En septiembre anunciábamos que en los Alpes y la Cordillera Blanca se estaban levantando barreras burocráticas a los montañistas, especialmente a aquellos que deseaban explorar por nuevas caras y abrir nuevas rutas. En la misma nota, comentábamos de la propuesta de HIMEX a la CTMA (China/Tibet Mountaineering Association) para aumentar los precios de estancia.

China se ha dado cuenta que el Everest por la cara norte es una fuente de ingresos que parece no tener fin así que la CTMA no se lo pensó dos veces y emitió ya los nuevos costos para la cara norte del Everest:

Sí, ahora el permiso es individual y no por grupo. Ya no hay forma de comprar el permiso y compartirlo con nadie para bajar el costo. El patrocinio será ahora mucho más difícil de conseguir para un grupo pero no para personas solitarias con miras en la ascensión. Lo cierto es que la vertiente norte, muy asediada, tendrá que ser replanteada por todos, desde los alpinistas que llegan por sus propios medios hasta las compañías que operan ahí.

Quienes han estado trabajando deportivamente para alcanzar la cima en el 2007 seguramente ya han conseguido gran parte de su patrocinio y si estaban planeando subir por el lado chino y no les alcance el dinero, es poco probable que abandonen, por lo que el campamento base de la cara sur del Everest, en Nepal, sería un lugar con muchos problemas, todos surgidos por la convivencia entre mucha gente y las limitaciones que impone la propia montaña.

En el 2008, las olimpiadas serán en Beijing, China y el país organizador quiere que la antorcha olímpica sea encendida en la cumbre del Everest. Como prueba previa, el próximo año habrá una ascensión china en donde se hará un simulacro. Y seguramente en el 2008 las cuotas seguirán en el mismo tono o más altas para dejar a los chinos la montaña para ellos solos y hacer un buen papel en el inicio de las olimpiadas.