Regreso y clausura

El viernes fue un día perdido. Aunque íbamos a un par de cañones antes del regreso a Durango, a la salida del Pueblo las camionetas tuvieron desperfectos y al final ya no había tiempo, así que convivimos más con la gente y a hacer entrevistas en video. Y luego, de regreso a Durango.

Por la noche, algunos bañados y cambiados, se hizo la ceremonia de clausura y ahí conocimos al resto de los integrantes de la expedición, en particular a la gente de Estados Unidos que estaban a unas horas de donde habíamos estado. Después de palabras por la directora de turismo de Durango, se mostraron videos y fotos de los cañones explorados para terminar con una entrega de constancias.

El resultado

La meta de este encuentro era conocer el potencial ecoturístico y deportivo de los cañones explorados. La mayoría pueden ser operados turísticamente. El cañón de Arroyo Grande fue la gran sorpresa por su gran nivel técnico y un enorme atractivo deportivo. Según Javier “Si este cañón estuviera en España, habría fila para entrar”.

En cifras ofrecidas por Jesús Montesa fuimos 23 exploradores de Alemania, Austria, Brasil, España, Estados Unidos y México. Entre organización, apoyo, equipos de rescate y exploradores fuimos alrededor de 50 personas implicadas y que en los seis días que duró el encuentro se pudieron explorar un total de 23 cañones. Toda la gente quedó muy satisfecha de los cañones explorados, daban promesas de volver y de recomendar este maravilloso lugar.