Ayer, Liaño logró hacer cumbre en el Cho-Oyu, una de las montañas más altas del mundo, con 8 mil 201 metros sobre el nivel del mar.

A las 11 de la mañana, tiempo de Nepal, el mexicano, acompañado por una expedición compuesta por tres estadounidenses, dos nepalíes y un sudafricano, logró vencer las adversas condiciones climáticas que imperan en la montaña para conquistar la cima y sumar otro logro en su exitosa carrera como alpinista.

La conquista de esta montaña en condiciones adversas, no es una situación nueva para el mexicano, pues cuenta con una amplia experiencia en el ramo y entre su palmarés se cuentan nueve montañas en Argentina, Bolivia y Estados Unidos, y varias más alrededor del mundo.

Liaño y los demás miembros de la expedición tienen contemplado su regreso para el día 4 de octubre.

A pesar de que este reto terminó, la ambición profesional del mexicano no tiene límite y ya tiene puesto un nuevo objetivo en su mente.

En diciembre venidero, planea partir hacia el Aconcagua, de 6 mil 962 metros sobre el nivel del mar, todo como preparación para una ambiciosa expedición que tiene como objetivo central alcanzar la cima del Everest, lo cual tiene previsto realizar en marzo.

Con este logro, Liaño mantiene viva la tradición de buenos escaladores mexicanos.

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Septiembre 24 de 2004