SOBERANIA ESPELEOLÓGICA: ¿COMPETIR O COMPARTIR HALLAZGOS BAJO TIERRA?
6 abril 2006
La exploración subterránea suele divulgarse desde la óptica de los países espeleológicamente mas desarrollados. Los espeleólogos foráneos deberían asumir principios y procedimientos respetuosos ante los grupos nacionales. La clave está en promover solidariamente la igualdad entre colegas.
|
La experiencia demuestra que una institución autóctona es la que suele velar, más responsablemente, por que las labores se realicen con criterios conservacionistas y se respeten las normas vigentes. A ello se agrega que en muchos paÃses latinoamericanos hay opciones para interactuar con una espeleologÃa nacional madura y con décadas de experiencia, que está a la par de la calidad cientÃfica alcanzada en otros continentes.
Después de realizados los trabajos espeleológicos transfronterizos, las comunicaciones de los grupos foráneos suelen autoevaluar su propia gestión como positiva, ya que lo que queda impreso generalmente se emite desde esos paÃses de mayor desarrollo espeleológico. Sin embargo, en la Federación Espeleológica de América Latina y el Caribe (FEALC) cada vez se están recibiendo más quejas respecto a diversas iniciativas foráneas; ello involucra a Perú, Bermuda, Argentina, Brasil, Venezuela, etc.; paÃses explorados por terceros una o varias veces de manera unilateral. En este proceder generalmente se involucran visitantes de Europa, y a veces de Norteamérica. No se requiere detallar los casos particulares, ya que las mismas publicaciones de los grupos más conocidos del mundo a veces evidencian algunos de sus procedimientos arbitrarios.
Tras la aparición de las comunicaciones por medio de Internet, los espeleólogos del hemisferio sur han estado denunciando repetidamente una serie de experiencias objetables y han estado compartiendo opiniones similares respecto al tema de las operaciones unilaterales. A través de numerosos contactos, hoy se percibe un consenso para enfrentar la conducta impuesta por una parte de los espeleólogos transcontinentales.
No es que para actuar a su antojo exista un plan preestablecido entre los diversos grupos viajeros, pero ello ocurre de hecho y las coincidencias entre unos u otros casos suelen ser notables en cuanto a los pretextos, argumentaciones y apreciaciones subjetivas que esgrimen los visitantes según sus conveniencias. Sus palabras bellamente redactadas se limitan a citar documentos como la Carta de Casola y el Código de Ã?tica de la Unión Internacional de EspeleologÃa (UIS) para la exploración en paÃses extranjeros, donde proponen al mundo actuar de forma respetuosa.
Páginas: 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11