Cruzar de un edificio a otro no es algo nuevo, pero hacerlo de las Torres Gemelas de Nueva York cuando aún estaban siendo construidas, sí que lo fue. El 7 de agosto de 1974, Philippe Petit cruzó por encima de cientos de metros de vacío. Este es el documental de esa historia.
Para mí es tan simple: la vida debe ser vivida al límite. Se debe ejercer la rebelión, rehusarse a seguir las reglas como son, rechazar el propio éxito, rechazar repetirse uno mismo. Ver cada día, cada año, cada idea como un verdadero desafío. Y así vivirán sus vidas en la cuerda floja.
Philippe Petit
Mantenerse en equilibrio es vital para cualquiera de nosotros pero pocas personas lo llevan a un grado de perfección. Los escaladores que caminan sobre una cinta tubular entre una roca y otra son un ejemplo, pero el caso más conocido es el de Philippe Petit, un equilibrista, mago, mimo y monociclista quien un dia en el cunsultorio de su dentista vio una fotografía de las Torres Gemelas de Nueva York y soñó con cruzar de lado a lado.
Las Torres Gemelas estaban aún en construcción. “Una vez erigidas serían las más altas del mundo”. Arrancó la página de la revista y salió del consultorio. “Iba a tener dolor de muelas durante una semana pero ¿qué es el dolor comparado con haber encontrado tu sueño? Normalmente, cuando tienes un sueño, el objeto de tu deseo es tangible. Por quimérico que fuere, está allí, burlándose de ti, enfrentándote, pero el objeto de mi deseo todavía no existía”.
Cruzar de una a otra de las Torres Gemelas de Nueva York implicaba un alto riesgo y, por supuesto, estar en la ilegalidad. ¿Cómo tender un cable de más de 60 metros, fijarlo perfectamente y sin que nadie se dé cuenta de ello sino hasta el momento en que todos lo vieran desde abajo?
Lo que Man on Wire nos ofrece no es sólo el cruce, sino la historia de cómo se realizó. Petit, apasionado equilibrista, realizó cruces importantes “pequeños”, desde el cruce de las torres de Notre Dame (1973) y el puente del puerto de Sydney, Australia. También ahí fue ilegal y terminó arrestado.
Cruzando el puente de Sydney
El 7 de agosto de 1974, Philippe Petit, a los 25 años de edad, se convirtió en el único hombre en cruzar entre ambas torres, pues tras él, la seguridad fue reforzada. Quizá sea el hombre que, como equilibrista, más alto haya estado del piso y no sólo por una sola vuelta, sino por varias: “Más tarde me dijeron mis amigos: estuviste 45 minutos ahí, cruzaste ocho veces.”
Philippe Petit listo para cruzar las Torres Gemelas.
“Cuando se acercó al edificio le pedimos que bajara del cable y en su lugar, dio la vuelta y regresó al centro. Todos estaban fascinados observándolo. Cuando comprendimos que no pensaba detenerse porque parecía estar disfrutándolo demasiado, le dijimos a su cómplice que si no bajaba traeríamos a un helicóptero para que lo quitara del alambre. No podíamos decir que caminaba. Aproximadamente en la mitad del camino entre las dos torres, al vernos comenzó a sonreír y a reírse… Me di cuenta que estaba viendo algo que nadie más vería nunca. Supe que era una vez en la vida.”, comenta un oficial en el documental.
A pesar de ser un documental, el desarrollo se siente muy ligero y con un fuerte toque de suspenso, tanto por el saber que tendría cientos de metros debajo de él en una de las ciudades más importantes del mundo como por las condiciones del tiempo: podría haber fuerte viento, nubes que lo cubrieran, quizá lluvia. Muy bien logrado y con representaciones excelentes, parece estarse viendo al Philippe de ese entonces.
Philippe Petit en los primeros pasos.
Ficha técnica de Man on Wire:
Dirección y guión: James Marsh.
Intervenciones: Philippe Petit, Jean-Louis Blondeau, Annie Allix, Jim Moore, Mark Lewis, Jean-François
Heckel, Barry Greenhouse, David Foreman, Alan Welner.