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En 1996, Andrés hizo un intento por llegar a la cumbre del Everest con dos compañeros por la vertiente norte, pero lo hicieron el 10 de mayo, el día en que en la cara sur murieron varios por la tormenta que los atrapó. Los tres bajaron al campamento 3 y al otro día Andrés no reaccionaba. Sus compañeros creyeron que ya no iba a reaccionar y lo abandonaron. Cuando llegaron al Campamento Base, Héctor arregló una mochila y subió hasta donde estaba Andrés. Lo encontró vivo y lo hizo reaccionar.<\/p>\n

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Sabía que tenía que bajar por su propio pie. Nadie le iba a ayudar. Caminaba unos pasos y se caía. Respiraba 30 o 40 veces y se volvía a poner de pie para volverse a caer. Fue el episodio de sobrevivencia más fuerte que he presenciado, con un hombre aferrándose a la vida como nadie. Así llegó al campamento base y sobrevivió. Eso me dio idea muy clara de su estatura y su terquedad a la vida.<\/p>\n

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