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INTENTO AL FITZROY
 Después del ascenso a la Aguja Guillaumet, Carlos Macotela e Ismael Pérez asedian al legendario Fitz Roy, pero una tormenta los detiene durante una semana dentro de una tienda de campaña. Este es el punto de vista de un Ismael cansado de inactividad.
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Hola.
Sólo quiero comentarles que lo último que hemos hecho fue pasar toda una semana encerrados en la tienda de campaña por mal tiempo.
Salimos el lunes rumbo a Campo Río Blanco que es sólo para escaladores. Es un lugar aislado pero sin ningún problema de que se roben las cosas mientras escalas. La idea era subir al Fitz Roy por la ruta es la franco-argentina y el plan era abastecer un paso superior, hacer vivac ahí y salir por eso de las 12 de la noche para subir una pared de hielo-roca de 300 metros; después un collado de 100 metros (creo) para iniciar la escalada de 650 metros más para terminar con una parte de aproximadamente 300 metros hasta la cumbre. Luego descenderíamos hasta los rapeles de la ruta por eso de las 8 del día y regresar por la noche.
Todo sonaba muy bien, pero al día siguiente todo cambio. Las nubes se presentaron sobre la zona descargando toda el agua que tenían, generando nevadas en la parte alta con vientos muy fuertes. Todo esto duró hasta el día de ayer, pero el pronostico indica que durará otra semana.
La pared, por lo que pudimos apreciar, está bastante cargada de nieve cubriendo las grietas, parte de la pared y el acercamiento es demasiado peligroso.
Ahora hemos descendido al Chaltén para reorganizar la última semana que estaremos por estos rumbos.
He de comentarles que muchas cordadas de diferentes países se han quedado en el intento ya que la condiciones meteorológicas son muy malas. Y sólo una cordada argentina alcanzó el largo 10 de la ruta, pero descendió por el mal tiempo. Hicieron el regreso entre nevadas.
Sin duda el Fitz Roy es el Fitz Roy y nada le pide a los Himalayas.
Ismael Pérez Colomer.
¡Siempre ascendiendo!
