{"id":11979,"date":"2003-10-15T00:00:00","date_gmt":"2003-10-15T00:00:00","guid":{"rendered":"http:\/\/montanismo.org\/revista\/?p=11979"},"modified":"2003-10-15T00:00:00","modified_gmt":"2003-10-15T00:00:00","slug":"biodiversidad_","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/montanismo.org\/2003\/biodiversidad_\/","title":{"rendered":"BIODIVERSIDAD"},"content":{"rendered":"
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Las montañas parecen impenetrables monolitos de roca, pero, en realidad, son una de las principales fuentes de biodiversidad del mundo, que acogen a incontables especies de plantas y animales. Muchas de estas especies ya han desaparecido de las tierras bajas, invadidas por la actividad humana. Muchas otras no existen sino en las montañas. Todos nosotros, donde quiera que vivamos, tenemos la obligación de proteger la biodiversidad de las montañas, pero los pobladores de estas zonas son los principales guardianes de estos insustituibles recursos planetarios. A través de las generaciones, los pueblos de las montañas han adquirido un conocimiento único y detallado de sus ecosistemas. Hasta el presente, los gobiernos y las organizaciones internacionales han desatendido en general el conocimiento de estos pueblos y la importante función de las montañas en la conservación de gran parte de la biodiversidad del mundo. <\/p>\n

INFORMACIÃ?N IMPORTANTE<\/b> <\/p>\n