{"id":11564,"date":"2002-06-15T00:00:00","date_gmt":"2002-06-15T00:00:00","guid":{"rendered":"http:\/\/montanismo.org\/revista\/?p=11564"},"modified":"2012-11-20T13:01:22","modified_gmt":"2012-11-20T19:01:22","slug":"viviendo_con_canibales","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/montanismo.org\/2002\/viviendo_con_canibales\/","title":{"rendered":"Viviendo con can\u00edbales"},"content":{"rendered":"
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Michele Slung. Viviendo con can\u00edbales y otras historias de mujeres<\/i>. National Geographic Adventure Press \/ RBA. Barcelona. 2000. 254 p\u00e1ginas. ISBN: 84-8298-209-5<\/p>\n

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Como pionera, a veces sent\u00ed la soledad, pero he obtenido una enorme satisfacci\u00f3n que mis seguidores nunca podr\u00e1n conocer.<\/p>\n

Dian Fossey<\/p>\n

…los viajeros gozan del privilegio de hacer las cosas m\u00e1s impropias con perfecta propiedad. En esto consiste el encanto de viajar.<\/p>\n

Isabella Bird Bishop<\/p>\n<\/blockquote>\n<\/blockquote>\n

\n Los exploradores casi siempre se mencionan en masculino pero, "qu\u00e9 hay de las mujeres exploradoras? ¿Qu\u00e9 han hecho? Viviendo con can\u00edbales<\/i> es una antolog\u00eda interesante de la vida de algunas exploradoras, desde la selva de Borneo hasta el Polo Norte y de las profundidades del mar a aquellas otras del espacio.<\/p>\n

Diecis\u00e9is biograf\u00edas de mujeres que han realizado una aportaci\u00f3n al conocimiento del mundo en sus respectivas \u00e1reas es algo digno de tenerse en cuenta, sobre todo si se colocan no s\u00f3lo a las presentes (Catherine Destivelle o Dian Fossey, por ejemplo) sino a las ya legendarias, como Florence Baker en su viaje junto con su esposo a la fuente del Lago Alberto, una de las fuentes del Nilo Blanco.<\/p>\n

Como mujeres, deb\u00edan y deben luchar contra los prejuicios de sus respectivas \u00e9pocas, pero "Entre los descubrimientos realizados por las mujeres exploradoras quiz\u00e1 el m\u00e1s importante fue sentir la libertad que proporciona el propio acto de explorar." (Reeve Lindbergh, p. 13)<\/p>\n

Catherine Destivelle, una de las m\u00e1s famosas escaladoras del mundo, se queja de esa popularidad que le han dado los medios de difusi\u00f3n masivos:<\/p>\n

"A veces quiero ser famosa y a veces no", admite Catherine [Destivelle]. Tras 15 a\u00f1os siendo objeto de atenci\u00f3n de los medios informativos de todo el mundo, se ha ganado el pintoresco sobrenombre de «Reina de la roca» o «Estrella de la roca» y ha sido aclamada como la grande dame des sommets<\/i>. Por esta raz\u00f3n sabe perfectamente lo dif\u00edcil que es ser reconocida por sus verdaderos objetivos "cuando la gente habla de ti de una forma en que no te reconoces»." (p. 62)<\/p>\n

Pero fuera de ese mundo que los monta\u00f1istas comprenden tan bien o perciben vagamente, ¿por qu\u00e9 una mujer debe viajar? "…paulatinamente llegamos a la convicci\u00f3n de que si prosegu\u00edamos nuestra vida en la ciudad, con las t\u00f3picas [sic] cuatro paredes de los apartamentos, escuelas y oficinas, morir\u00eda en nosotros lo que m\u00e1s apreci\u00e1bamos: el gusto por el descubrimiento." (Yva Momatiuk, cit. en p. 112)<\/p>\n

As\u00ed es como se empieza a viajar: "Viajar es para la mente lo que el ejercicio para el cuerpo. Uno debe estar abierto a todo cuanto le es extra\u00f1o y no dejarse intimidar por ello." (Arlene Burns, cit. en p. 84) Entonces, se llega a apreciar la vida de otra forma y "Cuando se vive de forma tan intensa, viajar puede convertirse en una adicci\u00f3n." (Arlene Burns, cit. en p. 93)<\/p>\n

Personas que sent\u00edan la fascinaci\u00f3n de viajar y de ir m\u00e1s all\u00e1 de lo que su mundotes dice que deben aceptar, las mujeres de esta antolog\u00eda son testimonio de lo que puede hacer la mujer no s\u00f3lo hoy: "En beneficio de las mujeres que no han subido por encima de los 5,000 metros pero que pretenden intentarlo, ofrezco mi experiencia por su puede ser de utilidad" (Fanny Bullock Workman, cit. en p. 59)<\/p>\n

El libro tiene una gran deficiencia: los cap\u00edtulos correspondientes a las mujeres no contempor\u00e1neas son bastante superficiales y contienen una dosis de feminismo que desmerece la labor realizada. En cambio, las biograf\u00edas contempor\u00e1neas son m\u00e1s directas y \u00e1giles.<\/p>\n

Erratas<\/b><\/p>\n

P\u00e1gina 65, antepen\u00faltima l\u00ednea, se menciona "la columna Bonatti". Se trata del Pilar Bonatti.<\/p>\n

P\u00e1gina 93, segundo p\u00e1rrafo, dice: "Despu\u00e9s de deslizarse sobre las corrientes del r\u00edo a lo largo de unos 150 kil\u00f3metros…" La cifra debe estar mal, pues habla del recorrido del r\u00edo Brahmaputra en kayak.<\/p>\n

P\u00e1gina 140, inicio del p\u00e1rrafo, dice: "Dian viajaba con…" Debe decir "Birut\u00e9", pues el cap\u00edtulo habla del trabajo de Birut\u00e9 Galdikas.<\/p>\n<\/div>\n

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\n El título no es más que uno entre varios de los capítulos que contiene. Yo lo llamaría más adecuadamente “Mujeres exploradoras”. Es la biografía breve de los hechos de cada una de ocho mujeres. Pese a ser un libro de la National Geographic Society, no tiene la profundidad de Cuerdas rebeldes y uno siente que se ha quedado apenas en la superficie. Pese a ello, el libro es valioso por ser el compendio de logros deportivos y científicos de mujeres, muchas de las cuales ni se han escuchado nombrar.<\/p>\n<\/td>\n

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