Han estado ahí por muchas semanas, alternándose el trabajo de escalar en la pared con buen o mal tiempo. Poco a poco, fueron dejando atrás los problemas técnicos y hace poco los superaban todos: el bastión había terminado y sólo faltaba hacer un intento a la cumbre por un terreno más fácil que el que hasta entonces habían tenido frente a ellos.
El tiempo no les ayudaba pero aún así decidieron quedarse en el K2, en su cara oeste, cuando todas las expediciones se retiraban del Karakorum y sólo unos cuantos quedaban ahí, con la remota esperanza de una ventana de buen tiempo. Y esa ventana llegó el 8 de agosto. Los miembros de las expediciones que habían quedado en la montaña se prepararon para hacer su último intento a la cumbre.
Y el intento comenzó el día de hoy, cuando Alexey Bolotov, Gennady Kirievsky y Nickolay Totmjanin salían de su campamento 5, donde habían estado esperando el buen tiempo por cuatro días. El comunicado del jefe de la expedición, Victor Kozlov, aclara mucho:
“Hoy muy temprano salieron del C5, escalarán por 12 cuerdas que habían fijado previamente y entonces (antes del mediodía) comenzarán a escalar libres en dirección a la cumbre. Tienen una pequeña tienda “solo+”, gas, estufa, 2 bolsas de dormir y el mínimo de equipo para una, quizá dos noches. Las comunicaciones entre el trío y el CB son cada dos horas y el contacto con ellos es posible sólo por medio del C1, donde están Gleb Sokolov, Vitaly Gorelik and Eugeny Vinogradsky. Hay comunicación regular entre el C5 y el Campamento Base y los muchachos dicen que se sienten bien.”
La cumbre está muy cerca para ellos mientras otros tres rusos están en el campamento 4 y un grupo de apoyo está listo para subir desde el campamento 3, aunque no tienen oxígeno artificial.
Por su parte, Gerlinde Kaltenbrunner había ascendido por la Ruta Cesen hasta el Hombro pero el tiempo la había echado. Los eslovacos y polacos habían abandonado la apertura de una nueva ruta y también subían por la Cesen en un intento por alcanzar la cima en estilo ligero y rápido.
Se esperan noticias de los rusos en la cara oeste y quizá sean de quienes se esperan más noticias pues alcanzar la cumbre significaría una nueva ruta en una cara virgen hasta ahora del K2, además de que ya se corría el rumor de que los rusos no bajarían de la montaña hasta llegar a la cima.