{"id":14630,"date":"2011-12-20T00:00:00","date_gmt":"2011-12-20T00:00:00","guid":{"rendered":"http:\/\/montanismo.org\/revista\/?p=14630"},"modified":"2012-03-15T11:33:46","modified_gmt":"2012-03-15T17:33:46","slug":"impacto_del_descubrimiento_del_polo_sur","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/montanismo.org\/2011\/impacto_del_descubrimiento_del_polo_sur\/","title":{"rendered":"Impacto del descubrimiento del Polo Sur"},"content":{"rendered":"
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El mundo se estaba fijando en la fecha del 14 de diciembre de 2011 para festejar el centenario del descubrimiento del Polo Sur y muchos quisieron \u201crepetir\u201d la haza\u00f1a. Dif\u00edcilmente lo hubieran logrado porque no es lo mismo ir de un sitio a otro si ya se conoce y se tiene un excelente equipo y sistemas de comunicaci\u00f3n que da en tiempo real lo que sucede, a hacerlo hace cien a\u00f1os, con equipo que se probar\u00eda, sin conocer pr\u00e1cticamente nada del terreno y sin que el mundo supiera de ellos.<\/p>\n

Cuando Amundsen regres\u00f3 a la civilizaci\u00f3n, envi\u00f3 un telegrama a los medios de prensa y ellos llevaron al mundo la noticia: el Polo Sur hab\u00eda sido alcanzado por el hombre. Tambi\u00e9n los medios cient\u00edficos estaban al pendiente de esas noticias. Hay que recordar que era la \u00e9poca en que no se conoc\u00edan partes de la tierra y que hab\u00eda teor\u00edas que confirmar o desechar de acuerdo a los descubrimientos geogr\u00e1ficos.<\/p>\n

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En este sentido, es importante ver el art\u00edculo que public\u00f3 el Scientific American<\/em> el 16 de marzo de 1912, aunque est\u00e1 fechado en 1911, que es una errata. Lo reproducimos aqu\u00ed por el inter\u00e9s en el tema del descubrimiento y porque se nota que en la Ant\u00e1rtida no s\u00f3lo estaban dos expediciones, sino otras dos m\u00e1s.<\/p>\n

El descubrimiento del Polo Sur<\/p>\n

Scientific American<\/em>, Vol. CV1, No. 11, March 16, 1911 <\/strong>[debe decir 1912]<\/strong><\/p>\n

Es demasiado pronto para dar una explicaci\u00f3n cr\u00edtica del logro capit\u00e1n Roald Amundsen. Deben transcurrir muchas semanas antes de que estemos en plena posesi\u00f3n de todos sus datos. Pero incluso con el mensaje lac\u00f3nico que ha telegrafiado a la prensa, arroja un torrente de luz sobre el misterio de la geograf\u00eda ant\u00e1rtica. Amundsen parece haber reunido pruebas suficientes para fundamentar la teor\u00eda de que la gran cadena de monta\u00f1as que se extiende casi sin interrupci\u00f3n desde Alaska hasta la Patagonia encuentra su continuaci\u00f3n en una cordillera que conecta Victoria Land y King Edward VII Land, y que, en honor de su reina, ha llamado \u201cQueen Maude\u2019s Range\u201d.<\/p>\n

Se encontr\u00f3 que la barrera de hielo, que hab\u00eda demostrado ser un formidable obst\u00e1culo para la exploraci\u00f3n ant\u00e1rtica durante un siglo y medio, termina en una bah\u00eda situada entre la cordillera monta\u00f1osa del sureste, que corre desde el sur de la Tierra Victoria y una cordillera que probablemente es la continuaci\u00f3n de King Edward the VII Land y que se extiende en direcci\u00f3n suroeste. En contra de su plan original, Amundsen envi\u00f3 uno de sus oficiales, el teniente Prestud, a inspeccionar la Bah\u00eda de Ballenas, la gran barrera de hielo y a explorar la King Edward the VII Land, de los cuales se sabe pr\u00e1cticamente nada. Sin duda, el est\u00edmulo de la competencia hizo su parte en desentra\u00f1ar los secretos de la \u00faltima helada regi\u00f3n inexplorada de la tierra.<\/p>\n

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No menos de cuatro expediciones se encontraban en las regiones ant\u00e1rticas al tiempo que Amundsen forzaba su camino hacia el sur. Adem\u00e1s de la expedici\u00f3n de Amundsen, estaba la expedici\u00f3n japonesa del Teniente Shirase, que tuvo que retirarse a Australia en la primavera pasada a fin de reponer el suministro de perros, y que Amundsen menciona que atrac\u00f3 el 16 de enero [de 1912] en la Bah\u00eda de Ballenas, dos semanas antes de \u00e9l mismo zarpara hacia el hogar; [tambi\u00e9n estaba] la expedici\u00f3n del australiano Dr. Mawson, hab\u00eda reunido 215,000 d\u00f3lares hasta el pasado 1 de noviembre, y que desembarc\u00f3 tres grupos entre el Cabo Adare y Gaussberg; la expedici\u00f3n alemana del Teniente Filchner en el \u201cDeutschland\u201d, equipada con aparatos magn\u00e9ticos, inal\u00e1mbricos y meteorol\u00f3gicos, con la esperanza de establecer una base al suroeste de Coats Land a la mayor latitud posible y, por \u00faltimo, la expedici\u00f3n de Ingl\u00e9s capit\u00e1n Scott en el \u201cTerra Nova\u201d, que sali\u00f3 de Nueva Zelanda en noviembre de 1910, gravemente da\u00f1ado por una tormenta, tan mal, de hecho, que las reparaciones necesarias disminuy\u00f3 considerablemente los recursos de la expedici\u00f3n.<\/p>\n

Amundsen parece haber sido favorecido por un tiempo excepcionalmente favorable. Sin duda hubo tormentas, pero no los huracanes terribles que frustraron a Shackleton. Hac\u00eda fr\u00edo, tanto fr\u00edo que los perros sufr\u00edan notablemente, sin embargo, la temperatura media no era inferior a la de muchas parte habitadas de Canad\u00e1. Amundsen se se\u00f1ala que parte de su viaje fue muy similar a un viaje de placer: \u201cExcelente terreno, buen trineo y una temperatura uniforme\u201d. Los glaciares y las grietas hicieron necesarios algunos desv\u00edos, sin embargo, a pesar de ellos, el progreso fue muy r\u00e1pido. El grupo escal\u00f3 de 2,000 a 5,000 pies en un d\u00eda. A lo largo de gran parte de su viaje de Amundsen cubri\u00f3 terreno completamente desconocido. Por lo tanto, traer\u00e1 informaci\u00f3n absolutamente nueva de la geograf\u00eda ant\u00e1rtica. Tom\u00f3 la decisi\u00f3n que llegar a la meseta en la que se encuentra el Polo por una ruta diferente a la del Glaciar Beardmore [por donde viaj\u00f3 Scott]. Suerte, instinto, experiencia, ll\u00e1mese como se quiera, la nueva ruta result\u00f3 m\u00e1s f\u00e1cil que lo que Shackleton o Scott hicieran en sus expediciones. A esa ruta comparativamente f\u00e1cil, junto con un clima excepcionalmente favorable, se puede atribuir el \u00e9xito de Amundsen.<\/p>\n

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NOTAS<\/strong><\/p>\n

El teniente Shirase Nobu (1861-1946) dirigi\u00f3 la expedici\u00f3n japonesa a la Ant\u00e1rtida y explor\u00f3 la regi\u00f3n costera de la tierra de Enrique VII y la parte oriental de la Barrera de Hielo Ross y alcanz\u00f3 una latitud de 80\u00ba05\u2019S.<\/p>\n

El Dr. Douglas Mawson (1882-1958) dirigi\u00f3 una expedici\u00f3n a la Ant\u00e1rtida, pero no con la intenci\u00f3n de alcanzar el Polo Sur. Fue el primero que llev\u00f3 aeroplanos a la Ant\u00e1rtida pero no pudo realizar reconocimientos a\u00e9reos porque se estrell\u00f3 antes de zarpar y fue usado como tractor sobre esqu\u00edes. Su fuselaje fue encontrado el 1 de enero de 2010. Los miembros de la expedici\u00f3n se dividieron en cinco grupos y el de Mawson tuvo un problema serio: un d\u00eda se perdi\u00f3 un trineo en una grieta. Ah\u00ed estaba la mayor\u00eda de sus provisiones, sus mejores perros, su tienda y otro equipo esencial. Su regreso fue un acto heroico a pie y Dawson lleg\u00f3 solo a su base, pero su barco hab\u00eda partido hac\u00eda s\u00f3lo unas horas, d\u00e1ndolos por muertos. Una llamada por comunicaci\u00f3n inal\u00e1mbrica le salv\u00f3 la vida y pudo escribir su libro: The Home in the Blizzard<\/em><\/a>.<\/p>\n

La expedici\u00f3n del teniente Wilhelm Filchner (1877-1957) fue la primera en entrar al Mar de Weddell y descubri\u00f3 la Costa de Luitpold y la Barrera de Hielo Flichner-Ronne, que \u00e9l nombr\u00f3 como Wilhelm II, por el emperador alem\u00e1n.<\/p>\n<\/div>\n

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El descubrimiento del Polo Sur no fue un hecho deportivo en sí. Las organizaciones científicas y de exploradores estaban al tanto. Esta es una nota del Scientific American sobre el primer comunicado que hiciera Amundsen sobre la conquista.<\/p>\n<\/td>\n

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