Adrián Eusebio FarfánViernes 2 de agosto de 2002 Hemos llegado a Lima a las 18:15 horas del dia 1 de agosto. Nos quedamos en el hotel
Dorado Inn de Lima. Mañana 3 de agosto a las 22:00 horas salimos a Huaraz, son 8 horas de viaje en autobús. Hasta el momento todo va bien.
Gisele MontañoLima, Perú a 2 de agosto de 2002Hola a todos
Bueno, escribo para decir que ya estoy en Perú, estoy en Lima.
Llegamos anoche. Conseguimos un hotel, cenamos y fuimos a un casino. Hubo gente que salió ganando y otros que salieron perdiendo. Si no, no tiene chiste!
Hoy en la noche vamos a una ciudad que se llama Huaraz y llegaremos mañana en la mañana después de 8 horas de viaje. Mañana vamos a comprar comida y a subir una montaña para aclimatarnos un poco. El domingo deberemos estar subiendo a donde vamos a escalar y acampar.
Una vez por semana algunas personas van a bajar a otra ciudad llamada Caraz, donde hay Internet (según nos dijeron, porque en Huaraz no hay). No sé si voy a poder bajar a esa ciudad todas las semanas, pero voy a intentarlo, para poder mandar noticias.
Un gran beso a todos,
Gi
Ismael PérezSábado 3 de agosto de 2002 Que onda Carlos. Ya estamos en Huaraz, donde estamos terminando de preparar las cosas para poder partir mañana hacia el Pastoruri para iniciar ahà el periodo de aclimatación porque está a una altura de 5,200 metros. Esto lo realizaremos en un solo dÃa. Al regreso de este lugar partiremos hacia la Esfinge.
I.P.C.
¡Siempre ascendiendo!
Santiago RodrÃguezDomingo 4 de agosto de 2002Pues aun no llegamos a la Esfinge y seguimos en Huaraz. Desde el viernes que llegamos poco antes del amanecer. Hoy subimos al Pastoruri (5,200 m.), que el único propósito fue el aclimatarnos para evitar problemas en el campamento base de la Esfinge (4,500 m.)
Esta montaña en realidad no tiene ninguna dificultad, es la lengua de un glaciar que por cierto en estos últimos años se esta deshelando a un ritmo acelerado. Está cerca de Huaraz y en su base tuvimos la oportunidad de escalar en una pared de hielo de doce metros, como parte de la aclimatación y también para poder practicar este tipo de escalada que es tan común aquà en Los Andes.
La vista por supuesto es maravillosa y cualquiera podrÃa venir aquà simplemente para disfrutar los paisajes y la bondad de la gente de aquÃ.
Pero en fin, mañana partimos hacia la Esfinge. De Huaraz viajaremos a Caraz para de ahà llegar a la Laguna de Parón, y finalmente tras una caminata de cuatro horas llegaremos al campamento base. Para la ultima parte rentaremos uno o dos porteadores para ayudarnos con la comida (que es mucha). Cada porteador cargará entre 25 y 30 kilos. El resto del equipo lo llevaremos nosotros y también servirá como ejercicio de aclimatación.
Es muy importante estar bien aclimatados, ya que en la pared pasaremos probablemente dos o tres dÃas y la cima está a los 5,300 metros. Asà es que por el momento todos estamos listos y hay muchas ganas por subir. Lo mejor aun falta...
Carlos Antonio Macotela MartinezHuaraz, Lunes 5 de Agosto de 2002 Llegamos sin contratiempos el dÃa 1º a la ciudad de Lima, con excepción de que sustrajeron equipo de Luis Alberto, de los cual no nos darÃamos cuenta hasta el dÃa 3. El dÃa 2 nos vimos obligados a pasarlo en la ciudad de Lima por razones fuera de nuestro control, horarios y desinformación. Bueno, más bien: mala información sobre éstos, asà que tomamos el autobús a Huaraz hasta las 10 de la noche y llegamos a la llamada Capital del Andinismo a las 4 de la madrugada del dÃa siguiente.
Aquà localizamos a los contactos que habÃamos hecho por Internet: Julia (propietaria del Hotel Barcelona) y Milagros (guÃa de escalada de la compañÃa Monttrek) quienes nos proporcionaran hospedaje gratis e información detallada de nuestro objetivo: La Esfinge.
El Hotel Barcelona tiene una excelente vista de la Cordillera Blanca y desde cualquier lugar de la ciudad se ven en el horizonte montañas nevadas con un brillo intenso que contrastan con el azul del cielo. El resto del dÃa lo utilizamos para comprar provisiones y organizar la salida al glaciar Pastoruri, de 5,200 metros según la cifra oficial, pero de sólo 5,090 según nuestro altÃmetro. Es una lástima observar el retiro de las masas glaciares en toda la Cordillera.
En el Pastoruri, Zian, Santiago e Ismael aprovecharon para hacer un poco de escalada en hielo y de paso estrenar unos tornillos que consiguieron a precio de risa aquà en Huaraz. ¡Tengo unas muy buenas fotos de ellos escalando!
Yo me les querÃa unir pero los malestares no me dejaron, realmente no sabÃa si era mal de altura, el desayuno tan pobre de la mañana o el cuerpo cortado que sentÃa intermitentemente, incluso antes de salir de México. La respuesta llegó bastante rápido: esa noche, de regreso en el Hotel Barcelona, tenÃa ya fiebre con escalofrÃos y la angina derecha inflamada, razón por la cual el grupo decidió archivarme en el Hotel hasta que mejore, pero me dejaron en compañÃa de Gisele, quién también sufre de un poco de tos.
Mis protestas no surtieron efecto, yo proponÃa hacer guardia en la Laguna de Parón, mientras ellos porteaban el equipo y provisiones al Campo Base, pero ellos argumentaron que la altura y el viaje no serÃan beneficios para mi actual estado. Asà que aquà estoy, varado en un hotel sin poder salir, mientras mis compañeros continúan con nuestro objetivo. Realmente estoy viviendo la pesadilla de todo escalador. El grupo salió hoy a las 8:40 am con destino a la Laguna de Parón. Espero alcanzarlos pronto.
Saludos desde el Hotel Barcelona, Huaraz, Perú.
P.D. Gisele es una enfermera muy estricta y no me permite salir ni siquiera a mandar un mail, razón por la cual lo he redactado para que ella lo transcriba y envÃe para tranquilidad de la familia y amigos. Mi diagnóstico es amigdalitis y ya estoy tomando antibióticos. Al terminar el tratamiento saldremos a Parón.
Carlos Antonio Macotela MartinezMartes 6 de Agosto de 2002Cambió el diagnóstico y ahora es una faringitis purulenta con principios de bronquitis y el doc de acá dice que si me cuido en dos o tres dÃas me podré ir acercando a la pared.
Carlos Antonio Macotela MartinezHuaraz, Perú 9 de agosto de 2002. Bueno, por fin estamos un poco recuperados asà es que mañana saldremos a Parón para alcanzar a los demás. El clima por acá continua perfecto para escalar por las mañanas aunque desgraciadamente los dÃas no son tan largos como en Yosemite. Aquà oscurece a las seis de la tarde e incluso en la Esfinge el sol debe ocultarse tras la pared a partir de las dos.
Necesitamos ponernos las pilas para recuperar un poco la condición perdida con la enfermedad, antibióticos e inactividad de una semana entera, asà que realmente lo único que aspiro hacer por una semana por lo menos, será caminar alrededor de la pared. Trataré de subir caminando por detrás para tomar algunas fotos de las cordadas en los últimos largos. Con un poco de suerte, cuando me toque el turno de ponerme los pies de gato el clima se mantenga como hasta ahora.
Gisele MontañoViernes 9 de Agosto de 2002 Bueno, aquà parece que las cosas van mejorando.
Después de casi una semana encerrados en un cuarto de hotel, parece que ¡por fin vamos al campamento base! No que me quejo mucho, ya que necesitaba unas vacaciones (antes de venir termine el semestre y estuvo medio de locos).
¡Pero mañana (ojalá) se acaba la flojera y vamos de camino a Caraz! Para seguir hasta la Laguna de Parón y subir al campamento. Ahà han de estar nuestros siete mugrosos compañeros esperándonos.
Si alguien se quejaba de cómo manejan los mexicanos, deben venir a ver qué tal manejan los huaracinos. Aquà sà hay mucho más taxis que coches, y todos, pero todos te tocan el claxon. A veces es insoportable, y parece ser que ni los de aquà aguantan mucho eso.
La ciudad es pequeña y hay una calle (creo que es la principal) donde hay puro comercio, una tienda al lado de la otra, y es bien chistoso, porque las propagandas son asÃ: peluquerÃa-turismo de aventura-renta de equipo; o: pizzeria-trekkings-rafting-renta de equipo. ¡Lo juro! ¡Como cinco negocios en uno! Ese es el bussines del futuro.
Pero por esa calle solo pasean extranjeros, obviamente reconocibles de inmediato por sus extrañas ropas (botas o chanclas, playera, pantalón y cabeza amarilla, perdón, son rubios) lo que difiere mucho de la gente de Huaraz, donde las mujeres (la gran mayorÃa) lleva un sombrero, trenzas (2 de preferencia), faldas hasta un poco abajo de la rodilla y vienen cargando gran peso en la espalda, eso cuando no cargan niños, lo que las fuerza a andar encorvadas hacia adelante. Lo que he presenciado, es una mujer asÃ, y a su lado iba ¡su esposo! SÃ, y claro que no cargaba nada. Iba muy feliz con las manos en los bolsos.
En todos esos dÃas ha hecho mucho sol. En la tarde, a veces, aparece alguna que otra nube, pero no ha habido amenaza de lluvia sobre la ciudad. Espero que siga asÃ.
Desde aquà se pueden ver algunas montañas con nieve y parecen que no están tan lejos... Es muy bonito ver cómo cambia la coloración de la nieve con el transcurso del dÃa. A veces están blancas, otras veces amarillentas, crema, rosadas... es muy extraño estar tan cerca de montañas tan enormes... no sé, pero creo que imponen ¡y de qué manera! Es como si dijeran: "Aquà mando yo". Esta ciudad vive de las montañas, y para las montañas.