{"id":12016,"date":"2003-12-15T00:00:00","date_gmt":"2003-12-15T00:00:00","guid":{"rendered":"http:\/\/montanismo.org\/revista\/?p=12016"},"modified":"2012-11-17T22:49:16","modified_gmt":"2012-11-18T04:49:16","slug":"ideario_123","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/montanismo.org\/2003\/ideario_123\/","title":{"rendered":"Ideario 123"},"content":{"rendered":"
Cuando la escuela me fallaba, cuando ten\u00eda la impresi\u00f3n de que el trabajo, los amigos e incluso mis seres queridos me hab\u00edan defraudado —o yo a ellos—, Segu\u00eda creyendo en el mar. As\u00ed fue cobrando forma en mi cerebro una curiosa teor\u00eda: deb\u00eda compensar al mar por todos sus dones, y la \u00fanica manera de saldar la deuda era adentrarme en las aguas, llegar hasta sus mism\u00edsimas entra\u00f1as, aceptar cuanto quisiera poner a mi alcance y no conformarme con el obsequio de los veranos pasados en Long Island o en la costa de Maine.<\/p>\n
David Hays<\/p>\n
\n A los marinos les parece que las tempestades tienen malas intenciones, y es cierto que las muy astutas siempre se las componen para dar contigo. Pero si descubres la belleza que se esconde tras el caos, todo tiene arreglo.<\/p>\n
Dan Hays<\/p>\n
\n Nuestros d\u00edas transcurren sin restricciones de tiempo ni de espacio, plenos de vistas amplias de cielo y tierra, que ensanchan nuestras mentes y agrandan nuestras almas. Aunque puede ser peligroso y duro, a veces el desierto nos premia con su especial belleza, sobre todo durante las horas frescas de la ma\u00f1ana y del atardecer. Las noches salpicadas de estrellas son, asimismo, estimulantes. Nunca he visto el cielo de la noche tan radiante como a trav\u00e9s del transparente aire del desierto, lejos de la niebla y el resplandor de las ciudades. Ahora comprendo por qu\u00e9 tantos grandes profetas de la Antig\u00fcedad proced\u00edan del desierto o cultivaron en \u00e9l su espiritualidad. Como los nubios, somos pobres en bienes materiales y estamos apartados del mundo moderno, pero experimentamos una gran sensaci\u00f3n de contento y libertad. Carecemos de un verdadero hogar, de comida abundante, de lujos modernos; tenemos la arena por lecho y el cielo por dosel; mas gozamos de juventud, amistad, salud, aventura, nuevas experiencias, y nos recreamos con la belleza natural y una sensaci\u00f3n sin precedentes de estar cerca de Dios. Por lo que a m\u00ed respecta, no puedo pedir m\u00e1s en la vida.<\/p>\n
John Goddard<\/p>\n
\n La incomodidad es un elemento destructor muy serio del esp\u00edritu, y hace falta una profunda comprensi\u00f3n de la necesidad de compartir las incomodidades para que la persona que sufre se reconcilie con el dolor y el padecimiento y est\u00e9 dispuesta a no mejorar su suerte si ha de hacerlo a expensas de los dem\u00e1s. Esta clase de comprensi\u00f3n se llama camarader\u00eda.<\/p>\n
Dougal Robertson<\/p>\n<\/div>\n