Sierra Norte de Oaxaca: entre la historia y las leyendas
10 agosto 2008
Una travesía por la sierra norte del estado de Oaxaca implica más que un recorrido medido en kilómetros. El aprendizaje ahí es continuo y si se mantiene uno abierto a todas las posibilidades, se puede encontrar algo más valioso que un récord deportivo.
|
|
|
Los toritos: la fiesta en su apogeo
Fiesta de Santiago
La fiesta comienza con la calenda, un recorrido de las bandas por todo el pueblo para invitar a todos a la fiesta del santo patrono. Nadie puede decir que no sabía de la fiesta una vez que echa a andar la calenda. Las bandas tocan mientras la procesión camina y de vez en cuando se detienen para que bailen quienes quieran. Dura horas y lo asombroso es que las bandas siguen tocando, sin importar si es de subida o de bajada.
Al otro día, la fiesta continúa en la víspera, y al otro con el día principal. El baile de los negritos, las bandas, el torneo de baloncesto, las comidas en casas de los mayordomos, las pláticas con la gente, los amigos que surgen, las historias del pueblo, las campanas, los olores a humo, tortillas y carne, el jaripeo (que no era más que el maltrato a los animales de yunta en donde los hombres jóvenes se montaban y pretendían lucirse ante los demás… sobre animales mansos. El único toro bravo, ni siquiera fue montado).
Bandas de la sierra de Oaxaca
La fiesta transcurre día a día y aunque se celebran misas y todo está dedicado al santo patrono, la fiesta se hace más fuera de la iglesia. El pueblo se vuelve a llenar de la gente que nació ahí pero que ha emigrado en busca de trabajo o de estudios más avanzados.
Para nosotros había terminado nuestra estancia en la sierra. Un recorrido pequeño pero sustancioso, con bosques, selvas, lluvias intensas y calores, aprendimos de la gente y de sus pueblos, algo más que sólo acumular kilómetros recorridos.
Compartimos el camino
"¿Van a la fiesta de Lalopa?"
Baile en Santiago Lalopa, durante la víspera
Páginas: 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14