LA LUZ DE LO PROFUNDO
1 julio 2004
Obra de nueve fotógrafos espeleólogos y de un gran grupo que logró que se realizara, el día 1 de julio se inauguró la exposición itinerante de Fotografía Espeleológica en el Museo de la Luz, en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
|
Es emocionante traer a la luz de aquà fuera la poca luz que llevamos dentro para ver lo que pocas personas pueden ver.
AmÃlcar Jiménez
Las doce del dÃa en el Museo de la Luz, en el Centro Histórico de la Ciudad de México. Hora y sitio curiosos para encontrarse con espeleólogos. Pero han asistido, junto con algunas decenas de personas, a la inauguración de la exposición
FotografÃa Espeleológica. Un listón que cierra el paso y antes unas palabras de quienes se han esforzado en promover una visión del mundo subterráneo y, detrás, quienes también han apoyado.
AmÃlcar Jiménez Amaya, el espeleólogo que más fotografÃas expone en el Museo, menciona que Â?Es emocionante traer a la luz de aquà fuera la poca luz que llevamos dentro para ver lo que pocas personas pueden ver.Â? Han unido la pasión por la espeleologÃa con la pasión por la fotografÃa con el resultado de formas que son poco vistas en una exposición abierta al público general.
Omar AmÃlcar Jiménez Amaya, José Luis Arredondo, Gustavo Vela Turcott, Eduardo López Montealto (cubano), Moramay Mónica MartÃnez Jiménez, Saúl Castañeda Contreras, Sergio Ortega Herrera, Rodrigo Remolina Anzures, y Antonio EcheverrÃa Lozano son los nombres de los espeleólogos que muestran su trabajo tras haber cortado el listón y dar acceso al público asistente al museo.
Las palabras de AmÃlcar a la entrada de la exposición lo dicen todo:
Una imagen fotográfica es algo a lo que estamos tan acostumbrados que no siempre, cuando vemos alguna, pensamos cómo fue tomada o los problemas que el fotógrafo tuvo que sortear para captarla.
Sin embargo, cuando observamos fotografÃas del interior de las cuevas, necesariamente debemos pensar en el momento en que fueron tomadas. Si fantaseamos con un entorno hostil para la naturaleza del hombre, un ambiente oscuro, húmedo, frÃo, generalmente desconocido, con un suelo no siempre firme Â?o, a veces, sin suelo, cuando se está colgado de una cuerdaÂ?, nos acercamos a la realidad de lo que hay detrás de cada una de las imágenes aquà expuestas.
El esfuerzo fÃsico y los riesgos a los que se enfrentan los espeleólogos se ven recompensaos con la satisfacción de poder registrar pequeñas porciones de una realidad desconocida bajo tierra, que ha permanecido en la oscuridad por siglos.
El espeleólogo, convertido en fotógrafo o viceversa, es el portador de la luz, una suerte de deshacedor de tinieblas que registra con su cámara escenas nunca antes vistas y, las más de las veces, conmovedoras.México, D. F., Julio 1 de 2004
La exposición estará abierta al público hasta el dÃa 14 de agosto. La entrada es libre y habrá además un
programa de conferencias para todo público.
FotografÃas de Antonio EcheverrÃa Páginas: 1 2 3