EL ABANICO
Lugar: Volcán Popocatépetl, Parque Nacional Izta-Popo
Estado: Puebla y Estado de México
Ruta: Raúl Hernández Favila (abierta en febrero de 1980 por Carlos Rangel y Eduardo Mosqueda)
Tipo: Escalada mixta
Nivel: 5.9 en escalada libre. Secciones de nieve y hielo entre las paredes. Protecciones A1 hasta A4. Terreno peligroso.
Temporada óptima: Unicamente a principios de año, de preferencia después de las grandes heladas de fines de enero o principios de febrero. En otras temporadas puede resultar peligroso
Tiempo invertido: Seis horas
Ruta de descenso recomendada: Directa
El Abanico es una enorme pared de más de 300 metros de altura donde existen condiciones de escalada mixta. Algunos geólogos creen que esta pared formó, junto con la Torre Negra y el Peñón de Nexpayantla, un cráter gigantesco de lo que hoy es el Popocatépetl. La pared en sí consta de tres tramos de roca y tres corredores de nieve y hielo.
Se sale del refugio El Queretano a las 4 de la mañana, se bordea El Castillo por el lado izquierdo y se entra en la pendiente que baja desde La Cortada (esa aguja de roca frente al refugio El Queretano). Esa pendiente lleva al escalador directamente a la pared. El Abanico es una pared que, en sí misma, forma un semicírculo, por lo que llegar a la pared principal implica entrar al centro del semicírculo. Esto se hace por el corredor de hielo más bajo. Al entrar en esa cavidad, se siente una fuerte soledad que es, quizá, uno de los factores más importantes.
Al dar la vuelta a la muralla de La Cortada, se puede apreciar la enorme pared con todos sus detalles. Existe una piedra plana desde donde se puede observar detenidamente (el día anterior) la pared para encontrar la ruta. Una vez en la pared, se encuentra la ruta de la siguiente manera:
- Es la única parte de toda la pared en la que hay una grieta de dos pulgadas de ancho (para encuñar las palmas de las manos) y de unos cuantos metros de altura.
- Cuarenta metros por encima de la base de la pared, existe un techo de dos metros.
- El inicio de la ruta está justamente por debajo del final del segundo corredor.
Salvo la grieta inicial, la escalada es exterior, con algunas partes donde se pueden introducir las manos y los pies. Se debe escalar en diagonal hacia la izquierda hasta estar a unos metros a la derecha del techo. Aquí es donde se realiza la primera reunión. Se trata de una repisa inclinada y algo incómoda donde no pueden estar mucho tiempo dos personas.
En el siguiente largo de cuerda hay que hacer una travesía hacia la izquierda para pasar por debajo del techo y llegar a un canal por el cual hay que subir hasta llegar al primer corredor. En este tramo se presenta el cambio de la escalada en roca a la escalada en hielo, por lo que hay que tener mucho cuidado si el corredor está lleno o si sólo tiene nieve reciente. El punto de reunión es la base de la segunda pared, al finalizar la zona nevada.
El tercer tramo es una travesía sobre el corredor hasta alcanzar un pilar que forma una chimenea con la pared principal. Se avanza por la chimenea. Es importante remarcar que se trata de roca podrida. Es frecuente hallar fragmentos del pilar sueltos, desde pequeños guijarros hasta masas enormes de más de un metro de diámetro. En este tramo no es posible colocar anclajes. Debido a la caída de piedras, lo más recomendable es asegurar desde el punto de reunión anterior y no desplazarse hasta la base del pilar. El siguiente punto de reunión es la repisa donde termina el pilar por el que se ascendió.
El cuarto tramo es el tramo más difícil. Se trata de una escalada exterior en desplome donde los apoyos son pequeños y muy quebradizos. Ahí el grado de dificultad es el máximo de la ruta y donde los anclajes tienen una seguridad de A4. Se sube con un ligero sesgo hacia la derecha, que es donde la pared está menos descompuesta, hasta llegar al tercer corredor, donde se realiza la reunión en tornillos para hielo.
Una vez reunidos, los escaladores tienen que realizar la travesía del tercer corredor hacia la derecha de la pared hasta llegar a la parte más firme del Abanico. Existe la opción de dar la vuelta completa a esta pared para salir por el hombro derecho y llegar rápidamente al refugio Teopixcalco o ascender la tercera pared en línea recta hasta la cumbre. La segunda opción, que es por donde sigue la ruta, es una escalada libre de grado 5.8+ y el mayor problema es el enfriamiento de los dedos de las manos. Pero la roca firme (en comparación con el resto de la pared) es un incentivo fuerte para llegar a la cumbre.
Observaciones:
Es difícil precisar el grado de dificultad en una roca tan cambiante como la del Abanico, aunque parece ser que 5.9 es el grado máximo. Sin embargo, la dificultad no es el factor limitante para el escalador, sino las condiciones de la roca, lo que hace a esta pared uno de esos puntos que están en el límite entre lo difícil y lo peligroso. Por eso se recomienda que únicamente entren a ella los escaladores que tengan amplia experiencia tanto en escalada en roca como en alta montaña.
Publicado originalmente en Xtreme: the Outdoors in Mexico Homepage, 1995.
Noviembre 1 de 2000.
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