{"id":11655,"date":"2003-05-15T00:00:00","date_gmt":"2003-05-15T00:00:00","guid":{"rendered":"http:\/\/montanismo.org\/revista\/?p=11655"},"modified":"2012-11-21T13:53:17","modified_gmt":"2012-11-21T19:53:17","slug":"alpinismo_mexicano","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/montanismo.org\/2003\/alpinismo_mexicano\/","title":{"rendered":"Alpinismo mexicano"},"content":{"rendered":"
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Armando Altamira. Alpinismo mexicano<\/i>. Editorial ECLALSA, M\u00e9xico. 1972. 208 p\u00e1ginas. S\/ISBN.<\/p>\n\n\n
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…el bello pensamiento de saber renunciar en la monta\u00f1a y que es tenido por una virtud, le parece dif\u00edcil de digerir.<\/p>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/table>\n

\n La llamada "\u00e9poca de oro" de la escalada en M\u00e9xico reuni\u00f3 a varios escaladores que giraban en torno a objetivos comunes: escalar rutas de alta dificultad o en paredes nuevas. El peque\u00f1o c\u00edrculo de escaladores ascend\u00edan por una v\u00eda u otra hasta que se conoc\u00edan entre s\u00ed y formaban eventualmente una cordada para un objetivo especial.<\/p>\n

Alpinismo Mexicano<\/em> es un libro escrito dos d\u00e9cadas despu\u00e9s, pero en el que se puede sentir todav\u00eda el calor de la escalada en el autor, desde sus inicios hasta las escaladas de importancia que realiza: el Abanico, en el Popocat\u00e9petl, la pared de El Centinela, en el Iztacc\u00edhuatl, la primera solitaria a la Benito Ram\u00edrez o la primera repetici\u00f3n a Las Goteras, esa pared donde naci\u00f3 en M\u00e9xico la t\u00e9cnica de escalada artificial.<\/p>\n

El libro abarca al monta\u00f1ismo desde sus inicios en M\u00e9xico (1922): "El alpinismo como deporte comenz\u00f3 en M\u00e9xico al terminar el movimiento armado de la Revoluci\u00f3n Mexicana. En un principio fueron t\u00edmidas salidas por las sierras bajas, despu\u00e9s las excursiones cubrieron m\u00e1s terreno hasta que llegaron los d\u00edas de los tiempos r\u00e9cords." (p. 65)<\/p>\n

Tiene una secci\u00f3n muy interesante y bastante extensa de lo que el autor llama "paleomonta\u00f1ismo", que es la historia de las ascensiones en M\u00e9xico desde la \u00e9poca precolombina. Dos secciones aparte son: "El valle del nihilismo" y "Fichas t\u00e9cnicas".<\/p>\n

En la primera, Armando Altamira hace una cr\u00edtica al alpinismo mexicano tal como lo ve \u00e9l, aunque su visi\u00f3n es precisamente fijarse en los errores de quienes no son como \u00e9l y no desde su propio punto de vista. Por ejemplo, menciona que "…esencialmente, el alpinismo no pertenece a las masas." (p. 151) Actualmente, su afirmaci\u00f3n no tiene sentido, aunque s\u00ed lo tiene si se habla del alpinismo extremo.<\/p>\n

Las fichas t\u00e9cnicas son los datos necesarios para ir a las paredes recomendadas por el autor, fichas que tuvieron una gran importancia en su tiempo y empujaron a varios escaladores a buscar las paredes. Sin embargo, son pocas, pues el libro no pretende ser una colecci\u00f3n de fichas.<\/p>\n

La parte m\u00e1s importante y por la que Alpinismo Mexicano<\/em> fue duramente criticado cuando su aparici\u00f3n es "Preliminares", es decir: la aparici\u00f3n de un excursionista (\u00e9l) que mira una pared y decide convertirse en escalador: "Alguna vez observ\u00e9 escalar y me pareci\u00f3 un asunto lleno de angustia, ahora en plena acci\u00f3n entiendo que aquello ten\u00eda mucho de contemplaci\u00f3n ociosa." (p. 81) El cambio se opera de manera profunda:<\/p>\n

"Entiendo esto: quien ve hacia la monta\u00f1a como lo est\u00e1s haciendo, es decir, el que pretende hacerse escalador, no vuelve a sentir la tranquilidad de una vida normal; lo que sucede all\u00e1 arriba mientras se progresa por una pared o por una arista nada tiene de normal y no es razonable tampoco que cuando se camina de nuevo por el valle luego de abandonar la cumbre castigado por la sed y el cansancio, uno jura que volver\u00e1 pronto a escalar; con lo que empieza as\u00ed una forma de vida hasta entonces desconocida llena de momentos agradables cuando se obtiene el triunfo pero con resultados duros cuando este no se logra…" (p. 80)<\/p>\n

Su historial como escalador es el que muchos escaladores recorrieron, incluso las paredes y situaciones son similares: "…yo tambi\u00e9n sent\u00ed admiraci\u00f3n casi reverente por los conquistadores de esta cima. Fue un gesto que el tiempo torn\u00f3 en igualdad y posteriormente esta fue desplazada por un sentimiento m\u00e1s recio." (p. 79)<\/p>\n

En un libro en que se habla esencialmente de uno mismo y la propia trayectoria dentro de un deporte que entonces (y todav\u00eda ahora, auque ya es menor) era considerado suicida, el autor no puede evitar dejar plasmados algunos puntos en los que \u00e9l mismo basa su firmeza en ascender monta\u00f1as:<\/p>\n

"Est\u00e1 fuera de discusi\u00f3n que el hombre no va a las monta\u00f1as con el deseo de perder la vida, pero la dificultad que encuentra \u00e9ste de vencer los obst\u00e1culos gran\u00edticos es la esencia misma del alpinismo." (p. 149)<\/p>\n

"Para alcanzar el \u00e9xito no se necesita la amistad, basta que dos individuos bien preparados se unan con el inter\u00e9s com\u00fan de llegar a una cumbre." (p. 88) M\u00e1s adelante, sin embargo, se\u00f1ala categ\u00f3ricamente: "…la confianza entre miembros de una cordada es factor decisivo en una ascensi\u00f3n." (p. 89)<\/p>\n

El libro est\u00e1 escrito siempre en tiempo presente y hace que el lector se coloque en el lugar del narrador, pues no siempre habla de \u00e9l. Por ejemplo, tiene un cap\u00edtulo muy interesante sobre la conquista de Las Goteras y otro de la primera y \u00fanica escalada del cr\u00e1ter del Popocat\u00e9petl cuando la erupci\u00f3n de 1929.<\/p>\n

Uno se pregunta el por qu\u00e9 fue tan duramente criticado el libro y la respuesta aparece durante una segunda lectura: lo que Armando Altamira llama "Alpinismo Mexicano" no es m\u00e1s que el alpinismo que \u00e9l practic\u00f3. Quiz\u00e1 el t\u00edtulo fue infortunado pero el libro sigue siendo una excelente obra de literatura en los aspectos que abarc\u00f3.\n<\/p>\n<\/div>\n

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\n Entiendo esto: quien ve hacia la montaña como lo estás haciendo, es decir, el que pretende hacerse escalador, no vuelve a sentir la tranquilidad de una vida normal; lo que sucede allá arriba mientras se progresa por una pared o por una arista nada tiene de normal y no es razonable tampoco que cuando se camina de nuevo por el valle luego de abandonar la cumbre castigado por la sed y el cansancio, uno jura que volverá pronto a escalar; con lo que empieza así una forma de vida hasta entonces desconocida llena de momentos agradables cuando se obtiene el triunfo pero con resultados duros cuando este no se logra…<\/em><\/p>\n<\/td>\n

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