{"id":13853,"date":"2009-07-15T00:00:00","date_gmt":"2009-07-15T00:00:00","guid":{"rendered":"http:\/\/montanismo.org\/revista\/?p=13853"},"modified":"2012-04-13T21:32:15","modified_gmt":"2012-04-14T03:32:15","slug":"por_que_el_hombre_penetra_en_la_caverna","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/montanismo.org\/2009\/por_que_el_hombre_penetra_en_la_caverna\/","title":{"rendered":"\u00bfPor qu\u00e9 el hombre penetra en la caverna?"},"content":{"rendered":"<p><script language=\"javascript\">function imgGrandeChica_old(nombreImagen, formato, ancho, alto){\tdocument.write('<a href=\"javascript:;\" onClick=\"window.open(\\'..\/images\/upload\/'+nombreImagen+'_g.'+formato+'\\',\\'nombreImagen\\',\\'width='+ancho+', height='+alto+'\\')\"> <img decoding=\"async\" src=\"http:\/\/montanismo.org\/images\/upload\/'+nombreImagen+'_k.'+formato+'\" border=\"0\" \/><\/a>')\t}<\/script><\/p>\n<div align=\"justify\">\n<p>Estar aqu&iacute; en M&eacute;rida, Yucat&aacute;n, invitado por la sociedad Yucateca de  Espeleolog&iacute;a y la   Universidad Aut&oacute;noma de Yucat&aacute;n y muy especialmente de su  Facultad de Ciencias Antropol&oacute;gicas, dirigida por el profesor Carlos Boj&oacute;rquez,  es un honor que me ha colmado de sincera gratitud. Ha sido un est&iacute;mulo haber  conocido por la carta extendida a un grupo de espele&oacute;logos cubanos, que la  mencionada sociedad ha sido inspirada por la fundaci&oacute;n y desarrollo de la Espeleolog&iacute;a en Cuba.  Es el 15 de enero de 1940 en que formamos la Sociedad Espeleol&oacute;gica  de Cuba, mientras que la   Sociedad Yucateca de Espeleolog&iacute;a, lo fue el 3 de mayo de  1990, de manera que ambas fundaciones est&aacute;n separadas en el tiempo por medio  siglo.<\/p>\n<p align=\"center\"> <script language=\"javascript\">\timgGrandeChica('Albia kobazuloa', 'jpg',552,820)<\/script> <\/p>\n<p align=\"center\"><em>Albia kobazuloaHaz click en las im&aacute;genes para agrandarlas.<\/em><\/p>\n<p>Ayer tuvimos la maravillosa oportunidad de adentrarnos por las  entra&ntilde;as geol&oacute;gicas de Yucat&aacute;n, llevados por nuestros anfitriones a la Cueva de Lolt&uacute;n, teniendo  por gu&iacute;a al espele&oacute;logo yucateco Carlos Evia Cervantes, a quien hace algunos  meses tuvimos el gusto de recibir en nuestra Patria y en esa oportunidad  logramos fortalecer los lazos de uni&oacute;n entre cubanos y yucatecos por la v&iacute;a de  la ciencia y la cultura.<\/p>\n<p>Por cierto, que cuando volaba de la Habana hacia M&eacute;rida, me  preguntaba qu&eacute; ir&iacute;a a decirles hoy aqu&iacute;, c&oacute;mo empezar esta charla, porque no de  otra manera puede clasificarse este mon&oacute;logo. Y como suele suceder, surgi&oacute; un  chispazo que ilumin&oacute; la mente para improvisar una charla de esta naturaleza y  fue cuando Evia me pregunt&oacute;, manejando por la llanura yucateca, por qu&eacute; el  Hombre entraba a las cuevas, por qu&eacute; en definitiva se hac&iacute;a de una vocaci&oacute;n  espeleol&oacute;gica.<\/p>\n<p>Realmente yo, que m&aacute;s de medio siglo ando por los cuevarios del  mundo, nunca me hab&iacute;a hecho esa pregunta, que por supuesto es una cuesti&oacute;n  filos&oacute;fica que requerir&iacute;a un an&aacute;lisis y mucho tiempo para preparar una  respuesta adecuada, pero yo le dir&iacute;a en primer lugar, que el Hombre penetra en  las cavernas, porque existen. En segundo lugar, tendr&iacute;amos que remontarnos a  miles de a&ntilde;os hacia atr&aacute;s para saber por qu&eacute; los primeros seres humanos  entraron en las cuevas y por qu&eacute; todav&iacute;a 20 o 30 mil a&ntilde;os despu&eacute;s, el Hombre  sigue visitando y estudiando las cavernas.<\/p>\n<p>Fueron los hombres de la   Edad de Hielo, los croma&ntilde;ones, los primeros en usar  sistem&aacute;ticamente las grutas. Es necesario trasladarnos con la imaginaci&oacute;n a  aquellos tiempos en que la   Tierra sufr&iacute;a un enfriamiento que los oblig&oacute; a buscar refugio  y calor en el subsuelo.<\/p>\n<p>Originalmente el Hombre viv&iacute;a en los bosques, donde siempre imit&oacute; a  los animales para aprender de ellos, por lo cual habr&iacute;a que preguntarle a la  bi&oacute;nica, la ciencia que trata de explicar c&oacute;mo el Hombre aprende de los  animales para inventar algunos de sus utensilios.<\/p>\n<p>Evidentemente que los animales ense&ntilde;aron mucho al hombre en su  camino cultural y de civilizaci&oacute;n. El ser humano vuela en los aviones porque  primero vio a los p&aacute;jaros volar, aument&oacute; su velocidad cuando vio a los animales  correr, inclusive en un momento se subi&oacute; encima de uno y de pronto le salieron  como cuatro patas. La ara&ntilde;a al tejer, le ense&ntilde;&oacute; la t&eacute;cnica de los&nbsp; textiles y as&iacute; pudi&eacute;ramos llegar a la&nbsp; maravilla del radar que no es m&aacute;s que la  imitaci&oacute;n por el Hombre de un instrumento sensorial de los murci&eacute;lagos. Sin el  murci&eacute;lago el hombre no hubiera inventado el radar. As&iacute;, los animales ense&ntilde;aron  muchos secretos a la   Humanidad y entre otros hechos, lo indujeron a penetrar en la  cueva, donde ya viv&iacute;a el oso y otros animales que instintivamente buscaron  amparo en aquellas casas naturales.<\/p>\n<p align=\"center\"> <script language=\"javascript\">\timgGrandeChica('Argi probak', 'jpg',820,575)<\/script> <\/p>\n<p align=\"center\"><em>Argi probak.<\/em><\/p>\n<p>El hombre vio al animal entrar en la cueva y se inspir&oacute; en &eacute;l y,  maravillado, descubri&oacute; como cambiaba casi autom&aacute;ticamente el clima riguroso del  exterior por el acogedor ambiente de la caverna.<\/p>\n<p>Ahora todos sabemos algo de ciertos mecanismos que en aqu&eacute;l  entonces, en la Edad  de Hielo, el Hombre no comprend&iacute;a, pero s&iacute; utilizaba y es que en el exterior,  gracias al tr&aacute;nsito diario del Sol, se suceden las noches y los d&iacute;as, m&aacute;s la  secuencia de las estaciones, todo lo cual genera una constante variaci&oacute;n  t&eacute;rmica en la superficie del planeta, mientras que en la cueva no existe ni la  noche ni el d&iacute;a, porque dentro de ella es la noche eterna. Hoy sabemos, despu&eacute;s  de muchos estudios, que mientras en la superficie puede haber desde muchos  grados Celsius bajo cero hasta m&aacute;s de 30 grados, en el interior de las cavernas  no ocurre esa amplitud t&eacute;rmica y todo el a&ntilde;o puede haber, seg&uacute;n se trate de la  localizaci&oacute;n de la gruta, unos 22 grados de temperatura.<\/p>\n<p>El hombre primitivo encontr&oacute; en el interior de las cuevas la  salvaci&oacute;n para no ser exterminado por la intensidad de las bajas temperaturas  de la Edad Glacial.  As&iacute; comenz&oacute; una nueva vida en las cavernas, donde observ&oacute; la arquitectura  subterr&aacute;nea y el techo sostenido&nbsp; por  columnas estalagm&iacute;ticas, de donde sac&oacute; una lecci&oacute;n y al construir su casa en el  exterior, imit&oacute; la espelunca y as&iacute; hizo el techo y los puntales de su nueva  vivienda y esa tradici&oacute;n, nacida en las grutas, lo llev&oacute; miles de a&ntilde;os despu&eacute;s  a la belleza de los capiteles j&oacute;nicos y d&oacute;ricos.<\/p>\n<p>Pero el Hombre tambi&eacute;n se vio urgido a poseer el fuego en la oscuridad  de la caverna, donde tuvo la oportunidad de hacerse m&aacute;s sedentario y, al  lograrlo, utiliz&oacute; mejor su tiempo y se convirti&oacute; en pintor, en escultor.  Atra&iacute;do siempre ese misterio que querer conocer que existe m&aacute;s all&aacute; del alcance  de su mirada, fue m&aacute;s all&aacute;. Era una fuerza irresistible que en definitiva lo  impuls&oacute; a romper las barreras de su entorno. <\/p>\n<p>Dec&iacute;a el gran poeta norteamericano Walt Whitman en un poema sobre  los astros y el Hombre, que cuando &eacute;ste llegue a la m&aacute;s lejana de las  estrellas, querr&aacute; conocer otra m&aacute;s lejana a&uacute;n.<\/p>\n<p>Es apasionante saber que el hombre desde hace miles de a&ntilde;os haya  pintado en los lugares m&aacute;s inaccesibles de las grutas. Nosotros hemos  encontrado en Cuba im&aacute;genes de hombres, tal vez dioses, que estaban dibujados  en lugares muy dif&iacute;ciles de llegar, por ejemplo, del alero rocoso, en que  apenas cab&iacute;a el cuerpo humano y uno se preguntaba&nbsp; c&oacute;mo hacer una obra de arte de esa naturaleza  para que nadie la pudiera contemplar, salvo el hacedor de esa imagen o los  iniciados en ritos por el sacerdote pintor.<\/p>\n<p align=\"center\"> <script language=\"javascript\">\timgGrandeChica('Caverna das Pacas II', 'jpg',660,500)<\/script> <\/p>\n<p align=\"center\"><em>Caverna das P&aacute;cas II.<\/em><\/p>\n<p>Es necesario considerar que el Hombre, al concebir sus im&aacute;genes  pict&oacute;ricas en las paredes de una gruta, al crear con sus manos, a la luz de una  antorcha, los animales de los cuales depend&iacute;a para vivir, tuvo seguramente la  sensaci&oacute;n de que &eacute;l mismo era un dios creador, porque de sus manos sal&iacute;an  im&aacute;genes semejantes a las naturales.<\/p>\n<p>Gran parte del arte universal naci&oacute; en la oscuridad de las cavernas.<\/p>\n<p>Pasaron miles de a&ntilde;os y el Hombre, al retirarse de los hielos,  tambi&eacute;n abandon&oacute; la caverna y vivi&oacute; en un clima m&aacute;s benigno y pudo hacer sus  nuevos hogares, pero no abandon&oacute; totalmente las cavernas. Cuando progres&oacute; y  esto es un hecho&nbsp; casi universal, no s&oacute;lo  volvi&oacute; a las espeluncas, sino que construy&oacute; cavernas artificiales, las  Catatumbas de Roma, por ejemplo, para enterrar a sus muertos.<\/p>\n<p>En el Medioevo, esa noche de los mil a&ntilde;os en la historia del mundo,  las cuevas fueron pobladas por las m&aacute;s terribles leyendas que recuerde el  Hombre.<\/p>\n<p>El ser humano sigui&oacute; acord&aacute;ndose&nbsp;  de los antros. Los egipcios cre&iacute;an que el Nilo nac&iacute;a de una espelunca  comprendida en el espacio encerrado por una enorme serpiente y se dice que  Jes&uacute;s naci&oacute; en una gruta hace dos mil a&ntilde;os. <\/p>\n<\/div>\n<p><!--nextpage--><script language=\"javascript\">function imgGrandeChica_old(nombreImagen, formato, ancho, alto){\tdocument.write('<a href=\"javascript:;\" onClick=\"window.open(\\'..\/images\/upload\/'+nombreImagen+'_g.'+formato+'\\',\\'nombreImagen\\',\\'width='+ancho+', height='+alto+'\\')\"> <img decoding=\"async\" src=\"http:\/\/montanismo.org\/images\/upload\/'+nombreImagen+'_k.'+formato+'\" border=\"0\" \/><\/a>')\t}<\/script><\/p>\n<div align=\"justify\">\n<p>Los indios arahuacos de las Antillas ten&iacute;an la creencia de que tanto  el sol, como la luna y los hombres hab&iacute;an sido gestados dentro de cavernas. <\/p>\n<p>Y me pregunto tambi&eacute;n ahora, por qu&eacute; muchos mitos de la Humanidad reiteran que  de las grutas nacimos todos los seres humanos y creo que es porque la cueva con  su forma remeda el &uacute;tero femenino.<\/p>\n<p>Con el decursar del tiempo, el hombre sigui&oacute; apegado a la cueva  materna y as&iacute; por ejemplo, cuando los espa&ntilde;oles irrumpieron&nbsp; en Am&eacute;rica, la caverna volvi&oacute; abrir sus  puertas a los perseguidos. Fue en las cuevas donde se establecieron, primero  los indios perseguidos y despu&eacute;s &eacute;stos extendieron su brazo amigo a los negros  africanos, a los cimarrones, que huyendo de la esclavitud de los amos blancos,  tambi&eacute;n buscaron el amparo de la gruta. Mao Tse Tsung, al organizar los  ej&eacute;rcitos revolucionarios de China contra el viejo sistema, lo hizo en las  grutas de Yun&aacute;n, lo que tambi&eacute;n repiti&oacute; el gran guerrillero que fue en Tito en  su lucha contra las tropas fascistas. Es conmovedor saber tambi&eacute;n que las  primeras noches que pas&oacute; Jos&eacute; Mart&iacute; en su campa&ntilde;a libertadora de Cuba, fue en  una cueva en las m&aacute;rgenes del R&iacute;o Tacre, en la regi&oacute;n oriental del pa&iacute;s. Claro  que pudi&eacute;ramos citar otros muchos ejemplos; cuando el Che Guevara lleg&oacute; a las  monta&ntilde;as centrales de Cuba, estableci&oacute; su armer&iacute;a en una gran gruta del  Escambray.<\/p>\n<p align=\"center\"> <script language=\"javascript\">\timgGrandeChica('Goba Handi', 'jpg',820,553)<\/script> <\/p>\n<p align=\"center\"><em>Goba Handi.Haz click en las im&aacute;genes para agrandarlas<\/em><\/p>\n<p>A fines del siglo pasado lleg&oacute; el momento en que la caverna se  convirti&oacute; en el escenario de una ciencia. Naci&oacute; la espeleolog&iacute;a.<\/p>\n<p>El ge&oacute;grafo franc&eacute;s Eduardo Alfredo Martel, organiz&oacute; un grupo de  cient&iacute;ficos para estudiar las cuevas y as&iacute; fund&oacute; la Sociedad Espeleol&oacute;gica  de Francia y recorri&oacute; muchos pa&iacute;ses de Europa, estudiando el mundo subterr&aacute;neo.<\/p>\n<p>A veces, casualmente, se descubrieron cuevas como las de Altamira,  en Espa&ntilde;a, con sus paredes y techos llenos de extraordinarias pinturas  policromadas de animales ya desaparecidos de la Tierra. Y nadie lo crey&oacute;  entonces. La ciencia oficial neg&oacute; que aquellas pinturas hab&iacute;an sido realizadas  hacia m&aacute;s de diez mil a&ntilde;os.<\/p>\n<p>Sin embargo, gracias a la labor de los arque&oacute;logos y los  espele&oacute;logos, se descubrieron cientos de grutas de Europa y otros continentes,  evidenciando que el Hombre hab&iacute;a convivido con los animales prehist&oacute;ricos.<\/p>\n<p>Con sus exploraciones los espele&oacute;logos del mundo entero han hecho  notables aportaciones al conocimiento cient&iacute;fico de la geograf&iacute;a subterr&aacute;nea y  de la historia del arte.<\/p>\n<p>Con la ayuda del acual&oacute;n hemos explorado tierra adentro, cuevas  totalmente inundadas de agua dentro de las que hemos descubierto estalactitas,  estalagmitas y otras bellas formaciones, que forzosamente se originaron&nbsp; en un ambiente a&eacute;reo, es decir cuando la  cueva se hallaba sin agua, pues tales formaciones solo pueden crecer por el  goteo libre para sedimentar el carbonato de cal de aquellas estalactitas, todo  lo cual llev&oacute; a la conclusi&oacute;n&nbsp; de que el  nivel de las aguas subterr&aacute;neas hab&iacute;an subido y vuelto a descender, lo que a su  vez estuvo controlado por las fluctuaciones del nivel marino.<\/p>\n<p>Un muy reciente descubrimiento realizado por el buzo y espele&oacute;logo  franc&eacute;s Henri Cosquer en la   Bah&iacute;a de La   Triperie, en el Mar Mediterr&aacute;neo, Francia , ha venido a probar  fehacientemente que cuando el hombre prehist&oacute;rico pint&oacute; el arte rupestre de la Edad de Hielo, el mar se  encontraba a m&aacute;s de 36   metros bajo el nivel actual oce&aacute;nico.<\/p>\n<p align=\"center\"> <script language=\"javascript\">\timgGrandeChica('Na caverna - Eldorado, SP', 'jpg',620,820)<\/script> <\/p>\n<p align=\"center\"><em>Na caverna &#8211; Eldorado.<\/em><\/p>\n<p>En sus exploraciones submarinas Cosquer hab&iacute;a visto, a la  profundidad se&ntilde;alada, la boca de una cueva que presentaba una galer&iacute;a  ascendente. El intr&eacute;pido espele&oacute;logo no se amedrent&oacute; y nadando ascendi&oacute; por el  peligroso pasadizo. Al final sac&oacute; la cabeza fuera del agua y apenas pudo creer  lo que ve&iacute;a: estaba en un lago de agua salada bajo la p&eacute;trea comba de una gran  gruta que por su gran belleza le pareci&oacute; una catedral. Pero m&aacute;s sorprendente  qued&oacute; al observar que las paredes del antro estaban repletas de maravillosas  pinturas que nadie hab&iacute;a contemplado durante miles de a&ntilde;os. Para Cosquer y  todos los cient&iacute;ficos que conocieron su hallazgo no quedaban dudas de que los  pintores de aquellas escenas, donde aparecen ciervos y otros animales, hab&iacute;an  penetrado por el t&uacute;nel ascendente cuando el nivel del Mar Mediterr&aacute;neo estaba  por debajo de aquella boca cavernaria, la que despu&eacute;s, al subir el nivel  oce&aacute;nico, se cubri&oacute; de agua, clausur&aacute;ndola as&iacute; para la vista de los hombres a  lo largo de veinte milenios. <\/p>\n<p>Muchos a&ntilde;os antes de dicho descubrimiento, ya nosotros hab&iacute;amos  realizado en las costas de Cuba una sistem&aacute;tica exploraci&oacute;n y estudio de los  nichos de mareas, tanto emergidas como submarinos. Por nichos de mareas se  entienden las indudables huellas dejadas por los niveles del nivel del mar a lo  largo de miles de a&ntilde;os. As&iacute; descubrimos nichos a 120 metros de altitud en  las cercan&iacute;as de Baracoa y otros bajo el mar, a 6 metros, a m&aacute;s de cuevas  sumergidas a &ndash;70 metros, las cuales debieron originarse cuando el fondo  oce&aacute;nico, donde hoy se abren estaban sobre la&nbsp;  superficie terrestre, de manera que en Cuba hay evidencias irrefutables  de que el nivel del mar ha subido y bajado en una amplitud de 190 metros.<\/p>\n<p>En tiempos recientes se habla mucho del efecto invernadero, aumento  de la temperatura y su consecuencia en la subida del nivel del mar, y de la  cat&aacute;strofe que tendr&iacute;a lugar, sobre todo en las zonas bajas costeras, pero en  rigor cient&iacute;fico la variaci&oacute;n del nivel oce&aacute;nico se ha producido en los &uacute;ltimos  miles de a&ntilde;os, sin que interviniera la acci&oacute;n del hombre, aunque en la alguna  medida esos movimientos verticales del mar pudieran ahora acrecentarse por la  acci&oacute;n industrial.<\/p>\n<p>Los anteriores conocimientos son muy importantes para el hombre  actual, porque ya sabe de los peligros que lo asedian en cuanto a que todas sus  construcciones costeras, donde se asientan muchas de sus grandes ciudades,  podr&iacute;an ser cubiertas por el mar en caso de ascenso de la&nbsp; temperatura, lo cual ocasionar&iacute;a el  derretimiento de los hielos polares, y adem&aacute;s har&iacute;a aumentar el volumen de los  oc&eacute;anos.<\/p>\n<p>La ciencia es el &uacute;nico factor que puede convertirnos en profeta. La  larga observaci&oacute;n milenaria realizada por el Hombre de los fen&oacute;menos de la Naturaleza ha logrado  hacerlo profeta, en la acepci&oacute;n m&aacute;s cient&iacute;fica de la palabra. Profetas son, por  ejemplo, los astr&oacute;nomos que pueden calcular los eclipses de Sol y otros  fen&oacute;menos celestes. Carlos Marx realiz&oacute; una proeza gigantesca del pensamiento  racional humano al profetizar el paso de la sociedad capitalista al de la  sociedad socialista.<\/p>\n<p>Se puede predecir, bas&aacute;ndose en experiencias cient&iacute;ficas que las  llanuras de Yucat&aacute;n, como las de Cuba y otras partes del mundo, corren el  riesgo de ser de nuevo inundadas por el mar como lo estuvieron antes y el  Hombre tiene que estar preparado para esta emergencia.<\/p>\n<p>Si en el mundo futuro ocurren los ciclos que han acaecido en los  diez mil a&ntilde;os anteriores, el nivel del mar tender&aacute; a subir como evidencian las  investigaciones mareogr&aacute;ficas m&aacute;s recientes.<\/p>\n<p align=\"center\"> <script language=\"javascript\">\timgGrandeChica('grutas loltun', 'jpg',820,620)<\/script> <\/p>\n<p align=\"center\"><em>Grutas de Lolt&uacute;n, M&eacute;xico.<\/em><\/p>\n<p>Todo el mundo se queja de que cada d&iacute;a hay m&aacute;s calor y es que  realmente hay un poco de m&aacute;s calor todos los a&ntilde;os.<\/p>\n<p>Hoy sabemos que el clima del mundo se calienta adem&aacute;s,  artificialmente, con sus industrias contaminantes, lo que, como hemos dicho,  puede acelerar un proceso catastr&oacute;fico.<\/p>\n<p>Pasando a otro tema espeleol&oacute;gico, quiero decirles tambi&eacute;n que hace  a&ntilde;os iniciamos en Cuba ciertos cultivos en cavernas, como hongos comestibles,  de manera que as&iacute; podemos tener varios pisos agr&iacute;colas, superpuestos, uno  arriba y otro debajo de la tierra.<\/p>\n<p>Tambi&eacute;n una incidencia econ&oacute;mica de la espeleolog&iacute;a es el turismo.  Las&nbsp; cuevas se han convertido en objetivos  tur&iacute;sticos, es decir, econ&oacute;micos.<\/p>\n<p>No debemos olvidar en el tema que estamos tratando, los estudios de  espeleoterapia. Las cuevas ahora son utilizadas para ciertas afecciones debido  a su ambiente especial.&nbsp; <\/p>\n<\/div>\n<p><!--nextpage--><script language=\"javascript\">function imgGrandeChica_old(nombreImagen, formato, ancho, alto){\tdocument.write('<a href=\"javascript:;\" onClick=\"window.open(\\'..\/images\/upload\/'+nombreImagen+'_g.'+formato+'\\',\\'nombreImagen\\',\\'width='+ancho+', height='+alto+'\\')\"> <img decoding=\"async\" src=\"http:\/\/montanismo.org\/images\/upload\/'+nombreImagen+'_k.'+formato+'\" border=\"0\" \/><\/a>')\t}<\/script><\/p>\n<div align=\"justify\">\n<p>Durante mucho tiempo el mejor tabaco del mundo, el habano, logr&oacute; su  mayor calidad con los fertilizantes que&nbsp;  sal&iacute;an del guano de murci&eacute;lago que atesoraban nuestras cuevas, en fin  que se van encontrando muchos aspectos en las cuevas, que pueden ser &uacute;tiles a la Humanidad, sin contar  que la espeleolog&iacute;a no es solo el estudio de las cuevas como tales. Existe la  espeleoarqueolog&iacute;a, es decir la relaci&oacute;n de la caverna y el desarrollo de las  culturas primitivas. En las grutas estudiamos petroglifos, pictograf&iacute;as, en una  palabra el arte rupestre.<\/p>\n<p>Tambi&eacute;n tenemos una ciencia muy importante que es la  bioespeleolog&iacute;a, que estudia el desarrollo de la vida subterr&aacute;nea que no est&aacute;  tan afectada por el cambio brusco de la temperatura del exterior. En esa  disciplina hay un riqu&iacute;simo arsenal de datos cient&iacute;ficos por descubrir, sobre  todo, en Yucat&aacute;n y Cuba, dos de los escenarios m&aacute;s ricos para el estudio de la  espeleobiolog&iacute;a. En Cuba por ejemplo, hemos encontrado las &uacute;nicas especies de  esponjas de agua dulce subterr&aacute;neas que existen en el planeta. En mis largas andanzas  por el mundo me encontr&eacute; con un caso excepcional, las esponjas de agua dulce  del lago Baikal, en el centro de Siberia.<\/p>\n<p align=\"center\"> <script language=\"javascript\">\timgGrandeChica('Zubiaren kobazuloaren bukaerako gela', 'jpg',820,552)<\/script> <\/p>\n<p>Existe igualmente la espeleoclimatolog&iacute;a y otras much&iacute;simas ciencias  que tienen que ver con el estudio de las cuevas.<\/p>\n<p>Recuerdo una frase del profesor Salvador Massip, uno de los  fundadores de la   Geograf&iacute;a Cient&iacute;fica de Cuba: la espeleolog&iacute;a es una de las  ciencias m&aacute;s complejas a que puede dedicar su inteligencia el hombre.<\/p>\n<p>Quiero tambi&eacute;n recordar ahora una an&eacute;cdota de mis exploraciones aqu&iacute;  en la pen&iacute;nsula de Yucat&aacute;n, a donde llegu&eacute; hace diez a&ntilde;os invitado por el  gobernador del Estado de Quintana Roo, Pedro Joaqu&iacute;n Codwell, que ahora es  secretario de Turismo en M&eacute;xico, ocasi&oacute;n en que le expusimos nuestro deseo de  explorar el Cenote Azul, cerca de Bacalar.<\/p>\n<p>Ya conoc&iacute;amos por nuestras exploraciones la caverna submarina  llamada El Ojo del M&eacute;gano, en la costa Norte de Cuba, porque vista desde lejos,  en un barco, se ve como un ojo redondo, azul, inmenso. Otros espele&oacute;logos  llaman agujeros azules a estas furnias submarinas, de los cuales hay muchos en  las Bahamas, donde se ha encontrado algunos hasta de 70 metros de profundidad  como la del El Ojo de M&eacute;gano.<\/p>\n<p>Aquella coincidencia nos llam&oacute; mucho la atenci&oacute;n y al continuar  nuestras exploraciones encontramos en la costa meridional de Cuba furnias que  tambi&eacute;n tienen 70 metros  de profundidad.<\/p>\n<p>Hab&iacute;amos estudiado ya una l&iacute;nea de Norte a Sur entre las Bahamas y  Cuba, con cuevas a la profundidad citada y as&iacute; nos dimos cuenta que esto  obedec&iacute;a a que el mar se hab&iacute;a estacionado en un momento dado, en una &eacute;poca  glaciar anterior, en la marca de 70 metros bajo el nivel del mar, pues aquellas  cuevas se hab&iacute;an originado cuando estaban por encima de dicho nivel, pero nos  faltaba una prueba, para hacer un transecto de Este a Oeste, es decir deb&iacute;amos  encontrar en Yucat&aacute;n, un cenote de 70 metros de profundidad. Y con algunas  personalidades de Chetumal fuimos al Cenote Azul. Al llegar all&iacute; nos pusimos  nuestros atuendos submarinos. Antes de lanzarnos al agua, preguntamos a los  presentes si sab&iacute;an la profundidad que ten&iacute;a el cenote y nos dijeron que no  ten&iacute;a fondo. Yo me hab&iacute;a atrevido d&iacute;as antes a decirle a Pedro Joaqu&iacute;n, que el  Cenote Azul pose&iacute;a 70   metros de profundidad.<\/p>\n<p align=\"center\"> <script language=\"javascript\">\timgGrandeChica('Sifonsubterraneo', 'jpg',660,820)<\/script> <\/p>\n<p>Nos tiramos al agua. Contemplamos formaciones estalact&iacute;ticas que nos  probaron que antes el cenote no estaba cubierto de agua, y cuando salimos a la  furnia vimos que all&iacute; nos estaban esperando con gran ansiedad nuestros amigos,  deseosos de conocer la profundidad del cenote.<\/p>\n<p>Delante de todos comenzamos a medir el cordel que hab&iacute;amos dejado  caer hasta el fondo de la furnia y empezamos a contar 1, 2, 3 hasta 70 metros. Ni uno m&aacute;s ni  uno menos.<\/p>\n<p>Al enterarse Pedro Joaqu&iacute;n coment&oacute; asombrado que aquello era un acto  de brujer&iacute;a, de magia, y entonces le expliqu&eacute; c&oacute;mo hab&iacute;a llegado a aquella  conclusi&oacute;n.&nbsp;&nbsp; <\/p>\n<p>Por los estudios del Comandante Cousteau se dec&iacute;a que el agujero  azul m&aacute;s profundo del mundo era el del Faro que est&aacute; frente a Belice, en el  Golfo de Honduras y que tiene 154 metros, pero nosotros en la expedici&oacute;n &ldquo;En  Canoa del Amazonas al&nbsp; Caribe&rdquo;, logramos  descubrir en Long Island, en Bahamas, un <em>blue  hole<\/em>, mucho m&aacute;s profundo que el reportado por Cousteau, y al cual le  medimos 192 metros  de profundidad, que a su vez se&ntilde;ala la m&aacute;xima bajada del nivel del Oc&eacute;ano Mundial  durante una gran glaciaci&oacute;n en que se hab&iacute;an acumulado enormes masas de hielo  sobre los continentes y mares.<\/p>\n<p>El eurocentrismo es un fen&oacute;meno cultural, digno de tenerse en  cuenta, porque muchos de los hechos que conocemos hoy en el Nuevo Mundo no obedecen  a realidades americanas, sino a elucubraciones importadas. Por ejemplo el  nombre de nuestra es Espeleolog&iacute;a, pero hay una palabra de m&aacute;s amplitud que es la Carsolog&iacute;a. &iquest;De d&oacute;nde  viene esta palabra de Carsolog&iacute;a? &iquest;De d&oacute;nde la palabra Carso? Pues se acostumbra  a decir que Yucat&aacute;n es un carso, que en la Sierra de los &Oacute;rganos, en Cuba, ese un carso o  Kueilin en China es un carso. <\/p>\n<p>Pues esos nombres de carso y carsolog&iacute;a provienen de la Meseta del karst o del  Carso, en Yugoeslavia. En s&iacute;ntesis, cient&iacute;ficamente carso, quiere decir una  regi&oacute;n caliza semejante a la de aquella regi&oacute;n europea, con numerosas cuevas y  donde el drenaje superficial ha sido sustituido por el subterr&aacute;neo.<\/p>\n<p>Yo dec&iacute;a en una conferencia que ofrec&iacute; en la Universidad de Oxford  en 1985, que si los cars&oacute;logos europeos, creadores de la ciencia carsol&oacute;gica  hubieran conocido la   Pen&iacute;nsula de Yucat&aacute;n le hubieran llamado a esa ciencia  Yucatanolog&iacute;a, con la ventaja de que la riqueza espeleol&oacute;gica y carsol&oacute;gica de  Yucat&aacute;n es superior a la que puede presentarnos el carso yugoeslavo. Claro, si  el estudio se hubiera iniciado, no en Yucat&aacute;n, sino en la Sierra de los &Oacute;rganos, en  Cuba, le hubieran llamado Organolog&iacute;a o los chinos la hubieran bautizado  kuelinolog&iacute;a, por el riqu&iacute;simo carso de la regi&oacute;n Kueilin, y as&iacute; sucesivamente,  pero bueno se llama carsolog&iacute;a porque Europa es Europa y Europa nos impuso la  corbata, nos impuso el saco, nos impuso mucho de la arquitectura moderna, pero  en los tiempos actuales vemos adentr&aacute;ndonos en el mejor conocimiento de nuestras  propias realidades, vamos aprendiendo que el Carso Triestino, el de Yugoslavia,  es una meseta muy distinta que la del carso c&oacute;nico de la Sierra de lo &Oacute;rganos, de  Cuba, o el llano de Yucat&aacute;n o el carso de c&uacute;pula de Kueilin y as&iacute; van surgiendo  del estudio directo de nuestro propio medio, nuevos aportes extraeuropeos al  conocimiento cient&iacute;fico mundial.<\/p>\n<p align=\"center\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" width=\"480\" height=\"360\" border=\"0\" align=\"middle\" src=\"http:\/\/montanismo.org\/images\/upload\/Tatu IV.jpg\" alt=\"\" \/><\/p>\n<p>Y para finalizar, lo siguiente:<\/p>\n<p>En el 40 aniversario de la Sociedad Espeleol&oacute;gica  de Cuba, hace doce a&ntilde;os, expusimos la consigna de &ldquo;Hacia una Cultura de la Naturaleza&rdquo;, que ha  prendido mucho en el seno de los espele&oacute;logos, as&iacute; convertidos en abanderados  de la protecci&oacute;n de la   Naturaleza.<\/p>\n<p>Nosotros hemos tenido en Cuba una tradici&oacute;n hist&oacute;rica de gran  incultura de la Naturaleza,  porque, &iexcl;claro!, los bosques estaban ah&iacute; y los extranjeros los talaron para  fabricar sus barcos o El Escorial de los reyes hisp&aacute;nicos. Tambi&eacute;n hab&iacute;a que  arrasar con los bosques para convertirlos en plantaciones azucareras y esto  trajo como consecuencia la erosi&oacute;n de los suelos, en fin la destrucci&oacute;n del  equilibrio ecol&oacute;gico de la   Naturaleza y por eso los espele&oacute;logos y ge&oacute;grafos cubanos  hemos levantado la consigna de &ldquo;Hacia una Cultura de la Naturaleza&rdquo;, para  proteger el medio ambiente.<\/p>\n<p>Hoy nuestra Ley de Protecci&oacute;n del Medio Ambiente y de los Recursos  Naturales recogi&oacute; esta fase en su articulado y ya nuestro pueblo habla de una  cultura de la Naturaleza.<\/p>\n<p>Y nada me gustar&iacute;a m&aacute;s que esa bandera ecol&oacute;gica de la que  pudi&eacute;ramos compartir con los colegas mexicanos.<\/p>\n<p>Les reitero mi gratitud profunda a todos ustedes, por haber tenido  la paciencia de escuchar a este viejo espele&oacute;logo cubano, ahora de visita en  Yucat&aacute;n, la primera tierra que conoc&iacute;, en 1948, despu&eacute;s de la m&iacute;a, Cuba.<\/p>\n<p align=\"right\">Antonio N&uacute;&ntilde;ez Jim&eacute;nez.4 de noviembre de 1991<\/p>\n<\/div>\n<div align=\"right\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" width=\"15\" height=\"14\" alt=\"\" src=\"\/images\/upload\/puma.gif\" \/><\/div>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<table width=\"100%\" cellspacing=\"2\" cellpadding=\"2\" border=\"0\" summary=\"\">\n<tbody>\n<tr>\n<td width=\"329\">\n<p align=\"justify\">El mundo subterr&aacute;neo es m&aacute;gico pero atrayente. A pesar del miedo que puede provocar, el hombre sigue penetrando en ellas una y otra vez, cada vez m&aacute;s lejos en el interior de la tierra. &iquest;Por qu&eacute;? Esta es una conferencia que dictara Antonio N&uacute;&ntilde;ez Jim&eacute;nez durante la II Reuni&oacute;n de Espele&oacute;logos en Yucat&aacute;n, en 1991.            <\/p>\n<\/td>\n<td width=\"129\">\n<div align=\"center\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" width=\"110\" height=\"100\" src=\"http:\/\/montanismo.org\/images\/upload\/k_entrancavernas.jpg\" alt=\"\" \/><\/div>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n<p> <a href=\"https:\/\/montanismo.org\/2009\/por_que_el_hombre_penetra_en_la_caverna\/\"><\/a><\/p>\n","protected":false},"author":11609,"featured_media":0,"comment_status":"open","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"jetpack_post_was_ever_published":false,"_jetpack_newsletter_access":""},"categories":[1006],"tags":[],"jetpack_featured_media_url":"","jetpack_shortlink":"https:\/\/wp.me\/p51GhY-3Br","_links":{"self":[{"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/13853"}],"collection":[{"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/users\/11609"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=13853"}],"version-history":[{"count":1,"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/13853\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":18360,"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/13853\/revisions\/18360"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=13853"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=13853"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=13853"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}