El mes de abril es el de la “caza” de las galaxias, porque se pueden ver muchas de ellas. Centrados en la constelacion de Cáncer, la Agrupación Astronómica de Huesca traza un panorama estelar que no debería perderse.
En el mes de abril comienza la temporada de la caza de galaxias. En la constelación de Leo, situada en el cenit, podremos encontrar la bonita pareja de galaxias M81 y M82, además de M101, M108 y NGC 2841. Hacia el sureste, en la constelación de Coma tenemos la impresionante visión de la galaxia del Ojo Negro, denominada también como la galaxia de la Bella Durmiente. Y al lado, en Virgo, disfrutaremos de más de una decena de ellas, entre las que se encuentra la majestuosa Galaxia del Sombrero.
Para este mes hemos seleccionado la constelación de Cáncer. Tiene una extensión pequeña con estrellas poco brillantes. La diosa Hera dibujó en el cielo la figura del cangrejo después de que Heracles le diera muerte. Dentro de esta constelación encontramos uno de los cúmulos abierto más bellos, denominado El Pesebre (M44). Este cúmulo se observa mejor con telescopios pequeños o prismáticos, ya que su gran tamaño (más de tres veces el tamaño aparente de la luna llena) hace que sea demasiado grande para entrar en el campo visual de telescopios con gran apertura.
Una de sus estrellas, Zeta Cancri, es un sistema múltiple, con un pequeño telescopio se observan dos componentes, pero al utilizar un telescopio mayor (a partir de 150 mm); la más brillante aparece acompañada por otra estrella, que realiza una órbita aproximadamente cada 60 años.Las Líridas son una lluvia de meteoros que se puede observar en la tercera semana del mes, y el máximo se espera para el día 22 del mes. Aunque es una lluvia muy pobre, sus meteoros son muy brillantes y a menudo dejan estelas espectaculares.