{"id":21223,"date":"2012-10-16T17:26:24","date_gmt":"2012-10-16T23:26:24","guid":{"rendered":"http:\/\/montanismo.org\/?p=21223"},"modified":"2012-10-16T17:26:24","modified_gmt":"2012-10-16T23:26:24","slug":"saltar-desde-39-km-de-altura","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/montanismo.org\/2012\/saltar-desde-39-km-de-altura\/","title":{"rendered":"Saltar desde 39 km de altura"},"content":{"rendered":"
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El salto que Felix Baumgartner realiz\u00f3 el 14 de octubre fue seguido por miles de personas en todo el mundo, sea a trav\u00e9s de Youtube o por canales de televisi\u00f3n. El impacto fue impresionante: a\u00fan el p\u00fablico sentado (o de pie, cosa de nervios) tuvo sensaciones directas durante todo el tiempo que Felix estuvo en la estrat\u00f3sfera, pero m\u00e1s que nada, a partir de que le dan la se\u00f1al de que puede saltar y comienza las maniobras para salir.<\/p>\n

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El abrir las puertas de la c\u00e1psula, ponerse de pie en el estribo de la c\u00e1psula y saltar, fue sumamente impactante para quienes lo ve\u00edan. Para muchos, incluso escuchar su respiraci\u00f3n mientras ca\u00eda, fue m\u00e1s aturdidor.<\/p>\n

La raz\u00f3n de esto es el miedo que tenemos a las alturas. A algunos les cuesta mucho asomarse a la ventana de un edificio alto, otros no soportan estar sobre un puente colgante y otros m\u00e1s se dedican a vencer ese miedo saltando en paraca\u00eddas, en bungee, en puenting, escalando o saltando a una poza de clavados. Pero ninguno de ellos lo ha superado, aunque lo controle bastante bien.<\/p>\n

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Lo interesante es que el salto de Baumgartner no s\u00f3lo rompi\u00f3 varios r\u00e9cords sino que tambi\u00e9n se pudo haber tomado como prueba de psicolog\u00eda de masas, que quiz\u00e1 alguien est\u00e9 haciendo en este momento gracias al registro de Twitter. Y esto incluye a cient\u00edficos y m\u00e9dicos a quienes les hubiera gustado ver en pantalla los datos fisiol\u00f3gicos de Felix en ese momento.<\/p>\n

Cuando le\u00ed el art\u00edculo de David Ropeik, me di cuenta que yo tambi\u00e9n me hab\u00eda enganchado a la respiraci\u00f3n de Felix y tambi\u00e9n contaba el tiempo que segu\u00eda cayendo y tambi\u00e9n hab\u00eda sentido ese impulso de \u201cmejor no me aviento\u201d una vez que estuvo al borde de su c\u00e1psula. Desconozco el deporte del paraca\u00eddas pero seguramente aquellos que lo practican tuvieron m\u00e1s sensaciones porque conocen m\u00e1s de su t\u00e9cnica y los peligros que implica entrar en barreno.<\/p>\n

Pese a todo, no deja de sorprenderme el valor de Felix. Traje especialmente dise\u00f1ado o no, evento de poco tiempo (en comparaci\u00f3n con una escalada mediana), las im\u00e1genes pudieron descubrir de nuevo en cada uno de nosotros ese miedo al vac\u00edo, a las alturas.<\/p>\n

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La reacci\u00f3n psicol\u00f3gica de masas m\u00e1s notable (fuera de las guerras) fue la emisi\u00f3n por radio de la novela La guerra de los mundos, que fue transmitida en 1938 por Orson Wells en vivo en car\u00e1cter de noticiero urgente. Las reacciones de la gente fueron incre\u00edbles, desde huir de la ciudad donde estaban aterrizando seres de otro mundo hasta aquellos que a pesar de saber que pod\u00edan morir, regresaban al sitio para ver a sus familiares. Wells tuvo que pedir disculpas p\u00fablicamente por el mismo medio pero a\u00fan hoy sigue siendo un punto de partida.<\/em><\/p>\n

\n Referencia<\/strong><\/p>\n

Scientific American<\/a><\/strong><\/p>\n