SOBERANIA ESPELEOLÓGICA: ¿COMPETIR O COMPARTIR HALLAZGOS BAJO TIERRA?
6 abril 2006
La exploración subterránea suele divulgarse desde la óptica de los países espeleológicamente mas desarrollados. Los espeleólogos foráneos deberían asumir principios y procedimientos respetuosos ante los grupos nacionales. La clave está en promover solidariamente la igualdad entre colegas.
|
Cuando la representación nacional es débil las decisiones tomadas en el campo, abierta o encubiertamente, aparentan ser asumidas entre ambos grupos, pero llegan a ser fácilmente inducidas por los extranjeros. Ello puede tener repercusiones diversas, como por ejemplo, enturbiar las relaciones con las autoridades gubernamentales o indÃgenas, pudiendo desembocar en que se cierre el acceso de un karst para cualquier otro espeleólogo que intente visitarlo posteriormente.
Mientras tanto, el viajero ni siquiera se entera de las trabas que deja a su paso.
La representación cientÃfica de un paÃs tampoco debe delegarse a los promotores del turismo o a los adeptos de adrenalina que gustan de las exploraciones Â?extremasÂ?, ya que unos y otros terminarán avalando complacientemente cualquier proceder de la expedición extranjera con tal de ser incluidos en una próxima oportunidad.
En general quienes no demuestran mÃstica en la exploración cotidiana, quienes no mezclan el sudor con el barro en arrastraderos poco promisorios, son los que tendrán escaso compromiso cuando asistan a las más atractivas actividades y ello es más cierto en la medida en que se disponga de recursos, ya sea de transporte en helicóptero, o sea de cobertura de video documental.
En general, cuando se involucran canales de televisión u otros reconocidos patrocinantes [patrocinadores], los oportunistas estarán más atentos a aprobar cualquier proceder a fin de recibir fama, cuerdas, equipos de campamento o una paga. Ello recuerda el trueque del oro por espejitos. Aquello de representar conservacionistamente los intereses patrimoniales pasarÃa a segundo plano o serÃa francamente olvidado.
La necesaria participación nativa debe ser delegada a un ente cientÃfico nacional, ya que las actividades, que a veces se promocionan como eventos deportivos para evadir la permisologÃa, terminan divulgándose en medios cientÃficos y como tal deberÃan ser gerenciadas desde el principio.
Páginas: 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11