{"id":11505,"date":"2000-09-01T00:00:00","date_gmt":"2000-09-01T00:00:00","guid":{"rendered":"http:\/\/montanismo.org\/revista\/?p=11505"},"modified":"2003-04-26T00:00:00","modified_gmt":"2003-04-26T00:00:00","slug":"orientacion_y_lectura_de_mapas","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/montanismo.org\/2000\/orientacion_y_lectura_de_mapas\/","title":{"rendered":"Orientaci&oacute;n y lectura de mapas"},"content":{"rendered":"<div align=\"justify\"><\/p>\n<p><strong>GENERALIDADES<\/strong><\/p>\n<p>Todas las temporadas en la amplia geograf&iacute;a de Sudam&eacute;rica, salen al monte o a la monta&ntilde;a miles de cazadores, pescadores o turistas de aventura. Lo m&aacute;s normal es que regresen agotados y satisfechos de haber logrado sus prop&oacute;sitos. Pero tambi&eacute;n otros volver&aacute;n defraudados por una suerte adversa, aunque debemos reconocer que las situaciones de peligro que se presentan en la naturaleza en un 90% depender&aacute; de nosotros evitarlas.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p>Saber orientarse en cualquier regi&oacute;n es una virtud tan remota como la misma humanidad. Normalmente las personas cuando se trasladan lo hacen por el conocimiento de la zona y algunas por instinto, lo que no suele ser muy seguro. Ud. habitante de la gran ciudad, puede caminar por un alejado paraje boscoso, disfrutando de una di&aacute;fana ma&ntilde;ana hasta que al intentar regresar no puede encontrar la senda original. Inmediatamente busca ubicar el cerro que ten&iacute;a a su espalda pero ahora ve dos m&aacute;s. &quot;Alguien puso otro&quot; masculla con fastidio. Empieza a pensar que las sucesivas vueltas que dio lo han desorientado. Quiere regresar apresuradamente. &quot;Tal vez &eacute;sta sea la huella&#8230;; no, mejor intento por aquella otra.&quot; S&oacute;lo se confunde m&aacute;s y comprueba que est&aacute; definitivamente perdido. Pasan los minutos y la preocupaci&oacute;n inicial se convierte en angustia. &iexcl;Se viene la noche!  <\/p>\n<p><\/p>\n<p>La ignorancia asociada con la imprudencia hace que de vez en cuando aparezcan en los diarios noticias sobre personas extraviadas en alejados parajes. Sin duda, es una situaci&oacute;n muy desagradable que paraliza y hasta puede generar p&aacute;nico especialmente en personas habituadas al &quot;asfalto&quot;. Naturalmente esa sensaci&oacute;n de temor se acent&uacute;a con la llegada de la noche, el fr&iacute;o y al tomarse conciencia de la considerable distancia que nos separa de la civilizaci&oacute;n.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p>Es lamentable la poca importancia que se le suele dar al legendario mapa y a su compa&ntilde;era la br&uacute;jula. En tal sentido pude comprobar que la mayor&iacute;a de las personas desconocen las m&aacute;s elementales normas para interpretar y leer un mapa que contiene valiosa informaci&oacute;n. Por lo general los individuos que viven en las grandes urbes con enormes edificios, desconocen la ubicaci&oacute;n de los puntos cardinales y si uno de improviso les pregunta &iquest;d&oacute;nde est&aacute; el norte? Es muy probable que no sepan como responder. Es obvio que ellos no lo necesitan conocer; pues en las ciudades se estila llegar a un determinado punto por medio del conocimiento de las calles o preguntando. Pero esta circunstancia cambia abruptamente y hasta podr&iacute;a pagarse muy caro cuando se transita por terrenos desconocidos y solitarios.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p>Las posibilidades que tiene una persona de extraviarse o verse imposibilitada de regresar, son bastante altas en los departamentos de algunas provincias argentinas. En especial aquellas que tienen una muy baja densidad de poblaci&oacute;n y est&aacute;n en zonas lim&iacute;trofes. Para dimensionar mejor esto, s&oacute;lo dir&eacute; que casi 900.000 Km2 de la Patagonia est&aacute;n considerados como semidesierto. Para comprender mejor la vastedad de los enormes territorios que posee Sudam&eacute;rica, &uacute;nicamente mencionar&eacute; que existieron casos de aviones extraviados que aparecieron luego de m&aacute;s de 30 a&ntilde;os y otros a&uacute;n son buscados. Pero no es necesario alejarse tanto para desorientarse. Hace algunos a&ntilde;os en Sierra La Ventana (Provincia de Buenos Aires), se perdi&oacute; un nutrido grupo de escolares con sus profesores. Por fortuna fueron rescatados dos d&iacute;as despu&eacute;s sin consecuencias. Cuando sucede algo as&iacute;, la irresponsabilidad con la ignorancia van tomadas de la mano. No existen excusas.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p><strong>C&Oacute;MO PERDERSE <\/strong>  <\/p>\n<p><\/p>\n<ul>    <\/p>\n<li>No saber identificar puntos de referencia en el terreno. <\/li>\n<p>    <\/p>\n<li> No llevar una br&uacute;jula ni mapa de la zona o no saber emplearlos. <\/li>\n<p>    <\/p>\n<li> Estar desinformado de las caracter&iacute;sticas del terreno. <\/li>\n<p>    <\/p>\n<li> Desconocer los horarios diurnos del lugar. <\/li>\n<p>    <\/p>\n<li> Brusco cambio de las condiciones clim&aacute;ticas. <\/li>\n<p>    <\/p>\n<li> Perder el dominio emocional. <\/li>\n<p>    <\/p>\n<li> Accidente. <\/li>\n<p><\/ul>\n<p><\/p>\n<p><strong> LECTURA DE MAPAS <\/strong><\/p>\n<p>Un mapa es la representaci&oacute;n gr&aacute;fica de una porci&oacute;n de la superficie terrestre. Para un cazador, deportista, etc. Lo mejor para orientarse son las cartas topogr&aacute;ficas que imprime el Instituto Geogr&aacute;fico Militar Argentino. Estas cartas constituyen maravillosos planos de precisi&oacute;n, son elementos primarios de orientaci&oacute;n y si se saben usar, juegan un papel vital. En ellas encontramos signos convencionales llamados topogr&aacute;ficos que asocian caracter&iacute;sticas de diversas representaciones y est&aacute;n indicados en los m&aacute;rgenes de la hoja. El conocimiento de estos s&iacute;mbolos cartogr&aacute;ficos nos permitir&aacute; leer un mapa con absoluta facilidad asociando dichos s&iacute;mbolos convencionales con casas, caminos, monta&ntilde;as, etc. B&aacute;sicamente se dividen en dos grandes grupos:   <\/p>\n<p><\/p>\n<ol>    <\/p>\n<li>Los elementos planim&eacute;tricos, que representan caminos, egetaci&oacute;n,  hidrograf&iacute;a y construcciones. <\/li>\n<p>    <\/p>\n<li> Los elementos altim&eacute;tricos, que representan los desniveles del suelo. Para representar las alturas (monta&ntilde;as), el mejor sistema es el de curvas de nivel y consiste en l&iacute;neas representadas en el papel que unen puntos terrestres de una misma altura. Una verdadera carta topogr&aacute;fica debe expresar la planimetr&iacute;a y la altimetr&iacute;a del terreno que representa. <\/li>\n<p><\/ol>\n<p><\/p>\n<p> Estas cartas topogr&aacute;ficas, poseen una red de cuadr&iacute;culas formadas por l&iacute;neas que corren de norte a sur y de este a oeste. La distancia entre esas l&iacute;neas representan 1000 o 4000 metros seg&uacute;n la escala de que se trate y nos permiten se&ntilde;alar un determinado lugar geogr&aacute;fico. No es serio un mapa que carezca de escala. Para definirla podemos decir que es la permanente relaci&oacute;n de la distancia real del terreno con la correspondiente en el papel. Esto nos ayudar&aacute; a determinar distancias. S&oacute;lo los mapas y las cartas topogr&aacute;ficas tienen escalas precisas que aparecen al final de la hoja, lo que no ocurre con algunos folletos de rutas. Aqu&iacute; debo reconocer que los mapas de caminos que edita el Autom&oacute;vil Club Argentino, por ser espec&iacute;ficos, est&aacute;n m&aacute;s actualizados con relaci&oacute;n a las rutas y caminos, pero no son precisos topogr&aacute;ficamente.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p><\/p>\n<div align=\"center\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" width=\"341\" height=\"211\" border=\"1\" alt=\"\" src=\"\/images\/upload\/topogr1.gif\" \/><\/p>\n<blockquote>\n<blockquote><p> <strong>a. Serran&iacute;a.<\/strong> <\/p><\/blockquote>\n<\/blockquote>\n<p><\/p>\n<p><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" width=\"335\" height=\"211\" border=\"1\" alt=\"\" src=\"\/images\/upload\/topogr2.gif\" \/><\/p>\n<p><\/p>\n<blockquote>\n<blockquote><p> <strong>b. Estribaci&oacute;n<\/strong><\/p>\n<p><em>Vista panor&aacute;mica de un terreno y su representaci&oacute;n en una carta topogr&aacute;fica <\/em> <\/p>\n<p><\/p><\/blockquote>\n<\/blockquote><\/div>\n<p><\/p>\n<p>Con la escala gr&aacute;fica, podemos medir directamente distancias del terreno sobre el propio mapa. Simplemente habr&aacute; que medir la distancia que se desea y luego transportarla sobre la escala gr&aacute;fica para obtener la distancia. En cambio la escala num&eacute;rica, aparece escrita con n&uacute;meros ar&aacute;bigos. Por ejemplo: 1:25.000 significa que, un metro en el papel equivale a 25.000 metros en el terreno. El desdoblamiento de una escala consiste en dividir el metro (1:&#8230;), en cent&eacute;simas y mil&eacute;simas partes simplificando. Supongamos una escala de 1: 100.000. Para desdoblarla debemos proceder de la siguiente manera:   <\/p>\n<p><\/p>\n<p> Medir 1 m. en el mapa equivale a 100.000 metros en el terreno. <\/p>\n<p>Medir 1 dm. en el mapa equivale a 10.000 metros en el terreno.<\/p>\n<p>Medir 1 cm. en el mapa equivale a 1000 metros en el terreno.<\/p>\n<p>Medir 1 mm. en el mapa equivale a 100 metros en el terreno.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p>La localizaci&oacute;n de dos puntos, la toma de mediciones entre ellos y el c&aacute;lculo de tiempo que demandar&iacute;a un recorrido es fundamental previo a cualquier excursi&oacute;n. Pero qu&eacute; pasar&iacute;a si en esa trayectoria existiera un cord&oacute;n monta&ntilde;oso. Esa irregularidad terrestre deber&aacute; ser interpretada y comprendida la configuraci&oacute;n de cada cerro, como as&iacute; su altura. Es decir, mediante estos s&iacute;mbolos convencionales Ud. podr&aacute; leer un mapa, sea este impreso en Jap&oacute;n, EE.UU. Alemania, Argentina o cualquier otro pa&iacute;s. Como se comprender&aacute; esto adquiere una importancia fundamental.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p>Si Ud. sabe leer, podr&aacute; disfrutar con la lectura de un buen libro. Lo mismo ocurre con los mapas; los signos cartogr&aacute;ficos a que hemos hecho referencia conforman un conjunto de informaci&oacute;n que, para quien pueda interpretarla son de inestimable utilidad. El aprendizaje para leer un mapa debe ser progresivo y con la ayuda de alguien que sepa. Al principio puede ser algo aburrido pero no dif&iacute;cil. &iexcl;Animo! Primero la teor&iacute;a y luego con la pr&aacute;ctica. Para ello compremos una carta topogr&aacute;fica de una zona ya conocida por nosotros, de forma tal que no nos podamos perder. Tracemos un itinerario en el papel. Luego poco a poco iremos avanzando, reconociendo y asociando las distintas caracter&iacute;sticas del terreno con las que leemos en el papel. Es importante hacerlo despacio, manejando la br&uacute;jula y la carta topogr&aacute;fica con cuidado para asimilar la ense&ntilde;anza. Esta pr&aacute;ctica, muy &uacute;til por cierto, nos permitir&aacute; leer de un &quot;vistazo&quot; cualquier mapa y recorrer terrenos desconocidos por nosotros sin cuidado de extraviarnos. Es verdaderamente fascinante salir de un apuro gracias al simple hecho de saber aprovechar la valiosa informaci&oacute;n que siempre nos brinda un mapa. No intente ninguna traves&iacute;a sin conocimientos de topograf&iacute;a y de orientaci&oacute;n. &iexcl;Recu&eacute;rdelo&#8230;! <\/p>\n<p><\/div>\n<p><!--nextpage--><\/p>\n<div align=\"justify\"><\/p>\n<p><strong>LA BR&Uacute;JULA<\/strong><\/p>\n<p>Un rumbo equivocado que nos aparta por algunas horas de la senda principal. La llegada de la noche, el fr&iacute;o y la angustia de no saber regresar, son algunas ense&ntilde;anzas que nos da una experiencia desafortunada. Esta situaci&oacute;n suele ser m&aacute;s frecuente de lo que se supone y ocurre todos los a&ntilde;os en distintas regiones. En este estudio nuestro personaje invitado es la br&uacute;jula, cuya vital importancia es demasiado obvia para quienes se alejan de zonas pobladas. Seg&uacute;n se cree la br&uacute;jula ya era conocida por los chinos unos mil a&ntilde;os atr&aacute;s de la era cristiana. Luego fueron los &aacute;rabes los que la usaron y ense&ntilde;aron ese descubrimiento a los occidentales durante las cruzadas. B&aacute;sicamente consiste en una diminuta barra met&aacute;lica imantada que invariablemente indica el norte. Las de mejor calidad poseen en su interior un limbo graduado en un disco numerado giratorio que aumenta de cero a los 360&deg; de la siguiente manera:  <\/p>\n<p><\/p>\n<p align=\"center\">N = 0&deg;, E = 90&deg;, S = 180&deg;, W = 270&deg;.<\/p>\n<p>El norte se denomina 360&deg; &oacute; 0 indistintamente.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p>La br&uacute;jula magn&eacute;tica o el comp&aacute;s n&aacute;utico son los instrumentos m&aacute;s sencillos y precisos para obtener rumbos y junto con la carta topogr&aacute;fica del lugar constituyen elementos b&aacute;sicos de orientaci&oacute;n. Son necesarios para la navegaci&oacute;n, obras civiles, etc. Orientarse con una br&uacute;jula es muy f&aacute;cil y hasta un ni&ntilde;o de corta edad lo puede hacer. Simplemente habr&aacute; que depositarla sobre una superficie plana no met&aacute;lica, esperar que se detenga la aguja o el disco graduado y luego leer el rumbo buscado. Es decir, nos indica solamente la direcci&oacute;n de marcha no la deriva que tengamos respecto al lugar donde debamos ir. Por ejemplo, con mi lancha navego directamente hacia el norte donde debo llegar a una isla, pero los vientos me desv&iacute;an al este. En este caso la br&uacute;jula me seguir&aacute; marcando el norte, aunque tenga que corregir el rumbo para llegar al lugar propuesto. Para ello necesariamente tendr&eacute; que disponer de puntos geogr&aacute;ficos identificables que me adviertan dicha deriva.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p>Con cierta sorpresa pude comprobar que algunos excursionistas que se aventuran por solitarios parajes no incluyen en su equipo la tan mentada br&uacute;jula. El error de pensar que se conoce bien el terreno, no pensar en una imprevista marcha nocturna o la simple negligencia, influye para que esas descuidadas personas olviden tan &uacute;til instrumento. Existieron casos de quienes debieron regresar de urgencia de noche o sobre terreno nevado que cubre referencias geogr&aacute;ficas. En estas circunstancias la orientaci&oacute;n es s&oacute;lo posible con una br&uacute;jula de buena calidad. Las br&uacute;julas manuales tipo militar con lente son muy pr&aacute;cticas. Con ellas podemos hacer navegaci&oacute;n terrestre, medir rumbos de d&iacute;a o de noche y hasta admiten un trato rudo.  <\/p>\n<p><\/p>\n<p>Tambi&eacute;n existen br&uacute;julas donde la aguja magn&eacute;tica est&aacute; suspendida en un l&iacute;quido especial que impide que &eacute;sta baile bruscamente cada vez que intentamos leer la graduaci&oacute;n. Son de usos com&uacute;n pero requieren un cuidado mayor. Los modelos descriptos son los indicados para nuestros fines de usos terrestre y nos pueden sacar de apuro tanto caminando como en una embarcaci&oacute;n no met&aacute;lica. Una br&uacute;jula militar con lente, se empu&ntilde;a de la siguiente manera: Abra la tapa superior hasta que &eacute;sta forme una l&iacute;nea recta con la base y se abra el ocular hasta su apertura m&aacute;xima. Luego introduzca el pulgar de su mano derecha en el anillo de bronce y con los otros dedos forme una base firme. Apoye todo el conjunto con la otra mano y junte los codos contra el cuerpo. Espere que el limbo graduado se detenga. Luego con la br&uacute;jula a la altura de la barbilla lea por intermedio de la lente el rumbo marcado. Cuando se desee medir un rumbo hacia un punto geogr&aacute;fico, apunte cuidadosamente el instrumento como se indicara. Finalmente mediante la l&iacute;nea de gu&iacute;a lea el acimut como el caso anterior.  <\/p>\n<p><\/p>\n<p><strong>ORIENTACI&Oacute;N <\/strong><\/p>\n<p>La base para orientarse en el terreno es la determinaci&oacute;n de los puntos cardinales. Aunque est&eacute; desorientado y molesto por ello, no camine sin rumbo definido; invariablemente terminar&aacute; extraviado, sediento, agotado y habr&aacute; empeorado su situaci&oacute;n. Una antigua pista para retomar el rumbo puede ser conocer que el sol sale por el este y se pone al oeste, indicando el norte al mediod&iacute;a. En Sudam&eacute;rica, de noche, con un poco de pr&aacute;ctica es muy f&aacute;cil orientarse por el m&eacute;todo de &quot;La Cruz del Sur&quot;. Corresponde a un grupo de estrellas que pueden verse perfectamente en toda &eacute;poca del a&ntilde;o y en especial a mediados de mayo. Est&aacute;n dispuestas en forma de cruz. Prolongando imaginariamente el eje mayor de &eacute;stas, tres veces hacia abajo, es posible obtener el rumbo sur.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p>Existen otros m&eacute;todos. Pero supongamos que Ud. es una persona precavida y sac&oacute; de su mochila la br&uacute;jula y la carta topogr&aacute;fica de la regi&oacute;n. Como primer medida, deposite ambas cosas sobre una superficie plana y haga coincidir el norte del lugar con el de la hoja impresa o sea donde se lee el t&iacute;tulo. Para ello ponga en paralelo el norte del mapa con el de la aguja magn&eacute;tica. Luego habr&aacute; que reconocer visualmente la zona y ubicar los accidentes naturales del &aacute;rea en la carta (monta&ntilde;as, r&iacute;os, etc.). Es decir, en base a ellos, se determinar&aacute; en la carta topogr&aacute;fica el lugar donde Ud. se encuentra. Luego determine el camino a seguir.  <\/p>\n<p><\/p>\n<p>Cuando maneje la br&uacute;jula, al&eacute;jela de cualquier masa met&aacute;lica o campo magn&eacute;tico que necesariamente alterar&aacute; cualquier medici&oacute;n. No es nada raro que alg&uacute;n &quot;despistado&quot; intente orientarse con una br&uacute;jula manual dentro de un autom&oacute;vil o al lado de un transmisor de radio. Aleje dicho instrumento de cualquier masa met&aacute;lica como armas, linternas, cuchillos, etc.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p><strong><\/p>\n<p>C&Aacute;LCULO DE DISTANCIA<\/strong><\/p>\n<p>En numerosas oportunidades durante las traves&iacute;as siempre habr&aacute; necesidad de saber la distancia que se encuentra un determinado punto de referencia que observamos. Como se supone que nadie de nuestro grupo lleva instrumento alguno de medici&oacute;n, lo mejor ser&aacute; recurrir al siguiente sistema: cada uno de los integrantes deber&aacute; individualmente apreciar la distancia que interpreta se encuentra el referido punto que se observa a la distancia. Luego Ud. sume todas esas cantidades y div&iacute;dalas por el n&uacute;mero de personas que participaron en el c&aacute;lculo. De esa manera se obtendr&aacute; un promedio muy aproximado de esa distancia. Se tendr&aacute; en cuenta que las condiciones atmosf&eacute;ricas inciden en los c&aacute;lculos de distancia. Tanto es as&iacute; que, un observador terrestre aprecia distancias diferentes seg&uacute;n determinadas circunstancias.<\/p>\n<table width=\"100%\" border=\"0\">    <\/p>\n<tbody>        <\/p>\n<tr>            <\/p>\n<td width=\"48%\" height=\"38\" bgcolor=\"#00ffff\">            <\/p>\n<div align=\"center\"><strong>Se aprecian distancias mayores a las reales<\/strong><\/div>\n<p>            <\/td>\n<p>            <\/p>\n<td width=\"52%\" height=\"38\" bgcolor=\"#00ffff\">            <\/p>\n<div align=\"center\"><strong>Se aprecian distancias<\/p>\n<p>            menores a las reales<\/strong><\/div>\n<p>            <\/td>\n<p>        <\/tr>\n<p>        <\/p>\n<tr>            <\/p>\n<td width=\"48%\" valign=\"top\" height=\"126\" bgcolor=\"#00ffff\">            <\/p>\n<ul>                <\/p>\n<li>Con el sol de frente <\/li>\n<p>                <\/p>\n<li> Con tiempo lluvioso <\/li>\n<p>                <\/p>\n<li> Nublado <\/li>\n<p>                <\/p>\n<li> En los crep&uacute;sculos <\/li>\n<p>                <\/p>\n<li> En superficies rectas (caminos, costas) <\/li>\n<p>                <\/p>\n<li> En cuestas ascendentes <\/li>\n<p>            <\/ul>\n<p>            <\/td>\n<p>            <\/p>\n<td width=\"52%\" valign=\"top\" height=\"126\" bgcolor=\"#00ffff\">            <\/p>\n<ul>                <\/p>\n<li>En los d&iacute;as claros y di&aacute;fanos <\/li>\n<p>                <\/p>\n<li> Con el sol detr&aacute;s <\/li>\n<p>                <\/p>\n<li> En planos lisos (playas, salinas, agua, nieve) <\/li>\n<p>                <\/p>\n<li> En cuestas descendentes <\/li>\n<p>            <\/ul>\n<p>            <\/td>\n<p>        <\/tr>\n<p>    <\/tbody>\n<p><\/table>\n<p><\/p>\n<p><\/p>\n<p><strong>NAVEGACI&Oacute;N TERRESTRE <\/strong><\/p>\n<p>El limbo graduado de una br&uacute;jula como se explic&oacute; es un disco cuya numeraci&oacute;n aumenta conforme a los grados. Para hacer una navegaci&oacute;n terrestre a pie, s&oacute;lo debemos disponer de una br&uacute;jula del tipo militar y un papel para anotar el azimut (grados que marca la br&uacute;jula) y los pasos que damos al caminar. No es imprescindible un mapa. Se registrar&aacute; el &quot;punto inicial&quot; (PI) y el &quot;punto terminal&quot; (PT). Para ello tendremos que apuntar en la direcci&oacute;n de nuestra marcha hacia un objeto algo lejano. Una vez detenido el limbo graduado, se podr&aacute; leer con s&oacute;lo mirar hacia abajo. Ejemplo: PI rumbo 40&deg;. Se caminar&aacute; hacia dicho punto contando los pasos. Al llegarse al mismo o al primer cambio obligado de direcci&oacute;n, mida como en el caso anterior el nuevo azimut, anote los grados y la cantidad de pasos. As&iacute; sucesivamente cada vez que haya un cambio de rumbo. Mejor a&uacute;n si anotamos el tiempo tardado.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p align=\"center\">\n<p><strong>Lectura de rumbos<\/strong><\/p>\n<table width=\"100%\" border=\"0\">    <\/p>\n<tbody>        <\/p>\n<tr>            <\/p>\n<td width=\"48%\"><img decoding=\"async\" width=\"173\" eight=\"168\" src=\"\/images\/upload\/topogr3.gif\" alt=\"\" \/><\/td>\n<p>            <\/p>\n<td width=\"52%\">            <\/p>\n<div align=\"right\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" width=\"193\" height=\"170\" src=\"\/images\/upload\/topogr4.gif\" alt=\"\" \/><\/div>\n<p>            <\/td>\n<p>        <\/tr>\n<p>    <\/tbody>\n<p><\/table>\n<p><\/p>\n<p><\/p>\n<p>Como se explic&oacute; no haga mediciones cerca de metales, l&iacute;neas de alta tensi&oacute;n, etc. El sistema de navegaci&oacute;n terrestre, es &uacute;til para se&ntilde;alar una senda que luego nos llevar&aacute; a un determinado lugar muy dif&iacute;cil de encontrar.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p>Como interesante motivo de ense&ntilde;anza, consiga una br&uacute;jula y una carta topogr&aacute;fica del lugar donde pasar&aacute; sus vacaciones. Despu&eacute;s ubique el punto donde se piensa llegar. Practique estas ense&ntilde;anzas. Desdoble la escala, mida distancias, calcule tiempos de marcha y compru&eacute;belos.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p>Esta ejercitaci&oacute;n le permitir&aacute; leer un mapa de un simple vistazo, adquiriendo conocimientos de orientaci&oacute;n muy &uacute;tiles. Desde hace algunos a&ntilde;os la orientaci&oacute;n por mapa es un deporte popular en Europa y en los EE.UU. donde se organizan con gran entusiasmo competencias al aire libre.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p><strong><\/p>\n<p>GLOBAL POSITIONING SYSTEM (GPS) <\/strong><\/p>\n<p>Constituye un excelente sistema para ubicar r&aacute;pidamente la longitud, latitud y la altimetr&iacute;a de quien posea este maravilloso instrumento y cuente con un transmisor para pedir auxilio. Pero es un error pensar que un GPS. Puede reemplazar al uso cotidiano de la cartograf&iacute;a como se explic&oacute; anteriormente. B&aacute;sicamente, una carta topogr&aacute;fica, una br&uacute;jula y un GPS. conforman un excelente equipo, pero con diferentes funciones.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p><strong>EL CUIDADO DE LA CARTOGRAF&Iacute;A<\/strong><\/p>\n<p>Personalmente respeto a todo aquel que al igual que un libro cuida el material cartogr&aacute;fico. En tal sentido debo recordar que basta solamente una breve salida para que el mapa que nos acompa&ntilde;a se deteriore r&aacute;pidamente. El viento, la lluvia y el trato en campamento estropean un plano a&uacute;n antes de finalizar nuestro viaje. Lo m&aacute;s indicado es introducirlo en una bolsa rectangular hecha por nosotros mismos de buen pl&aacute;stico transparente. Se deben coser los bordes a m&aacute;quina dejando un costado abierto para ir poniendo nuevos mapas. De esa manera podremos leer dos planos de ambos lados de la funda, marcar rumbos y otras escrituras hechas sobre el pl&aacute;stico a la vez que el papel estar&aacute; protegido de cualquier inclemencia.   <\/p>\n<p><\/p>\n<p><strong>UNOS CONSEJOS<\/strong><\/p>\n<p>Hago notar que, como no existe un manual de supervivencia aplicable para todo el planeta, es fundamental obtener bibliograf&iacute;a espec&iacute;fica de la zona elegida. A todos recomiendo la sana costumbre de informar a la autoridad jurisdiccional m&aacute;s cercana respecto a nuestras intenciones: ruta elegida, campamentos, etc. Adem&aacute;s de asesorarse sobre la factibilidad de sus proyectos, este simple tr&aacute;mite podr&aacute; evitar serios inconvenientes. Finalmente, si planea un viaje de aventuras, consiga una carta topogr&aacute;fica del lugar y una br&uacute;jula buena. De lo contrario busque un baqueano de la zona. No tiene otra alternativa.  <\/p>\n<p><\/p>\n<hr noshade=\"\" \/><a href=\"http:\/\/www.efdeportes.com\/\" target=\"_blank\">Lecturas: Educaci&oacute;n F&iacute;sica y Deportes<\/a>, Revista Digital, A&ntilde;o 2, No. 11,Buenos Aires, Octubre de 1998. Reproducida con permiso del autor. <\/div>\n<p><\/p>\n<div align=\"right\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" width=\"15\" height=\"14\" src=\"\/images\/upload\/puma.gif\" alt=\"\" \/><\/div>\n<p><!--nextpage--><!--nextpage--><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"<table width=\"100%\" cellspacing=\"2\" cellpadding=\"2\" border=\"0\" summary=\"\">\n<tbody>\n<tr>\n<td width=\"329\">\n<p align=\"justify\">Es lamentable la poca importancia que se le suele dar al legendario mapa y a su compa&ntilde;era la br&uacute;jula. En tal sentido pude comprobar que la mayor&iacute;a de las personas desconocen las m&aacute;s elementales normas para interpretar y leer un mapa que contiene valiosa informaci&oacute;n.            <\/p>\n<\/td>\n<td width=\"129\">\n<div align=\"center\"><img decoding=\"async\" loading=\"lazy\" width=\"110\" height=\"88\" src=\"http:\/\/montanismo.org\/images\/upload\/k_mapa.jpg\" alt=\"\" \/><\/div>\n<\/td>\n<\/tr>\n<\/tbody>\n<\/table>\n<p> <a href=\"https:\/\/montanismo.org\/2000\/orientacion_y_lectura_de_mapas\/\"><\/a><\/p>\n","protected":false},"author":1075,"featured_media":0,"comment_status":"open","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"jetpack_post_was_ever_published":false,"_jetpack_newsletter_access":""},"categories":[1010],"tags":[],"jetpack_featured_media_url":"","jetpack_shortlink":"https:\/\/wp.me\/p51GhY-2Zz","_links":{"self":[{"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/11505"}],"collection":[{"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1075"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=11505"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/11505\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=11505"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=11505"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/montanismo.org\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=11505"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}