruzado un océano en un bote de remos. Sólo nueve han cruzado el Pacífico en un bote de remos. Nadie lo ha hecho sin apoyo externo.”

El año pasado, Ralph cruzó los cinco mil km del Atlántico a remo junto con su hermano Michael, pero su cruce fue “incompleto” porque los hermanos terminaron en la isla Martinica y no en Antigua.

Mientras tanto, la británica Roz Savage quiso se la primera mujer en cruzar el Pacífico a remo, aunque en tres etapas, y dejar que este fuera un “juego exclusivo de hombres” pero tuvo que abandonar la semana pasada, después de haber remado doce días. Su ancla de mar se había perdido y su bote quedó a merced del mar que la rodeaba. Roz fue evacuada por helicóptero y su bote aún está en medio del océano.

Erden Eruc, quien había abortado su salida del puerto de San Francisco por dos ocasiones, ahora parece ser el único que está remando en el Pacífico y se lamenta de la suerte de los compañeros se esa “pequeña comunidad”: “Estos recientes eventos enfatizan los riesgos que existen en el mar. Los mares han sido generosos conmigo.”

Erden parece ser por el momento el único que está remando en el Pacífico, cruzándose con orcas y escribiendo todo lo que puede, ya que va solo. Sus mensajes diarios son bastante agradables y explican muy bien lo que está pasando con él.