follow me
Montañismo y Exploración
El Polo Sur, cien años después
12 diciembre 2011

El 14 de diciembre de 1911, un grupo noruego al mando de Roald Amundsen llegaron al Polo Sur. Ahora, cien años después, mucha gente está llegando al Polo para celebrar el primer centenario.







  • SumoMe

El 14 de diciembre de 1911, el grupo dirigido por el noruego Roald Amundsen, llegaba sin contratiempos al Polo Sur, el último lugar por ser explorado y con esto se adelantaba en aproximadamente un mes al inglés Robert Scott. Eso quiere decir que dentro de un par de días se celebrará el primer centenario de ese viaje y aunque la historia del grupo de Scott ha llamado mucho más la atención por lo dramático y el descenlace final, la verdad es que sólo hubo un ganador: Amundsen.

Muchos grupos se prepararon para llegar al Polo Sur en el mismo día de su conquista. A diferencia del Everest, en que sólo hay una ventana de buen tiempo y si no se usa, es difícil saber si se logrará, en el Polo Sur se puede avanzar todo el tiempo y por casi todos los medios. Varios grupos se pusieron el reto de llegar desde diferentes puntos del continente, aunque sólo un grupo noruego está siguiendo la ruta auténtica de Amunsen.

Pero no sólo son ellos. Varias expediciones están haciendo lo que está ahora de moda para alcanzar el Polo: avanzar el último grado de latitud hasta llegar a la base científica Amundsen-Scott, instalada justamente en el Polo. Es un grado de latitud, que significa 108 kilómetros, recorridos en trineos y a pie. Algunas de estas expediciones comerciales son dirigidas por excelentes exploradores polares como Borge Ousland, que han encontrado en estas expediciones una forma de vivir en el lugar donde les gusta estar.

Este año, el Polo Sur está siendo el hogar temporal de todos los turistas que llegan por aire o en una de estas expediciones: quieren estar ahí el 14 de diciembre, prácticamente a la misma hora en que Amundsen arribó. Incluso el Primer Ministro de Noruega, Jens Stoltenberg, llegó el día de hoy a la base Amundsen-Scott para quedarse tres días, algo sin precedentes porque aunque varias personalidades han llegado al Polo, ninguno se había quedado a pernoctar… si es que se le puede llamar así a estar más de 24 horas en un lugar donde el solo no se pone.

Aquellos que comenzaron a cientos de kilómetros del Polo para hacer un auténtico esfuerzo, están lejos y es posible que no lleguen para el 14. De hecho, el noruego Steffen Dahl, quien viajaba en solitario y establecía récords de velocidad, tuvo que abandonar por una infección que no bajó pese a los antibióticos. Fue recogido muy cerca del polo por una avioneta, luego caminó los últimos 500 metros hasta al Polo y finalmente fue evacuado para que le hicieran estudios. Pero antes dejó una carta para el Primer Ministro de su país, quien ya la debe haber leído.

El Polo parece ser ahora un centro de atracción de turismo deportivo. A diferencia del Polo Norte, que es un océano, el Polo Sur es un continente, con características de montaña. Aunque es más caro ir hasta, ciertamente no tiene los peligros del PN: mares que se abren, osos polares, lobos. El PS es más bien un terreno estéril donde es posible todo.

Pese a ser el vencedor de la que quizá fue la primera auténtica carrera en la exploración, Amundsen ha quedado un poco a la sombra de esa historia por un enorme aparato de pubicidad. ¿Qué estará pensando Inglaterra, que durante cien años ha explotado la muerte “heroica” del grupo de Scott? ¿Quién ha leído el libro de Amundsen o sus detalles? A casi cien años de haberse escrito, Polo Sur es un libro que puede conseguirse de forma gratuita en Internet. Lo puedes buscar en idioma inglés aquí en diferentes formatos.

La base Amundsen-Scott fue contruida por los Estados Unidos en 1956 para servir de apoyo al Año Geofísico Internacional de 1957. Actualmente se encuentra a 2,835 metros sobre el nivel del mar y aproximadamente a 100 metros del verdadero Polo Geográfico porque el glaciar sobre el que se encuentra viaja a una velocidad de 10 metros por año. La base original fue construida por 18 marines que se convirtieron en los primeros en invernar en el Polo Sur. La base fue construida parcialmente debajo del hielo para protegerla de las peores condiciones ambientales.

El primero en alcanzar esa base fue Edmund Hillary, el 3 de enero de 1958, y días más tarde Vivian Fuchs, jefe de la expedición. En 1975 la base fue reconstruida a lo que es hoy, una cúpula de 50 metros de diámetro y 16 de alto. En el 2003 se hizo un anexo: la base elevada, que se inauguró el 12 de enero del 2008. Durante el verano, la base puede albergar a 200 personas pero la mayoría se retira en febrero y sólo quedan unas decenas para pasar el invierno y ser de nuevo “invadidos” a fines de octubre. La base no admite turistas, quienes deben estar a una distancia establecida de las instalaciones.



 



Suscríbete al Boletín

Google + Facebook Twitter RSS

 

Montañismo y Exploración © 1998-2024. Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con SIPER
Diseño por DaSoluciones.com©