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Montañismo y Exploración
Entrenamiento en escalada deportiva
21 mayo 2005


Después de la aparición de Planificación del entrenamiento en escalada deportiva, ¿qué más podía añadir el autor de esta propuesta que cambió la escalada? Mucho y ahora se ha apoyado en las preguntas que cientos de personas le hicieron por correo electrónico para responder y ampliar su visión de la escalada y su entrenamiento.







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David Macià. Entrenamiento en escalada deportiva. Ediciones Desnivel, Madrid, 2004. 286 páginas. ISBN: 84-96192-54-7

Hoy en día a nadie le extraña el hecho de contar movimientos en sus entrenamientos, de controlar el tiempo de recuperación o de descansar un mes al año.



De entre los muchos manuales y artículos sobre entrenamiento para los escaladores, Planificación del entrenamiento en escalada deportiva pronto fue el libro de cabecera de numerosos escaladores que hasta ese momento habían escalado como les enseñaban los demás, con todas sus fallas y sus aciertos. El libro de David Macià marcó un parteaguas en la escalada porque ya no se trataba de entrenar para escalar sino de algo más complejo: planificar ese entrenamiento.

Muchos no entendieron la propuesta de David pero de todos modos la usaron, sobre todo su método de medir el entrenamiento por medio de movimientos:

  1. “Un movimiento es aquel que se realiza con las manos, con el fin de coger una presa desde otra forma alternativa o simultánea con dos manos para traccionar o suspenderse de ella.
  2. "Si cogemos una presa desde otra con la misma mano (no alternativa) se considera que hemos hecho un rebote desde una presa intermedia.
  3. "El rebote puede considerarse un movimiento si traccionamos mucho de la presa intermedia.
  4. "Los lanzamientos a dos manos se contarán como un solo movimiento
  5. "Los movimientos de pies no se cuentan” (p. 52)

Era preciso medir el entrenamiento si se quería progresar y ésta fue la propuesta de David, misma que ahora es usada en muchas partes del mundo. Planificar era algo más complejo porque implicaba pensar no en una sesión ni en una semana sino en algo más básico: ¿cuáles son mis objetivos al escalar? De esto dependía la planificación.

De cualquier manera, se podía ver a los escaladores quebrándose la cabeza para entender los términos, los conceptos y la propuesta en genera, además de hacer su propia planificación. ¿Qué pasó después de la aparición de su libro? David comenzó a proporcionar asesorías a través de una “clínica virtual” en desnivel.com y pronto esta sección se vio saturada de correos de escaladores que querían aclarar puntos específicos. El presente libro es el resumen de las consultas más importantes.

¿Qué dice de nuevo? Nada. Entonces, ¿por qué es importante? Porque David tiene tiempo y espacio para ampliar sus propias ideas sobre el entrenamiento y sobre la escalada en general a través de respuestas a preguntas muy específicas. Temas como la ética y filosofía de la escalada están metidos de lleno y abiertamente en las respuestas:

“…la tendencia para encadenar las vías debe ser la utilización exclusiva de los seguros que ha dispuesto el equipador de la misma tanto en número como en ubicación… Es decir, si yo escalo esa vía debo adaptarme a esos parámetros, que son, al fin y al cabo, una propuesta con la que puedo o no estar de acuerdo pero que, en todo caso, no tengo derecho a modifica… una vía no es sólo una serie de movimientos que se ejecutan sobre la roca sino un estilo de entender la escalada para ascenderla.” (p. 55-56)

Un tema espinoso pero no por ello menos importante, refleja su actitud ética hacia la escalada. Respondiendo una pregunta sobre el dopaje, deja claro que “…me parece escandaloso que, habiéndose dado casos de dopaje en competiciones de escalada deportiva, el tema se haya silenciado. Es como decir, «no te preocupes, si te dopas, te pillan en competición y te sancionan, siempre puedes dedicarte a la roca.»” (p. 63)

David Macià. Foto: Carlos RangelHablar de una serie de cientos de preguntas donde las respuestas son diferentes pero siempre del mismo tema parece algo inútil, pero sí se puede hablar de que el primer libro de David y éste son complementos uno del otro y un escalador no leerá este segundo libro por completo sino que irá a la pregunta que más se acerque a aquella que viene elaborando con su propio entrenamiento. Ésa es la importancia de este tomo: ser del tamaño adecuado a prácticamente todas las inquietudes.

Habrá que advertir al lector que algunas preguntas no tienen toda la información original (la pregunta formulada no está sino sólo su encabezado) y pese a que la respuesta proporciona la información que uno necesita, podría causar confusión a algunos, sobre todo a los escrupulosos que buscan los detalles para saber si es precisamente lo que ellos mismos tienen en mente.



 



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