{"id":19627,"date":"2012-06-06T20:51:49","date_gmt":"2012-06-07T02:51:49","guid":{"rendered":"http:\/\/montanismo.org\/?p=19627"},"modified":"2012-06-07T00:16:01","modified_gmt":"2012-06-07T06:16:01","slug":"testimonio-de-vida-en-los-andes","status":"publish","type":"post","link":"http:\/\/montanismo.org\/2012\/testimonio-de-vida-en-los-andes\/","title":{"rendered":"Testimonio de vida en los Andes"},"content":{"rendered":"
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Testimonio de vida en los Andes<\/em> es un relato de una expedici\u00f3n a los Andes ecuatorianos escrito por Jaime Arteaga. Es el relato es el de una expedici\u00f3n m\u00e1s a los Andes, pero con una consecuencia importante: Jaime tiene que ser operado y pierde una pierna. Las razones las explica \u00e9l mismo en su relato, que fue dado a conocer por Internet hace varios meses.<\/p>\n

En el relato se aprecian m\u00e1s cosas de las que el mismo Jaime menciona y el prop\u00f3sito de este art\u00edculo es se\u00f1alar los errores que se cometieron en esa expedici\u00f3n y que probablemente llevaron a ese desenlace. Quisimos pedir el permiso del propio Jaime para hacer el an\u00e1lisis y publicarlo, permiso que nos otorg\u00f3.<\/p>\n

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\n La expedici\u00f3n<\/strong><\/p>\n

Un grupo de amigos decide ir a los Andes asumiendo que ser\u00e1n sus \u00faltimas ascensiones en alta monta\u00f1a. Saben que deben prepararse y se entrenan. En febrero de 2010, van al Iztacc\u00edhuatl. \u201cEl volc\u00e1n se ve\u00eda majestuoso, impenetrable, a\u00fan para los m\u00e1s osados, la nieve lo cubr\u00eda todo, incluso el manto plateado se extend\u00eda 10 kil\u00f3metros a la redonda\u2026 en esta ocasi\u00f3n con la mayor\u00eda del equipo, todos j\u00f3venes, ascendieron un poco la monta\u00f1a, pero, para no exponer al grupo, decidi\u00f3 retornar al campamento, pues el estado y el espesor de la nieve, hac\u00edan peligroso el ascenso.\u201d<\/p>\n

En octubre de 2010 partieron rumbo a Ecuador con la mira de subir el Chimborazo (6,310 metros), el Cotopaxi (5,897) y el Cayambe (5,790). Su primera monta\u00f1a ser\u00eda el Chimborazo y pasaron dos noches en el refugio Whymper. Seg\u00fan el gu\u00eda, <\/em>\u201c<\/em><\/strong>el plan era solo estar una noche pero aqu\u00ed empec\u00e9 a notar un comportamiento un poco raro en Jaime, que ya hab\u00eda notado anteriormente en otras cumbres al estar a m\u00e1s de 4000 msnm en los entrenamientos, cosa que yo atribu\u00eda a que se estaba aclimatando, por eso propuse quedarnos dos noches en vez de una, porque pens\u00e9 que necesitaba m\u00e1s tiempo para aclimatarse\u201d.<\/em><\/p>\n

\u201cEl plan trazado al inicio, era subir y acampar a los 5500 msnm y el siguiente objetivo era llegar a la cumbre ubicada a 6310 msnm, ah\u00ed hacer el \u00faltimo campamento y regresar\u201d, comenta Jaime. A su primer campamento llegaron a las 16:00 horas del d\u00eda que abandonaron el refugio. Durmieron en tiendas separadas: Jaime en una y sus dos compa\u00f1eros en la otra.<\/p>\n

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\u201c\u2026sin embargo yo no sent\u00eda la alegr\u00eda como en otras monta\u00f1as, estaba como si algo me faltara, como cuando vamos a un lugar sin el permiso de la familia. Me sent\u00eda taciturno y melanc\u00f3lico, pensaba que era debido a la altura, aunque ya hab\u00eda estado a ese nivel, sab\u00eda que la disminuci\u00f3n de ox\u00edgeno act\u00faa de diferentes formas por lo que no le preste atenci\u00f3n, aun cuando tropec\u00e9 en dos ocasiones en el campamento y estuve a punto de perder el equilibrio.\u201d, escribe Jaime de esa primera noche.<\/p>\n

Al d\u00eda siguiente, Jaime continuaba perdiendo el equilibrio, pero continuaron. Dejaron instalado el campamento y continuaron con una mochila ligera para \u201cllegar a la cumbre, tomar fotos y regresar a dormir al mismo lugar\u201d. A los 5,700 metros<\/p>\n

\u201c…saqu\u00e9 mi c\u00e1mara de la chamarra para tomar una foto y al pararme se me dobl\u00f3 el pie derecho, solt\u00e9 la c\u00e1mara que se fue por la pendiente de la arista hasta el vac\u00edo; en ese momento llegaba Ricardo, se hinc\u00f3 para empezar a sentarse cuando vio que yo no estaba sentado, si no parado y peligrosamente inclinado viendo hacia la parte izquierda del glaciar, por lo que me dijo:
\n \u201c\u2014Jaime, \u00bfqu\u00e9 haces?, \u00a1si\u00e9ntate!\u2014 a lo que le respond\u00ed:
\n \u201c\u2014Se me cay\u00f3 la c\u00e1mara, estoy viendo donde se detiene para intentar recuperarla\u2014
\n \u201c\u00c9l volteo nuevamente y me dijo:
\n \u201c\u2014No, si\u00e9ntate Jaime, de todos modos no podemos bajar all\u00e1 por ella\u201d<\/p>\n

A una pregunta de c\u00f3mo se sent\u00eda, \u201cle contest\u00e9 que continu\u00e1ramos pues no sent\u00eda nada que me frenara y tendr\u00eda m\u00e1s cuidado en la traves\u00eda pero Ricardo respondi\u00f3 que \u00e9l se sent\u00eda bien de condici\u00f3n pero que si sent\u00eda cansancio y sugiri\u00f3 regresar\u201d.<\/p>\n

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Ricardo se hab\u00eda dado cuenta de las cosas y por eso hab\u00eda propuesto abandonar la cumbre y regresar: \u201cJaime se andaba tropezando con los vientos de su casa de campa\u00f1a, y que se hab\u00eda cortado la mano sin darle demasiada importancia al hecho\u201d. Y tambi\u00e9n propuso otra cosa: regresar todos juntos. Jaime acept\u00f3 el retorno.<\/em><\/p>\n

\u201c<\/em>Ser\u00edan como las 10:00 hrs, cuando dimos vuelta, me cargu\u00e9 la mochila y al intentar caminar el pie derecho no me soportaba, por lo que tuve que caminar arrastr\u00e1ndolo, no ten\u00eda apoyo en \u00e9l, lo que me dificultaba caminar, algo me estaba pasando y no sab\u00eda que suced\u00eda.\u201d<\/p>\n

Regresaron al campamento y lo desmontaron y para descender buscaron una ruta menos \u201caccidentada\u201d que la de su ascenso el d\u00eda anterior. Su b\u00fasqueda fue ardua y de repente Jaime perdi\u00f3 la noci\u00f3n de su pierna:<\/p>\n

\u201c\u2026camin\u00e9 hacia \u00e9l pero al desplazarme arrastrando el pie derecho, ya no lo sent\u00ed, por lo que ca\u00ed de lado, que intent\u00e9 clavar el piolet, pero como iba dirigido sin control, este rebot\u00f3; estaba en una peque\u00f1a canaleta, gir\u00e9, abr\u00ed piernas y manos para detenerme de las paredes, al mismo tiempo que Riqui se arroj\u00f3 y me sujeto de la mochila; as\u00ed detenido de las paredes con manos y crampones, no resbal\u00e9 nada. Me levant\u00e9, quise caminar y ya no ten\u00eda apoyo alguno en el pie derecho, no lo sent\u00eda en absoluto. Me empez\u00f3 a doler a la altura de la rodilla, me di cuenta que algo estaba muy mal y deb\u00eda enfrentarlo.\u201d Sin embargo, a una pregunta de sus compa\u00f1eros, contest\u00f3 solamente que le dol\u00eda el pie.<\/p>\n

\"\"<\/a><\/p>\n

A las cinco de la tarde volvi\u00f3 a perder el control de su pierna y cay\u00f3. \u00bfQu\u00e9 le pasaba? Su respuesta fue que \u201cen la ca\u00edda anterior hab\u00eda sufrido un esguince, pero pod\u00eda continuar. No les quise decir que el pie no me respond\u00eda, que estaba muy mal y me costaba un gran esfuerzo seguir, pero ten\u00eda que continuar.\u201d<\/p>\n

Acamparon en una plataforma despu\u00e9s de que una gran laja hubiera pasado rozando cerca de ellos. Una vez dentro de su bolsa de dormir, Jaime \u201cafloj\u00e9 las agujetas de la bota pl\u00e1stica, as\u00ed como el calcet\u00edn de hule espuma interior y descubr\u00ed un poco el pie derecho, al revisarlo note que estaba frio de la rodilla hacia abajo, blanco, totalmente insensible, conclu\u00ed que \u00a1Mi pie estaba muerto!, \u00bfPor qu\u00e9? \u00a1No lo sab\u00eda!\u201d<\/p>\n

Comenz\u00f3 una etapa muy dif\u00edcil para Jaime: \u201cSi amanezco vivo, \u00bfhasta d\u00f3nde llegar\u00e9 as\u00ed?, \u00bfllegar\u00e9 al refugio?, y mis compa\u00f1eros, \u00bflos voy a retrasar y a exponer?\u2026 \u00a1No!, No tengo derecho, ellos est\u00e1n bien y tienen a su familia que los esperan, posiblemente ma\u00f1ana los convenza de que se adelanten y yo continuar solo y como pueda desplazarme\u201d.<\/p>\n

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A las siete de la ma\u00f1ana continuaron el descenso. Jaime recibi\u00f3 la ayuda de sus amigos durante el descenso, pero el caso es que sus movimientos estaban cada vez m\u00e1s restringidos, sin poder usar una pierna y con una mochila de aproximadamente 15 kilos a la espalda, lo que indica que ellos a\u00fan pensaban que se trataba de un esguince severo.<\/p>\n

\u201c\u2026me desplazaba interrumpiendo el paso para insistirle a los Ricardos que me dejaran, que continuaran ellos pero la respuesta siempre fue \u00a1No!, yo habr\u00eda hecho lo mismo.\u201d Finalmente llegaron al refugio, en medio de una nevada. Era el 23 de octubre y al d\u00eda siguiente ingresaba al hospital. Hasta ese momento, sus compa\u00f1eros fueron notificados que no se trataba de un esguince sino de algo que pon\u00eda en peligro la vida de Jaime.<\/p>\n

El d\u00eda 28, Jaime perd\u00eda el pie derecho porque la sangre se hab\u00eda coagulado d\u00edas atr\u00e1s: una trombosis arterial hab\u00eda detenido el flujo sangu\u00edneo hacia el pie. El otro pie tambi\u00e9n sufri\u00f3 de trombosis pero el tratamiento lo salv\u00f3.<\/p>\n

Testimonio de vida en los Andes<\/em> es un relato bastante largo. Si quieres leerlo en su totalidad, puedes checar el archivo PDF<\/a> o asomarte a Facebook<\/a>.<\/p>\n

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Diez puntos importantes del relato<\/strong><\/p>\n

El relato comienza hablando de una preparaci\u00f3n. De los tres miembros del grupo, dos ten\u00edan 61 y 67 a\u00f1os de edad. Jaime ten\u00eda 61 y los otros dos eran padre e hijo. Los que salta a al vista es:<\/p>\n

1. La primera salida de preparaci\u00f3n para ir a los Andes, a una monta\u00f1a de m\u00e1s de seis mil metros, s\u00f3lo subieron un poco \u201cpara no exponer al grupo\u201d.<\/p>\n

2. En el refugio Whymper, el gu\u00eda se da cuenta que Jaime no est\u00e1 del todo bien, pese al plan de entrenamiento que llevaron durante meses.<\/p>\n

3. Durante el primer d\u00eda de ascensi\u00f3n, a los 5,500 metros, Jaime ya no se sent\u00eda bien.<\/p>\n

4. A los 5,700, comienza a perder el control de su pie. Sus amigos lo notan, pero \u00e9l lo atribuye al cansancio y decide continuar. Ricardo (67 a\u00f1os) decide abandonar la monta\u00f1a.<\/p>\n

5. Cuando comenzaron a bajar, el pie ya no le respond\u00eda y lo tuvo que arrastrar, apoy\u00e1ndose de alguna manera en \u00e9l, pese a todo.<\/p>\n

6. M\u00e1s adelante volvi\u00f3 a tropezar y entonces Jaime respondi\u00f3 que le dol\u00eda el pie.<\/p>\n

7. A las cinco de la tarde, vuelve a caer y para no preocupar a sus compa\u00f1eros, decide decirles que en la ca\u00edda anterior tuvo un esguince.<\/p>\n

8. Por la noche, Jaime se dio cuenta que su pie estaba muerto.<\/p>\n

9. Su pensamiento se desplaza hacia el \u201cque se salven ellos, y yo que me quede atr\u00e1s\u201d.<\/p>\n

10. Todo el tiempo sigui\u00f3 cargando la mochila con el mismo peso. Posiblemente le quitaron algunas cosas, pero su mochila estaba muy pesada para su condici\u00f3n.<\/p>\n

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An\u00e1lisis<\/strong><\/p>\n

En esencia encontramos dos tipos de errores: el primero recae en sus compa\u00f1eros. Hasta donde es posible leer en el relato, sus compa\u00f1eros hicieron todo lo posible por ayudarle y salvarlo, pero sin saber que le estaban salvando la vida, pues s\u00f3lo sab\u00edan que ten\u00eda un esguince y le costaba trabajo caminar. Sin embargo, en monta\u00f1istas que han ido ya al Aconcagua, detalles de ese tipo debieran verse con m\u00e1s claridad. Lo cierto es que cualquier \u201cculpa\u201d que pudieran haber tenido, se opaca porque Jaime les ocult\u00f3 la informaci\u00f3n necesaria.<\/p>\n

El principal error es el de la v\u00edctima: no proporciona informaci\u00f3n necesaria. Se sent\u00eda mal, no ten\u00eda control de su pie y a\u00fan as\u00ed \u00bfs\u00f3lo dec\u00eda que le dol\u00eda? \u00bfUn esguince cuando no lo siente y pierde el control? \u00bfUn cansancio cuando sabe que est\u00e1 muerto su pie?<\/p>\n

\u00bfQu\u00e9 hubiera pasado si hubiera dicho desde el principio que ten\u00eda problemas? Quiz\u00e1 hubieran bajado, le hubieran quitado peso y lo hubieran metido de inmediato a un hospital. Posiblemente hubiera salvado el pie. Posiblemente\u2026 eso es ya especulaci\u00f3n. Pero tambi\u00e9n es posible que no hubiera habido cambios.<\/p>\n

Lo que s\u00ed me llama la atenci\u00f3n es que en su perspectiva, era m\u00e1s importante no estropear su \u00faltimo viaje de alta monta\u00f1a a su salud o, peor a\u00fan, a sus compa\u00f1eros. Mucho se habla del compa\u00f1erismo de la monta\u00f1a, pero Jaime no vio que estaba perjudicando no s\u00f3lo a su pierna sino que pon\u00eda en peligro la vida de sus compa\u00f1eros.<\/p>\n<\/div>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

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