¿QUE HACER?Personalmente siempre tengo mucho cuidado con la higiene de mis comidas y muy rara vez bebo agua sin tratar (por lo menos eso creo). Digamos que algo no me funcionó, todo es posible, a lo mejor fueron heces arrrastradas por el viento que aterrizaron en mi taza.
Aún así, la primera recomendación es tener cuidado con lo que se come y con lo que se bebe. Si se sabe de algún endemismo, vacunarse o llevar a cabo un tratamiento preventivo.
En diarreas agudas lo que generalmente se recomienda, aunque a veces no sea factible, es reposo, dieta hídrica, probablemente suspender el alimento durante las primeras 24 horas y si es necesario se pueden tomar antiespasmódicos y absorbentes intestinales (p. ej. tortillas quemadas: carbón).
Lo fundamental es corregir el desequilibrio hídrico y de minerales. A medida que se normalicen las evacuaciones añadir alimentos semisólidos y de bajo contenido de fibra (galletas saladas, tostadas, huevo, arroz o pollo).
Durante la recuperación alimentos cocidos, evitar
- productos lácteos
- cafeína
- bebidas alcohólicas
- nicotina
- salvado
- cereales de grano entero
- verduras y frutas crudas
- dulces
- encurtidos
- conservas
- alimentos grasosos o muy condimentados, etc.
Las cantidades de suero oral para reemplazar las pérdidas continuas deben ser iguales al volumen de heces expulsado.
Los agentes antiperistálticos (p.ej. loperamida, Imodium) pueden agravar o prolongar la diarrea causada por organismos que penetran la mucosa intestinal (Escherichia coli, Salmonella, Shigella) y enterocolitis pseudomembranosa causada por antibióticos de amplio espectro.
En general, los antibióticos deben reservarse para los casos graves en que prevalece la forma infecciosa y no olvidar que frente a la diarrea viral son inútiles. No en todos los casos de diarrea de origen bacteriano se requieren antibióticos y de requerirse deben ser los específicos.
En algunas tipos de diarrea pueden funcionar (y hay que saber en cuales) Kaopectate, Pepto Bismol, Lomotil, Imodium, Vibramicina, Flagyl (metronidazol), etc. Todos tienen sus riesgos y limitaciones, lo que no falla y no debe de faltar en su botiquín de montaña son los sobres de suero oral.
Como de costumbre, se agradecen ampliaciones o correcciones, por ahí habrá algún especialista en el tema, yo no lo soy.