El 21 de diciembre, Artur Testov intentó escalar solo la Wickersham Wall, en la cara norte del Monte McKinley, pared que nunca ha sido escalada en invierno. También conocida como la “Pared de la Oscuridad”, es uno de las grandes pendientes de hielo en el mundo con un desnivel de casi 4,500 metros. En el clímax del invierno, no recibe luz de sol directa, las temperaturas están casi constantemente entre menos 50 y menos 60 grados Centígrados. Las muy comunes ventiscas hacen que el factor de viento-enfriamiento hasta menos 75 grados Centígrados.
La expedición fue planeada para durar hasta dos meses. Arturvoló hasta Kantishna y comenzó una caminata de 40 kilómetros con raquetas para nieve a través de la tundra y hacia arriba del Glaciar Peter para alcanzar la base de la pared. Artur logró cruzar el glaciar y estaba cerca del campamento base cuando decidió darse la vuelta. Las temperaturas promedio eran de –34 y alcanzaban hasta –50 grados Centígrados.
“Todo era gris, en todas las tonalidades de gris, y parecía plano, sin proundidad, era como ir entre leche”, dijo. Mientras más cerca estaba de la pared, la nieve se volvía más profunda. Artur se hundía casi un metro en la nieve a pesar de sus raquetas para nieve y así tenía que abrir una zanja y luego regresar por sus dos trineos y una mochila, con un peso de 90 kilogramos.
La nieve era como polvo y no dejó cavar cuevas en ella para estar protegido de los elementos así que Artur pasó un mes completo en su tienda. Usó botas Sorel en su viaje de invierno y no sufrió de ningún grado de congelación.
Luego de decidir una nueva ruta para su próximo intento, Artur regresó y voló de Kantishna el 19 de enero.
Artur regresará el próximo invierno. Tratará de nuevo con dos compañeros con quienes ha escalado previamente. Llevará una bandera estadounidense, mientras uno de sus compañeros tendrá una bandera rusa o el otro una bandera kazaja. Volarán al glaciar Kahiltna, escalarán el Kahiltna Pass y bajarán hacia el otro lado de la montaña al campamento base de la Wickersham Wall. Esta ruta es más técnica pero más rápida y menos demandante físicamente, así que los escaladores no estarán demasiado “destruidos” al momento de alcanzar el Campamento Base y comenzar la auténtica parte técnica de la escalada.
Los tres harán un ascenso preliminar por esa vía el próximo junio mientras exploran la zona y toman tantas fotografías como sea posible para estudiarlas en casa. Es posible que caven una cueva de nieve en la pared a 2,100 metros para tenerla lista para cuando comiencen a escalar en invierno.
Artur está buscando actualmente patrocinadores para su próxima escalada y piensa que sus probabilidades de éxito son elevadas con esta nueva ruta, por lo que espera que empresas y personas se interesen por su proyecto y lo patrocinen, pues se trata de “uno de los últimos e inconquistados lugares en el mundo”.