Este año el Annapurna parece estarle ganando al Everest en cuanto a cobertura de medios: allá, dos mujeres se están disputando un espacio en la historia del montañismo mundial y aunque las expediciones de los demás pudieran ser más importantes desde el punto de vista técnico e incluso histórico, parece ser más importante que una mujer complete los 14 ochomiles.
El Annapurna entre nubes.Fotos: cortesía de edurnepasaban.netClick para agrandarlas.
Oh Eun Sun sólo debe escalar esta montaña para tener en su haber los 14. Edurne Pasaban debe escalar esta y además el Sisha Pangma. Pese a lo evidente, Edurne y su equipo se han propuesto adelantarse a Miss Oh y así poder tener una pequeña oportunidad de llegar a ser la primera mujer. Miss Oh se lo ha tomado con calma.
Lo cierto es que tanto los comunicados como las notas de los medios parecen ser una combinación de una táctica guerrera para ganar y métodos diplomáticos finos, en donde las culturas occidental y oriental tienen que entenderse, aunque tomen té juntas.
Como sea, el Annapurna es hoy la hoguera de las vanidades, pues también está Joao García, quien sería el primer portugués en completar los 14, Kinga Baranowska, para quien sería el séptimo, y Piotr Pustelnik, en su sexto intento a la montaña. Hay que recordar este año se celebra también el aniversario 60 del primer ascenso al Annapurna, el primer ochomil jamás hollado por el hombre.
En las pendientes del Annapurna.
Pero a pesar de la cantidad de expediciones en el campamento base y de altura de la montaña, sólo se oye y lee sobre Edurne y Oh… y sus equipos, claro. Edurne se había adelantado y ya había colocado su campamento I cuando los surcoreanos que componen el equipo de Oh Eun Sun apenas llegaban al Campamento Base. De hecho Edurne hizo un intento de llegar a la cima tratando de avanzar un campamento por día y, de tener buen tiempo, llegarían el pasado lunes 12 a la cima.
Pero la realidad los hizo declarar otra cosa: “Es imposible. El viento es demasiado fuerte”, decía Edurne, cuando regresaban el pasado sábado al campamento base. Habían esperado una ventana de buen tiempo de cinco días y no fueron más allá del campamento dos. Pero llegó un nuevo pronóstico del tiempo y comenzaron de nuevo los preparativos para la cumbre:
Pendientes del pronóstico meteorológico.
“Día de nervios y de preparativos: otra vez, pensando en la cumbre. Las previsiones meteorológicas de momento se cumplen, y nosotros vamos a ser fieles a nuestro meteorólogo Víctor Baia, que nos dice que los días 16 y 17 van a ser de viento débil, y que por tanto pueden ser de cumbre. Mañana salimos hacia el C2; el jueves subiremos al C3, y el viernes al C4. Entonces, esperemos que esos 20 km/h que Vitor pronostica para el sábado se cumplan y podamos pisar la cima del Annapurna.”
Pero en lo que esperan o no, los equipos surcoreano y español se pusieron a jugar vóley ball. La antigua manera de disminuir las tensiones entre las personas. “Espero que todo salga bien, que estos días las noticias sean buenas, y que podamos celebrar todos la cumbre del Annapurna”, terminaba Edurne.
"Día de nervios y de preparativos: otra vez, pensando en la cumbre".
Por su parte, Kinga Baranowska no le da opciones: “Edurne Pasaban tiene intención de atacar la montaña. Tiene un pronóstico del tiempo que dice que el 17 los vientos serán más débiles en las proximidades de la cumbre y quiere aprovechar la oportunidad. No sabemos si dormirán en el campamento III a 6,400 metros… incluso si atacan, toco madera, no tendrá éxito… Por la mañana fue a despedirse y le deseé suerte.”
El equipo de Edurne lo incluye a Asier Izaguirre, Alex Chicón, Nacho Orviz y cuatro sherpas.
Por otro lado, también en el Annapurna pero del otro lado, Park Young-Seok, quien abriera una nueva ruta en la cara noroeste del Everest el año pasado, tuvo que retirarse de la cara sur pues le llegó una mala noticia: su madre había fallecido. Al parecer, regresará de nuevo a la montaña.
Contendientes de una sola batalla ante los medios: Miss Oh y Edurbe tomando el té. Debajo, un juego de voleyball entre los equipos surcoreano y español.
El Annapurna es la décima montaña más alta del mundo (8,091 metros) y fue el primer ochomil en ser escalado el 3 de junio de 1950 por Maurice Herzog y Louis Lachenal. El segundo ascenso se realizó hasta 1970. Ese mismo año se realizó el tercer ascenso, pero el primero por la pared sur, por Dougal Haston y Don Whillans, miembros de una expedición dirigida por Chris Bonington. En el otoño de 1999 habían ido 120 expediciones al Annapurna. De ellas, 106 escaladores habían llegado a la cima y 54 no regresaron de ella, por lo que se le considera la montaña más peligrosa de los ochomiles.
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